Mi Joven Esposo

Capitulo 29 - La acogiste

Chu Lan lo miró con codicia, metió una mano en su abrigo y dijo: "¿Si no es para seducirte, entonces a quién? Xi'er, no te dejes seducir por ella, ¡eres mío!"

    Xia Xi no podía reír ni llorar, "¿Cómo podría seducirme? Yo, yo no soy un hombre normal..." ¿Cómo puede gustarle a una mujer normal? Es más, Cai Huan no le tenía ese tipo de cariño.

    Chu Lan le acarició las nalgas, frotó el bulto de carne suave a través de una capa de pantalones y dijo: "Te ha crecido esto de todos modos, por lo que no hay garantía de que algún día tengas un capricho y quieras probar a una mujer, entonces ella se aferrará a ti con tanta fuerza, te abrazara todos los días de semana, ¡Y no! Si ella no te está seduciendo, ¿podría ser que está tratando de seducirme?" Chu Lan nunca pensó en este aspecto en absoluto. Para él, desde que se casó con Xia Xi, nunca ha puesto a otras personas en sus ojos, sin importar hombres o mujeres, y mucho menos Cai Huan. Siempre ha estado ignorando a Cai Huan, y ocasionalmente la nota, y también está molesto porque Xia Xi está demasiado cerca de ella, especialmente después de conocer el cuerpo real de Xia Xi, ver a los dos juntos es una monstruosidad para él. ¿Qué método debe usar?  Debería despedir a la doncella y encontrar algunas monjas mayores para servir a Xia Xi.

    En este momento, el joven emperador vio claramente el rostro de Xia Xi y frunció el ceño, al darse cuenta de que su oración casual en realidad había revelado la verdad. Recordó la situación en la mañana, Xia Xi todavía estaba durmiendo en ese momento, parecía que era más probable que tratara de seducirlo, hizo una pausa y dijo: "Aquí, esto no está permitido. No puedo tolerar a una persona así, Xi'er, le pediré a alguien que la envíe al reino Xia mañana".

    Al escuchar sus palabras, Xia Xi no sabía cómo se sentía y dijo apresuradamente: "Mi señor, Cai Huan me siguió por un tiempo, por favor no hagas esto..."

    Chu Lan estaba un poco impaciente y se mordió los labios moderadamente, con un tono amargo, "¿Realmente significa algo para ti al protegerla así?" Xia Xi sacudió la cabeza apresuradamente en negación, "No estoy..." Dudó por un momento y luego dijo en voz baja: "Chu Lan, ¿qué tal si... la tomas..." Se sintió extremadamente incómodo mientras lo miraba. Dijo estas palabras, como si hubiera sido apuñalado por algo, en ese momento, se dio cuenta de que su madre podría no tener tanto afecto por su padre, de lo contrario, ¿cómo podría estar dispuesto a compartir el favor con tantas mujeres? ¿O, al principio, estaría celoso y triste, pero se acostumbrara lentamente?

    Entonces, ¿se acostumbrará algún día, y cuando vea a Chu Lan con otras mujeres, cuando vea como le sonríe a las demás y actúe como un bebé, estará tranquilo y sin molestias?

    Xia Xi solo estaba avergonzado de no poder hacerlo ahora. No tiene idea de cuándo se volvió posesivo con este joven esposo. Esto obviamente está mal. Chu Lan es el emperador, entonces, ¿cómo puede pertenecerle solo a él?

    Cuando Chu Lan escuchó sus palabras, se congeló por un momento al principio, pero cuando entendió, sus pupilas se contrajeron repentinamente y la sonrisa en su rostro se desvaneció, sus ojos estaban fijos en él y su voz era un poco fría. "¿Qué dijiste?"

    Xia Xi no se atrevió a mirarlo, bajó la cabeza y dijo incómodo e impotente: "Quiero decir... ¿no quieres simplemente aceptarla... Cai Huan, Cai Huan no es sensata, pero no tienen malas intenciones. Además... es bonita... ella me dijo que está enamorada de ti..." La voz de Xia Xi se volvió seca mientras hablaba, y debido a que no recibió una respuesta de Chu Lan, gradualmente se volvió incapaz de continuar.

    Las manos del niño que lo buscaban a tientas se detuvieron. Aunque los dos todavía estaban inclinados juntos, sus cuerpos parecían ponerse rígidos. Xia Xi de repente sintió frío, a pesar de que la habitación estaba muy caliente. Después de un tiempo, Chu Lan todavía no emitió ningún sonido, Xia Xi mordió la bala y levantó la cabeza para mirarlo a la cara. Cuando se encontró con su mirada fría, todo su cuerpo tembló repentinamente y su rostro se puso pálido.