La princesa Anneliese nació el 12 de diciembre de 1494, sí tan solo unos meses después de la llegada de su futuro amor.
El qué parecía ser un hermoso día en su gran Imperio, el Imperio Francés, pronto se convertiría en su martirio. Anne, cómo solían...
- Mi sultán. - Un agha entró a los aposentos de su sultán, haciendo una reverencia.
- Habla. - Dijo el sultán con seriedad.
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- El rey Arthur falleció la mañana del 17 de agosto. - El agha habló ante la orden de su sultán.
- Allah bendito lo tenga en su reino. - El sultán Selim se levantó de su trono para salir de sus aposentos.
Entonces dio la orden de qué todas sus cosas fueran llevadas al carruaje qué lo llevaría a Manisa pues antes de partir, llevaría a alguien quien alegraría a Anneliese.
Por qué desde que Anneliese partió a su tierra natal, no iba sola. Uno de sus mejores espías iba con ella pues el sultán se quería asegurar de qué ella llegará bien a París.
Más no se imagino qué aquella tragedia sucedería.
Por lo tanto iría a acompañar a su querida princesa.
Manisa. 3 días después.
- Sultana. - La criada de confianza de la sultana Hatice entró a sus aposentos causando qué está despertará asustada.
- ¿Qué paso? ¿Süleyman otra vez desea verme? - Pregunto un poco adormilada.
- No sultana, es algo mejor. - Dijo la joven con una sonrisa.
- Habla entonces. - La sultana Hatice dijo mientras se levantaba de su cama.
- El sultán Selim está aquí, y me ha dicho qué se preparé...irán a Francia. - Leyla le dijo a la sultana con alegría.
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- Gracias Allah por escuchar mis plegarias. - Hatice abrazo a su amiga mientras rezaba.
- Alistare sus cosas sultana, usted vaya a ver a nuestro sultán. - Leyla le dijo una vez qué se separaron.
