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19 de Marzo de 2023

Los dos chicos salieron de casa temprano en busca de la primera universidad a la cual iban a ir, ambos tenían un café en la mano, hechos por Hanbin.

—¿Qué dice ahí? —Hao señaló un letrero no muy lejos de él

—Dice "No cruzar" —giró a mirar al castaño de forma curiosa —¿no ves bien?

—Si veo, solo que no sé lo que dice —rió. Hanbin sólo lo miraba sorprendido —puedo hablar coreano pero sólo estuve un año en el país, me cuesta leerlo. Heeseung me ayudaba en eso...

—Lo vamos a encontrar, ¿sí? —le dio ánimos. Hao sonrió y asintió

Tomaron un taxi, el cual los dejó cerca de la universidad, se bajaron y Hao al ver cada letrero o cartel trataba de leer que decía.

—"Se vende gimbap aquí" —leyó el pelinegro

—¿Compramos? —preguntó el contrario con una enorme sonrisa

—Okey —Hanbin al verlo tan emocionado no pudo decirle que no

Entraron a la tienda y vieron otras más cosas aparte del gimbap, Hanbin pagó todo lo que pidió Hao a pesar que este le haya dicho que no era necesario que haga eso.

—Ahora siento que te debo —dijo mientras había su gimbap para comerlo

—Lo que puedes hacer para pagarme es enseñarme chino

—¿Quieres aprender chino?

—Es un idioma que siempre quise aprender pero nunca tuve la oportunidad. Hasta que te conocí, yo te manifesté —sonrió

—¿Me manifestaste? —cuestionó de forma graciosa incrédulo —apoco se pueden manifestar personas

—Sí —miró a Zhang Hao, este tenía una expresión escéptica en su rostro, Hanbin sonrió al instante al verlo —no lo entenderías, si quieres te puedo explicar

—A ver —a pesar de que en verdad no iba a entender, de todas formas quiso escucharlo

—Uno puede atraer personas y manifestarlas, por ejemplo, yo nunca fui tan cercano a alguien y nadie lo había sido conmigo, tengo amigos pero no es que sean apegados a mí y nunca tuve esa sensación de conectar con alguien, pero de todas maneras quería encontrar a una persona con quien pueda sentirme cómodo... y llegaste tú

—¿Sabes que es lo más gracioso? —sonrió —que yo me siento igual

—¿En serio? —miró curioso

—Me siento así desde que te conocí, sino, no hubiera aceptado irme a vivir casa de un desconocido —bromeó —sentí como si te conociera de antes

—¡Yo también! —dijo con emoción

—Es una sensación muy extraña, es como si...

—Estuviéramos destinados

—No iba a decir eso —rió —pero aunque no lo quiera admitir, es lo más lógico aunque suene ilógico

—Puedes comenzar a creer en el destino a partir de ahora, nunca es tarde —lo observó y este frunció el ceño con una leve sonrisa en sus labios

—No lo sé, comenzaré a creer si encuentro a Heeseung

—El destino nos unió para que encontremos a Heeseung, y puedas ser feliz con él

—Eso suena más lógico —volvió a reír —你很可愛 —dijo una frase en chino haciendo que el pelinegro se le quede viendo

—¿Qué significa eso?

—No te voy a decir —dio una sonrisa juguetona y comenzó a caminar más rápido

—Dimeee —corrió hasta alcanzarlo

—No —comenzó a correr viendo un camino lleno de cerezos delante de él —Hanbin lo persiguió.

Las flores de los árboles ubicados en fila en cada extremo del camino comenzaron a caer lentamente con el viento mientras otras que estaban en el suelo, eran movidas por la brisa de este. Los dos chicos cruzaron por la zona. El castaño poco a poco bajó la velocidad mirando las flores caer sobre su cabeza.

—¡Hao! —lo alcanzó casi perdiendo el equilibrio por la rápida frenada que dio

—Cuidado —lo agarró del brazo fuertemente evitando que se cayera quedando más cerca de lo normal. El castaño comenzó a reír por esa situación haciendo que el contrario riera también con él

—Gracias —se reincorporó

—Mira —señaló a los árboles —yo recorría este tipo de senderos junto a Heeseung, siempre nos pareció bonita la primavera, es una pena que haya vivido esa estación sólo una vez con él

Hanbin vio como Hao se entristeció de repente, siempre lo hacía cada que recordaba algo que hizo con Heeseung, y él no quería que cualquier cosa que haga lo deprimiera.

—¿Quieres que te tome una foto? —sacó su celular abriendo la cámara rápidamente —el clima está muy bonito

—Claro —se colocó en medio del medio dejando a la vista los extremos de los árboles. Hanbin tomó varias fotos

—Ya está —giró el celular poniéndolo en posición horizontal y cambiando la cámara —vamos a tomarnos una foto

Hao se acercó a su lado arreglándose un poco el cabello. Justo cuando el pelinegro dio la cuenta regresiva para tomar la foto, las flores comenzaron a caer de nuevo por el viento, haciendo que una cayera en el cabello de ambos, quedando la foto de esa manera. Se veía bonito, parecía como si lo hubieran preparado, cuando en realidad todo surgió por casualidad.

—Wow —Hao se impresionó al ver la selca —¿eso también lo manifestaste?

—No —Hanbin comenzó a reír con lo que dijo, parecía que lo preguntaba en serio —te la voy a enviar. Listo, ¿vamos?

—Sí

Caminaron uno al lado del otro opinando acerca de las fotos hasta que por fin llegaron a la dichosa universidad. Como era domingo no había nadie, solo uno de seguridad en la entrada. Hanbin se dirigió a él enseñándole su carnet, este al verlo de inmediato hizo una reverencia y lo dejó pasar. Hao se sorprendió al ver eso.

—Popular en todos lados —dijo con sarcasmo

—Les tuve que preparar cafés a todos en mis tiempos de estudiante porque estaba haciendo campaña universitaria —mencionó haciendo que Zhang Hao riera de nuevo

—你很可愛 —sonrió

—¿De nuevo?

—Mira, creo que es por ahí —caminó con velocidad hacia donde señaló haciendo que Hanbin lo persiguiera de nuevo

Mi segundo primer amor ☆ HaobinWhere stories live. Discover now