𝐋𝐎𝐕𝐄𝐑 | Sultɑ́n Süleymɑn

Chapter 13.

1 año después.
Manisa, 1514.

Ha pasado mucho tiempo desde la boda del príncipe y la sultana, tan solo 1 mes después de está, la sultana se enteró qué estaba embarazada nuevamente, el mismo día en qué Damla y Eléonore volvieron a su vida.

De igual manera envío cartas a sus padres, estos se emocionaron mucho al saber qué su pequeña princesa se encontraba bien.

Está vez dio a luz a trillizos, sus pequeños leones Osmán, Murad y Kasim nombres los cuáles el gran sultán Selim les otorgó.

Hatice estaba más qué encantada con la pequeña Mahpeyker quién ya tenía un año de edad.

La sultana Hafsa intento mantener una relación estable con su nuera, pero el ver cómo sus hijas se reverencian ante ella le hierve la sangre.

Entre los esposos todo iba bien, estaban más qué felices.

Hasta qué llegó ella.

Mahidevran Hatun llegó al harén de príncipe Süleyman siendo un regalo del Khan de Crimea.

En parte Dilaşub estaba triste pero sabía qué ella siempre estría en el corazón del príncipe por lo qué dejo de preocuparse tanto.

— Sultana. — Mahidevran hizo una leve reverencia pues se puso frente a la sultana Dilaşub la cuál caminaba por el harén para presumirle lo qué la madre del príncipe le pidió.

— Dime hatun. — Dilaşub miró a la mujer frente a ella viendo como la sonrisa de está se desvanecía al escuchar su apodo.

— Está tarde iré a los aposentos del príncipe, cómo sabe hoy regresa de un largo viaje de caza y su majestad desea qué yo lo entretenga. — Mahidevran dijo con aires de superioridad.

— Puedes pensar lo que quieras. Yo soy la única que está en el corazón del príncipe y soy su esposa. Y ya nadie puede cambiar eso. — Dilasub dijo mientras se tocaba aquel collar qué el príncipe le había regalado el cuál era el tulipán qué representaba a la dinastía otomana, y antes de qué la joven dijese algo, Dilaşub salió del harén dejándola con la palabra en la boca.

Dilaşub camino a sus aposentos con lágrimas en sus ojos, a veces extrañaba su vida donde no tenía qué sufrir por algo estúpido.

— ¿Sultana qué sucedió? — La primera en acercarse a ella cuándo entro a los aposentos fue Eléonore.

— ¿Se encuentra bien sultana? — Está vez preguntó Sümbül Agha.

— Mahidevran...— Dijo el nombre de aquella mujer soltando unas pequeñas lágrimas. — ella irá está noche a los aposentos de su alteza.

— Oh por Allah. — Sanavber Hatun se sorprendió al oír eso.

— No se preocupe mi sultana, hoy estaremos con usted para lo qué necesite. — Gül Agha intento remediar la situación.

— Muchas gracias, la verdad no sé que haría sin ustedes. —  Dilaşub alzó su vista para darles una sonrisa.

Tal y cómo Mahidevran había dicho fue a los aposentos del príncipe, pasando la noche con él.

Esto poco le importó a Dilaşub, pues ella era la qué mandaba en Manisa y en todo el imperio, tal y cómo su suegro se lo había confirmado.

Aposentos del príncipe Süleyman.

El príncipe Süleyman se encontraba alistándose para tomar una siesta hasta qué las puertas se abrieron dejando entrar a una mujer muy hermosa, pero no más qué su esposa.

Iba a rechazarla pero por alguna extraña razón sintió qué la necesitaba.

La mujer se acercó hasta el para después agacharse y besar su bata.

Una vez qué se levantó, el príncipe la míro con una sonrisa.

— ¿Cuál es tú nombre? — Le pregunto atónito ante su belleza.

— Mahidevran, alteza. — Respondió la muchacha.

El príncipe simplemente la tomó de su mentón para acariciarla, su vista se nublo y quedó embobado de aquella mujer.

Süleyman cayó en las mentiras de su madre y pasó la noche con Mahidevran.

Olvidándose de la fidelidad que le prometió a su esposa.

Olvidándose de la única mujer a la qué ama y a la cuál le acaba de romper el corazón.

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