Mi Joven Esposo

Capítulo 37 - Lo Quiero a Él (R)

Xia Xi suspiró aliviado, no estaba acostumbrado a una luz tan oscura, no podía ver a la otra parte en absoluto, pero podía sentir la temperatura del cuerpo de la otra parte, y Chu Lan incluso estaba lamiendo su agujero, despacio, como si estuviera saboreando algo delicioso. La respiración de Xia Xi se volvió caótica, y dijo suavemente: "Solo tengo un hombre, el rey, y solo espero a que vengas... ah... no..." Sus palabras excitaron a Chu Lan, y él lamió su agujero con más intensidad y abrió la boca para lamerlo. Los labios gordos y tiernos fueron succionados y luego envueltos completamente alrededor de su coño, sacando la lengua y apretando su agujero.

El placer continuo hizo que Xia Xi gritara lascivamente. Quería alejar a Chu Lan con la palma de su mano, pero el placer lo hizo reacio. Finalmente, no pudo evitar presionar su cabeza contra sus nalgas, con la esperanza de empujar más fuerte.

El agujero gordo y suave fue lamido y mojado, y la carne se retorcía hambrienta, queriendo devorar más comida deliciosa, pero pronto pareció ser lamida nuevamente y fluyó más jugo. La cordura de Xia Xi casi colapsó, todo su cuerpo tembló y no le tomó mucho tiempo dejarlo salir.

El placer de chorrear lo hizo sentir como si estuviera atrapado en una nube, y todo su toque estaba controlado por la lengua del hombre. No pudo evitar gemir y retorcerse incontrolablemente, y pasó mucho tiempo antes de que se calmara gradualmente. Pero Chu Lan todavía lo estaba besando, lamiendo su coño con más fuerza, chupando su polla y pronto movilizó su lujuria nuevamente.

Fue un poco más difícil llegar al clímax por segunda vez, al menos parecía que no era suficiente, Xia Xi no pudo evitar suplicar: "Chu Lan, Chu Lan, dame..."

Chu Lan vio que él había llegado al clímax, mordió su clítoris y preguntó alegremente: "¿Qué quieres que te de Xier?"

Las mejillas de Xia Xi estaban rojas y calientes, y se alegró de que no hubiera luz en la habitación en este momento, por lo que no tuvo que mostrar completamente su vergüenza. Se acercó a tocar a Chulan y susurró en voz baja: "Quiero que el rey me moleste".

Anteriormente, cada vez que decía esa frase, Chu Lan se emocionaba y se encargaba de complacerlo. Pero esta vez, a propósito, respondió: "No entiendo, Xi'er, ¿cómo quieres que te complazca?" Lentamente, se acercó, le dio un beso en los labios y se acercó a su oído, sonriendo levemente. "Soy joven y no entiendo esas cosas, Xi'er. Tú eres mayor que yo, enséñame."

Xia Xi se sentía extremadamente tímido y no podía evitar recordar lo que sucedió hace dos o tres años. En aquel entonces, Chu Lan era verdaderamente inocente, no entendía nada y creía que con solo besarse podrían tener hijos y convertirse en una pareja real. En ese momento, él no entendía y trataba de ser considerado. Aunque claramente se excitaba, no entendía por qué estaba así y hacía todo lo posible por evitar que Xi'er se diera cuenta.

Ante su falta de respuesta, Chu Lan insistió y lamió ligeramente su lóbulo de la oreja, susurrando suavemente: "Xi'er, enséñame rápidamente, ¿cómo se hace el acto sexual? Mi miembro está muy duro, se siente inflamado y un poco dolorido. ¿Será que estoy enfermo?" Él tomó la mano de Xia Xi y la colocó sobre su miembro erecto, incluso se atrevió a frotarla indecentemente en la palma de su mano.

La respiración de Xia Xi se volvió desordenada, sabiendo que podría haber leído algunos guiones pornográficos nuevamente y aprendido estos trucos de ellos. Sostuvo el pene con un latido acelerado. El pene del hombre se volvió extremadamente grueso y probablemente había alcanzado la cima de su desarrollo ahora. Daba miedo tocarlo, por grande y duro. Xia Xi no podía negarse a sí mismo que no había tocado este durante mucho tiempo, estaba pensando en eso en su corazón, y su cuerpo también estaba pensando en eso, y el coño que había sido lamido se estaba abriendo y cerrando. Chu Lan lo instó nuevamente, Xia Xi solo pudo tartamudear: "No, no es que esté enfermo..."