INEVITABLE

Capítulo 6: Dudas y confusiones

Una castaña se encontraba sentada en un cómodo sillón dentro de una oficina, mirando unos artículos los cuales hablaban de Tsubasa, el talentoso jugador japonés que brillaba en la Liga Brasileña, pero hasta ahora no jugaba por su selección, pues la cláusula de su contrato no se lo permitía, y por ende él desde que se marchó no volvió a país natal, y según los artículos, parecería que no volvería a la liga japonesa, sino más bien se marcharía a una nueva liga.

España, ahora comprendo porque no has respondido mis llamadas ni mensajes que te deje, de seguro debes andar muy ocupado en las negociaciones, pronunció la castaña, al tiempo que su celular empezó a timbrar.

Ring ring rng

La castaña tomo su celular, al ver el nombre de la persona que la llamaba, contesto inmediatamente.

Sanae, ya estoy de regreso, y reportándome como quedé contigo, te traje unos regalitos, ¿podríamos almorzar juntos?, escucho.

Kanda, mi buen amigo Kanda, pensó la castaña, haciendo una pausa para agregar: Bien, en 1 hora, ¿estás de acuerdo?

Claro linda, escucho.

¿Cómo te fue?, dijo Sanae.

Bien, califique para la siguiente ronda, pero ella será dentro de 1 mes, y se llevará a cabo en nuestra ciudad, escucho.

¡Qué bueno! agrego la castaña.

¿Te pasa algo?, escucho.

No, nada, contesto Sanae.

Bien, nos vemos en 1 hora, paso a recogerte, escucho.

Luego de ello, la castaña, salió de la página que miraba, al tiempo que la puerta de la oficina se abría y por ella entraba otra hermosa joven.

¿Terminaste los pendientes?, decía Kumi.

Si, respondió con cierta nostalgia la castaña.

¡Qué bueno! ¿entonces podrás ir a comer fuera con nosotros?, respondió Kumi, en referencia a sus demás compañeros de trabajo incluido ella.

No, no podré acompañarlos, Kanda esta regreso y quede en almorzar con él, contesto Sanae.

No hay problema Sanae, y me alegra que salgas con Kanda, tu incondicional, decía Kumi sonriendo.

¿Mi incondicional?, pronunció la castaña.

Sí, él te tiene mucha paciencia, siempre está para ti, creo que deberías darle una oportunidad por serte tan leal, dijo Kumi.

¿Leal?, pronunció la castaña.

Sí, leal, desde que te conoció te ha sido leal y valiente, solo te ha amado a ti, no ha tenido novia, ni siquiera por despecho se buscó a alguien cuando lo desplazaste por Tsubasa, él se mantuvo siempre digno y valiente, soportándolo todo, leal a su amor por ti, conformándose solo con tu amistad, siendo feliz si tú eras feliz, apoyándote siempre en el rol que le correspondía el de amigo, pero creo que ya es momento de que tú devuelvas toda esa lealtad con gratitud, ¿no?, respondió Kumi, mientras la castaña bajaba la mirada.

No comprendo lo que quieres decirme Kumi, yo siempre le muestro mi agradecimiento a él, contesto Sanae.

Pues ello no es suficiente, Kanda es un buen muchacho, te ha amado siempre, siempre ha estado a tu lado, y tu solo le das migajas de tu cariño, ello no me parece justo, pues tú podrías ser feliz con él, pero prefieres ser tan infeliz como él, aferrándote a un amor que no podrá ser, dijo Kumi.

¡Kumi! respondió Sanae.

Sé que Tsubasa es el motivo, sé que sigues aferrada a su amor, a pesar de que lo de ustedes termino y existe solo una amistad, aunque la verdad hubiera sido que ni ello exista, pues me parece egoísta que ambos sigan alimentando una ilusión que no podrá volver a ser, pues él parece que ya no tiene en sus planes futuro, al menos no te ve a ti como la persona con la que quiere compartir todos los días de su vida, porque si fuera así, en todo este tiempo te lo hubiera dado a entender, ¿no?, pero no ha hecho ello, ¿o me equivoco?, agrego Kumi.