Mi Joven Esposo

Capítulo 54 - El peso en mi corazón

Xia Xi acompañó a Xia Hui hasta la puerta del palacio y observó cómo el carruaje que la llevaba se alejaba hasta que desapareció de su vista. Permaneció allí, inmóvil. Ahora era invierno y el clima era frío, pero el manto de Xia Xi era lo suficientemente grueso como para mantenerlo abrigado. Lan Duo'er estaba preocupada de que se enfermara y lo instaba a regresar, pero justo cuando Xia Xi estaba a punto de irse, vio a Chu Lan acercarse desde la distancia.

Montar a caballo no estaba permitido dentro del palacio, y Chu Lan era el único que podía hacerlo. Era alto y estaba montado en un caballo alto y majestuoso, exudando un aura imponente. La luz de las lámparas del palacio iluminaba su rostro en la oscura noche, dándole un tono frío. Sus ojos también parecían indiferentes y helados, pero tan pronto como su mirada se encontró con el rostro de Xia Xi, ese frío se rompió instantáneamente. Era como si el hielo y la nieve se derritieran, e incluso su rostro normalmente inexpresivo se iluminó con una sonrisa radiante. Incluso extendió su mano y saludó a Xia Xi.

Al ver la apariencia de Chu Lan, el corazón de Xia Xi, que había estado algo melancólico, de repente se llenó de calidez.

Chu Lan espoleó su caballo y se acercó rápidamente a Xia Xi. Se bajó con facilidad y dio unos pasos para colocarse frente a él. Primero ajustó la capucha del manto de Xia Xi antes de decir: "¿Por qué estás parado aquí en el viento frío? ¿Has terminado de ver a tu vieja amiga?"

Xia Xi asintió suavemente, dándose cuenta de lo que Chu Lan quería decir, y dijo: "El rey sabe con quién me encontré hoy". Chu Lan tomó su mano y caminó lentamente con él, mientras que los demás mantenían una distancia prudente y los seguían. Chu Lan dijo: "Si querías encontrarte con alguien, naturalmente tenía que investigar a fondo antes de permitirte verlo". Sonaba dominante, pero Xia Xi no se sintió molesto. En cambio, se quejó un poco, diciendo: "Chu Lan intencionalmente no me dijo que la persona que iba a ver era la Princesa Hui. Me hizo angustiarme por mi elección. Si lo hubiera sabido antes, no habría estado tan nervioso. Después de todo, como te he dicho antes, solo tuve un leve conocimiento de ella cuando estaba en el palacio".

Chu Lan apretó un poco más su mano y dijo: "Lo hice a propósito, ¿qué puedes hacerme?"

Xia Xi se sintió un poco impotente y su voz se suavizó: "¿Por qué lo harías?". Rápidamente pensó en la razón y se sonrojó un poco, y dijo suavemente, "Ella, ella es mi hermana, no puedo tener algo con ella pase lo que pase". Chou Lan hizo un mohín y dijo: "Ella bajó tus pantalones y vio tu cuerpo antes que yo. ¿Cómo permitiría que te encontraras con una persona así? Si no me hubiera contenido, la habría echado de la ciudad hace mucho tiempo". Esto aún era algo que le había contado Xia Xi hace tiempo, probablemente cuando lo estaba contando, Xia Xi estaba confundido por lo que confesó todo sin pensarlo de más, incluso contó sobre este incidente cuando era un adolescente.

La cara de Xia Xi se puso roja, él le rozó suavemente la palma de la mano con los dedos y dijo tímidamente: "La princesa Hui no era sensata en ese momento". Suspiró suavemente de nuevo y dijo: "Después de varios años, no esperaba que su situación se volviera así, si ella no se hubiera negado a venir al principio, ella sería la que estaría con el rey ahora". Al escuchar esto, Chu Lan dijo insatisfecho: "No hay un 'hubiera', hay una línea matrimonial entre nosotros, si eres tú, siempre serás tú. ¿Cómo me podría gustar otra persona?"

Las palabras de amor pronunciadas en tal tono parecían sonrojar aún más a la gente, y Xia Xi dijo deliberadamente: "¿Y cómo sabe el Gran Rey que no le gustará?". Chu Lan dijo: "Simplemente lo sé".

Los dos caminaron lentamente hacia el palacio, y Chu Lan vio que estaba de buen humor, por lo que deliberadamente lo incitó para decir más, por lo que preguntó: "¿Qué ha sido de esta princesa Hui ahora? ¿No era ella muy favorecida por el emperador de esa dinastía Xia?"