10 || Cercania en el peor de los casos ||

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125 D.C

Había pasado una semana desde que la familia de Rhaenyra arribo a King's Landing, en menos de tres semanas iban a volver a dragonstone hasta la espera de otra visita, que podría tardar años, Sir Harwin había viajado de improvisto a Harrenhal pidiéndole perdón a la princesa que ella acepto sin ningún problema deseándole seguridad en el viaje, su padre había caído enfermo y solicitado su presencia lo antes posible.

Aeva había creado una rutina en King's Landing, cada noche se quedaba en el balcón dibujando o viendo las estrellas y el gran dragón que dormitaba en la playa hasta sucumbir al sueño e incluso leyendo los libros de Alto Valyrio que los maestres le entregaban, luego cada mañana iba con sus hermanos a entrenar con Sir Criston, ignorando al príncipe Aemond, y en la tarde iba a volar con Vaelon antes de la cena familiar que tenían todos los días a petición del Rey.

La princesa observaba el horizonte sobre el lomo de su dragón, respirando el aire fresco.

Vamos Vaelon ya hay que volver.

El dragón rugió en protesta, pero termino cediendo a la petición de su jinete, cuando llegaron a la fosa, Daemon la estaba esperando, cuando la vio descender de los cielos y bajar de la criatura se acercó a ella.

—¿Cómo estuvo el vuelo?

—Estuvo bien, recorrí el reino entero.

—Me imagino la reacción de la gente al ver un dragón negro asechando los cielos.

—Un pequeño recordatorio de quien manda—Dijo Aeva con una sonrisa, Daemon le sonrió de vuelta.

Ambos salieron de la fosa una vez que los cuidadores se llevaran a Vaelon, Aeva siguió a su padre hasta los aposentos de él y su madre, ahí estaba Rhaenyra con Luke ayudándolo con su alto valyrio.

Aeva se sentó al lado de su hermano y empezó a escucharlo traducir lo que decía la escritura, Rhaenyra y Daemon los dejaron solos para hablar en privado.

Daemon cerró la puerta de la habitación para que los niños no los escucharan.

—¿Qué pasa?

—Las cosas con Alicent se están volviendo más tensas.

—¿Y qué pasa con eso? ¿Por qué ahora está enojada?

Rhaenyra suspiro y le dio una mirada a la habitación, Daemon frunció el ceño y apretó la mandíbula.

—¿Es por Aeva? —Rhaenyra asintió—¿Y ahora que dice la "reina" sobre nuestra hija?

—No le gusta la forma en que ella actúa, pelear junto a sus hermanos, a usar la espada, ser todo lo contrario a una princesa según ella. Sigue recalcando que deberíamos empezar a buscarle marido.

— Aeva dejo claro cuando llegamos que no quiere casarse para complacer a la corona y definitivamente eso incluye a Alicent, yo apoyo los deseos de mi hija no me importa lo que diga la reina.

—Lo sé, Daemon. Y yo también estoy del lado de Aeva, pero creo que es hora de hablar con ella del tema, definir cuándo ella decidirá empezar a buscar pretendientes.

—Está bien, pero será lo que ella diga... ¿Qué más dijo Alicent?

—Solo eso, ya la conoces.

—¿Y qué dice Viserys?

—Supongo que espera que nosotros seamos los que tomemos la decisión, después de todo es nuestra hija.

—Así es, parece que mi hermano entiende más eso que su esposa.

Fire and Blood (Aemond Targaryen)Where stories live. Discover now