epílogo.

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Era impresionante el manojo de nervios en el que se había convertido, sus manos tenían una ligera tembladera y sentía como el sudor resbalaba por su frente. No es que se sentía asustado o mal por las futuras noticias, sino que se sentía ansioso, emocionado y feliz, los nervios solo eran una extensión de su felicidad.

Si los resultados salían como él quería, pronto tendría a su segundo bebé, pronto su familia de tres podría convertirse en una de cuatro.

La sola idea de tener un bebé le emocionaba, esta vez todo sería distinto pues tenía a su familia completa, no había amarguras en su corazón o preocupación alguna, estaba feliz de que este posible embarazo podría pasarlo cómodo.

Su primer embarazo fue desastroso, la pasó más en el hospital que en su hogar, los bajones eran recurrentes y su depresión casi lo llevan a una tragedia, para su suerte en aquellas épocas tuvo la compañía de la madre y hermana de Jungkook, era doloroso recordar esos días, nunca hubiese querido que la espera por su amada hija fuese tan triste.

"¿Señor Park Jimin?" Escucho el como una enfermera le llamo.

Jimin se levantó, yendo hacía donde la mujer le guiaba, entró a la oficina de su doctor y con una sonrisa lo espero, dio un suspiro y entrelazo sus manos.

"Los resultados salieron rápido." Dijo el doctor entrando a su oficina, posicionándose en su escritorio con la prueba de embarazo en sus manos. "Lo veo nervioso."

"Estoy ansioso." Sonrió.

"Pues, terminemos esa ansiedad." Le sonrío devuelta para que se sintiera tranquilo. "Felicidades."

El rostro de Jimin se iluminó, tomo la prueba que su doctor le entregaba y con dolor en sus mejillas leyó los resultados, todo era cierto, tenía un mes de embarazo.

"¿No ha tenido ni un síntoma?"

"No, aun no." Negó con la cabeza mientras mantenía su sonrisa.

"Con el tiempo vendrán, por lo que deberíamos comenzar a programar las revisiones para que tenga un embarazo sano y cómodo."

"Lo que usted diga." Aún mantuvo su vista sobre los resultados, estaba feliz, condenadamente feliz.

Lo demás fue historia, programo las revisiones y salió de la clínica, quería llegar lo más antes posible a su hogar, quería contarle a Jungkook sobre la gran buena nueva.

Iría a los brazos de su esposo y padre de sus hijos para decirle que serían una familia de cuatro.

;;

Sus horarios eran variados, a veces Jungkook se quedaba en su casa todo el día, otras veces llegaba en la noche, otras pocas a medio día y otras recurrentes a las cuatro de la tarde, hoy era aquel día en el que Jungkook permanecía en su hogar.

Jimin se excuso de salir diciendo que iría a comprar cosas para cocinar, fue difícil librarse de Jungkook pues él quería acompañarlo a toda costa por lo que tuvo que dejarlo limpiando su casa. Al entrar por la puerta lo vio barriendo el pasillo mientras escuchaba música a todo volumen, sonrió de ternura.

El alfa estaba concentrado en la música que ni se dio cuenta de la presencia de su esposo, siguió con su trabajo mientras cantaba con su melodiosa voz, solo se detuvo cuando sintió el aroma de Jimin a sus espaldas, el omega lo había abrazado de la cintura.

"¿Por qué entras en silencio? Me matarias de un susto." Dijo Jungkook mientras reía.

"Pues tu deberías estar atento, ¿no?" Rió de vuelta, besando el cuello de Jungkook. "Veo que limpiarte bien."

"Siempre limpio bien." Rodó los ojos. "El que lo hace mal eres tu, flojo."

"Dices que lo hago mal porque no hago las cosas como a ti te gustan, tenemos distintas formas de limpiar."

"En eso tienes razón." Beso su mejilla y le sonrío, contento de tener a su esposo a su lado. "Déjame terminar esto."

"Voy a la cocina, ¿quieres galletas?"

"Sabes que sí."

Con las bolsas en sus manos y la prueba en su bolso, Jimin se apresuró a desempacar lo que había comprado, puso galletas en un plato y sirvió dos vasos de leche chocolatada. Pensó una y otra vez el como le diría a Jungkook la buena nueva, podría poner la prueba debajo de su plato, tal vez entregarle el sobre como correo, podría tirar la prueba y hacer que él la recoja, se concentro tanto en su sorpresa que no se percato que su esposo de ojos grandes ya estaba sentado en la isla tomando una galleta en su boca.

"¿Pasa algo?" La voz de Jungkook hizo que saltará en su lugar, por reflejo oculto la prueba en su espalda.

"No."

"¿Qué tienes en la espalda?" Maldición, ¿Jungkook por qué tienes que ser tan observador?

"Nada."

"Bueno." Se encogió de hombros, prestando toda su atención a las deliciosas galletas. "Tienes que comprar una tonelada de estas galletas, son deliciosas."

"Sí."

"También esta leche chocolatada, la compras para Yunjin pero siempre soy yo quien la termina." Rió.

"Aja."

"¿Cocinaras o quieres que yo lo haga?"

"Sí." Seguía nervioso miraba profundamente a los ojos de Jungkook.

"¿Sí, que?"

"Estoy embarazado." Si bien quería que la noticia de su embarazo fuera una sorpresa feliz y bien planeada, los nervios y la ansiedad lo traicionaron, soltó la boca y se atuvo a la graciosa consecuencia.

Parecía que ambos se habían congelado en el momento, ambos se miraban a los ojos mientras tenían ligeramente la boca abierta, todo era silencio, solo se escuchaba la ligera melodía de la música.

"¿Qué?"

"Tengo un mes de embarazo." Trago su saliva fuertemente, como si tragara un pan seco. "Tendremos otro bebé, Jungkookie." Dijo con una sonrisa espléndida en su rostro.

La reacción de Jungkook no se hizo de esperar, apresuró sus pasos para ir hacía Jimin y tomarlo en sus brazos, lo alzó e hizo que se sentará en el mesón, así tendría más acceso a su vientre.

"Jimin." Dijo sonriendo, teniendo sus manos aún en la cintura de Jimin, acariciando su vientre con sus pulgares. "Ahora mismo me has hecho el hombre más feliz. No puedo creer que tendremos otro bebé."

"¿Estás muy feliz?" Pregunto sonriendo y llevando sus manos a los cabellos de Jungkoon para acariciarlos y peinarlos.

"Demasiado." Se agacho hasta poner su mejilla contra el vientre plano de Jimin, cerró los ojos mientras sentía a su omega y a su cachorro cerca de él. "Me haces tan feliz, amor."

Jimin siguió con sus caricias en el cabello de Jungkook, cuando el alfa dejó de besar el vientre de su omega subió su rostro para unir sus labios con los de su esposo, fue un beso que ambos se sabían de memoria, suave y tierno, con caricias y sonrisas tiernas de por medio.

"Vayamos a un restaurante a almorzar." Susurro en sus labios, besando su nariz. "Vamos por Yunjin a la escuela y después nos vamos a un restaurante ¿te parece bien?"

"Me parece bien." Asintió sonriendo y devolviendole el beso en la nariz a Jungkook. "Todo contigo me parece bien."

Dicho lo último Jimin abrazo a Jungkook del cuello, el alfa puso sus manos sobre la cintura de su omega, ambos se quedaron abrazados por un momento, disfrutaron del silencio juntos, la felicidad y el silencio siendo uno.

Al separarse se miraron a los ojos y se besaron una vez más, compartieron sus labios con felicidad, siempre dichosos.

A su familia de tres pronto arribariá una nueva abeja, una pequeña que tendría sus rasgos y la promesa de su amor eterno.





























































y con este epílogo nos despedimos de este au <3

Entre abejas y espinas ; kookmin au omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora