Midnight rain || Mick Schumacher

Capítulo 7

Yas Marina, Andrea había estado algo decaída los primeros días después de haber visto a Mick pero Joe la había reconfortado diciendo que todo pasa por algo, se estaba convirtiendo en un muy buen amigo.

Andrea iba caminando junto a Charles por el paddok, hoy era la última carrera de la temporada así que todos estaban muy emocionados.

-¿Oíste que Mick Schumacher trajo a una chica?- le preguntó una chica a su amiga, pero Andrea había escuchado más que bien.

-¿Segura que no es su hermana?- preguntó la amiga.

-No es su hermana, su hermana se parece a el, está chica es morena, estoy 70% segura que es mexicana.- dijo la chica.

En ese momento fue cuando Andrea decidió acelerar su paso, no era de su incumbencia esa plática y siendo honesta tampoco la quería escuchar. Si Mick tenía una nueva novia, bien por el, se lo merecía.

-Me muero de nervios.- dijo Leclerc soltando un suspiro.

-¿Por?- preguntó Andrea confundida.

-Sof va a conocer a mi mamá y a Arthur.- dijo Charles sonriendo.

-Oh...si, tiene mucho sentido que estés nervioso.- dijo la mexicana.

Siguió hablando con Charles hasta que vio algo que llamó su atención, Mick estaba caminando junto a una chica, estaban abrazados y Andrea conocía demasiado bien a Gina para saber que definitivamente no era ella. Sintió su corazón hundirse en su pecho al verlo felíz, más felíz de lo que se veía con ella. Oía a Charles pero no le prestaba atención, le tenía envidia a esa chica, ella nunca pudo caminar por el paddok con Mick de esa manera. Sabía que se volvería a enamorar.

-¿Me estás escuchando? ¿Qué pasó?- preguntó el monegasco confundido al ver la cara de Andrea, siguió su mirada hasta ver a la pareja riéndose.

-Yo...sabes qué? Mejor ve tu solo a la cafetería, no tengo mucha hambre.- dijo Andrea yéndose sin darle tiempo de decir algo.

Sabías que pasaría, tu lo alejaste. Deberías de estar feliz porque encontró a alguien.

Repetía una voz en su mente, por qué? Era lo único que corría por su mente, por qué ella si puede amarlo sin tener que ocultarlo? ¿Por qué la superó tan rápido? ¿Por qué lo alejo? Mil pensamientos azotaban su cabeza como si se tratarán de campanas.

-Hey, estás bien?- preguntó Sebastian Vettel al verla hecha bolita en un rincón escondido del paddok.

-¿Mmm? Ah, si, estoy bien...solo, nervios.- dijo Andrea sin prestar mucha atención.

-Claramente no son nervios, pero se ve que necesitas espacio así que, si quieres hablar con alguien ahí estaré.- dijo el alemán dándole una sonrisa cálida antes de irse.

Andrea se paró y decidió irse a Alfa Romeo, ya no quería estar rondando por el paddok.

-¡Andy! Te presento a María.- para su mala suerte en cuanto salió de su escondite se encontró a la pareja.

-Oh, hola, mucho gusto...me quedaría a platicar pero tengo que ir a checar unas cosas.- dijo Andrea disculpándose antes de salir corriendo prácticamente.

Entro corriendo al pequeño cuarto que le habían dado y se tiró en el piso, no lloraba, no lo valía pero se sentía horrible, cerró sus ojos intentando concentrarse en la carrera, solo le importaba eso, su prioridad. No supo cuánto tiempo estuvo tirada en el piso con los ojos cerrados pero no fue hasta minutos antes de la carrera que fueron por ella para que se preparará.