Capítulo 2.

1.4K 213 74
                                    

Sereno y con la respiración mitigada, se interna a las instalaciones donde funge como mandadero de los oficinistas en un gran conglomerado.

—Llegas tarde, Sasuke—la rubia reprende severa.

—Lo siento directora Ino—reverencia respetuoso a modo de disculpa—He tenido un percance en el camino—omite detalles, pues la situación ha sido bochornosa y aunque se siente satisfecho por haber humillado a un alfa, no es algo digno de contar.

—Bien, da igual—relaja el gesto, ya que el muchacho es usualmente puntual, así que no quiere ser muy dura—Hay mucho que hacer, hoy es mi último día y quiero presentar al nuevo jefe de cuadrilla a todos los empleados—explica sonriente—Encárgate de los preparativos.

—Sí, ahora mismo—procede a acatar la orden y comienza con su labor diaria.

Y no es que Sasuke Uchiha amara ese trabajo donde básicamente ejercía como la secretaria de todos los oficinistas del área de marketing, pero era la opción más viable y mejor pagada para un estudiante universitario. Lo que más amaba de ese trabajo, es que la gran mayoría de empleados eran betas con excepción de uno que otro omega.

¿Has escuchado lo que dicen?

Dos mujeres del área de ventas murmuran entre sí en el cuarto de café, donde el beta prepara a pedido de su jefa.

No, ¿A qué te refieres?

—Es sobre el nuevo director de marketing.

—Oh... ¿El que sustituirá a la directora Ino?

—Si... Escuche que es un alfa.

—¿Un alfa?

—Sí, dicen que es muy atractivo.

—¡Oh, ya le quiero conocer!

—¡Yo también!

La información le sienta como un gancho al hígado. Lo que faltaba, tener que trabajar para un maldito alfa. Les detestaba tanto, sintiéndose superiores a los betas, solo por sus genes animales y su fuerza sobre humana. Bueno, no es como si tuviese opción, necesita el trabajo, así que hará lo que siempre ha hecho, acatar mandatos y no involucrarse más de lo debido.

**************

Los empleados de marketing se reúnen en la sala de juntas donde esperan con ansias al nuevo director. Este se ha retrasado más allá de la hora acordada, dando una evidente mala impresión.

Por su parte, Sasuke hace su trabajo en otro piso, realizando las impresiones correspondientes que Ino le ha pedido para la reunión.

—Buenas tardes a todos—el tono grave y atrayente les hace girar hacia la puerta de la estancia, donde entra un alfa, quien suponen será el nuevo jefe. Los murmullos se acallan ante la impetuosa presencia de dicha personalidad.

Una sonrisa deslumbrante se dibuja en la viril faz del caballero distinguido y camina respingado hacia la silla principal que se ubica junto a la aún directora.

—Lamento la demora, he tenido un percance en el camino—la humilde disculpa hace suspirar a hombres y mujeres—Directora Ino—toma la mano de la joven en un gesto de caballerosidad y besa el dorso de esta.

La simpática mujer sonríe fraternal—Basta Naruto, déjame presentarte al equipo que tendrás a cargo, solo falta nuestro asistente de área y podemos comenzar.

Carga con mucha dificultad los documentos solicitados en una mano y una caja de bocadillos en la otra. Haciendo peripecias, logra abrir la puerta y apoya con prisa la pila de documentos en la mesa larga donde todos se reúnen. Alza la vista y su pálida faz adquiere un semblante cadavérico, cuando mira quien está sentado en la silla principal.

—Oh, no— piensa con la boca seca y la frente sudada, su suerte de huérfano no puede ser tan mala ¿oh si?

—¡Tú! —el hombre rubio se incorpora como si tuviese un resorte—¡Eres Tú!

—¿Qué...? ¿Qué está pasando? —la rubia cuestiona confundida, pues tanto ella como el resto de oficinistas, son víctimas de la asfixiante tensión en el aire—¿Se conocen?

—¡Sí! —el agraviado le señala con el dedo acusador—¡Este beta me ha tirado orines en la calle!

Los presentes se tapan la boca, pues declaraciones de esa índole y sin contexto previo, son bizarras por decir menos.

—¡Eso no es verdad! —se defiende, aunque no tenga muchos argumentos—¡Bueno, sí! ¡Pero fue en defensa propia!

—¡Señores! —la mujer les abronca para calmarles—Vamos a continuar con esta reunión y después arreglaremos este problema en privado.

El alfa recupera su compostura y recuerda que como director ejecutivo tiene que dar buena impresión a sus empleados, así que no planea empezar mal. Vuelve a sentarse mientras Sasuke busca su lugar donde le corresponde.

La junta continua mientras chispas vuelan en la sala, ambos hombres se miran a muerte.

**************

La ex directora, el nuevo director y el auxiliar de sección, se sientan a hablar sobre el tema pendiente, en la ahora oficina del alfa.

—Bien—respira hondo y procede a arreglar la situación—Naruto, el puesto ahora es tuyo, así que acaben con este malentendido.

—Yo no tengo ningún problema—expone despreocupado—Si este beta me ofrece una disculpa, puedo olvidar el asunto—los ojos añiles, le miran escrutador.

—No pienso ofrecer una disculpa a un alfa prepotente—aprieta los dientes con rabia.

—Soy ahora tu jefe—manifiesto socarrón—Así que me debes respeto.

Aprieta los puños por la frustración y es que, en el fondo, el otro tiene razón. No le conviene estar en malos términos con el ahora director de sección. Tampoco es como que pudiese encontrar un mejor empleo que ese, así que con el sentimiento de abyección inundando su quebrado orgullo, decide que pedirá una disculpa.

—No tienes que hacerlo—el alfa se pone de pie, pues ha notado la aflicción del muchacho y ha sentido un poco de lástima—Solo olvidemos el asunto—él ya es un adulto adentrado en los 40, no quiere ser inmaduro y atormentar al pobre chico—Comencemos desde cero—extiende su mano para el beta—Mi nombre es Naruto Namikaze y soy el nuevo jefe de sección de marketing, espero podamos llevarnos bien, Sasuke Uchiha—la sonrisa del atractivo hombre es genuina y amable.

—Espero lo mismo director Namikaze—acepta el cordial pacto de trabajo, aunque esto no signifique que el alfa le caiga bien.

Continuará....

¡MALDITO  ALFA!Место, где живут истории. Откройте их для себя