Capitulo 4

994 75 23
                                    

Confusión.

Eso es lo único que puedo atribuir al significado que da los gestos en mi rostro, un sentimiento que adquiere cada vez mayor fuerza, una provocada por los tres personajes que tengo enfrente mío, unos que parecen tomar la situación con bastante normalidad.

Mi mente en estos momentos se encuentra trabajando a gran velocidad, tan solo buscando la idea de en que momento estas tres personas acordaron esta reunion, en segundo fue que ellos se volvieron tan cercanos al líder de la manada.

Debo admitir que en cuanto fui casi que obligada a volver a mi casa, dejando atrás la diversión con mis amigos fue algo bastante increíble, mucho mas cuando al llegar a mi casa el único motivo por el cual me querían a sus lados era para tomar café con el Alpha.

No puedo decir que esa situación me resultó bastante normal, no cuando mis padres usualmente no me llaman para esas cosas, pero creo que cuando se trata de este hombre, todo puede cambiar.

Mi atención va directo a mis padres, unos que muestran bastante comodidad con el invitado, unos que en estos momentos parecen no darse cuenta de la incomodidad que mi cuerpo refleja por unas miradas recibidas por parte de nuestro líder, unas que en verdad no deseo recibir, tan solo deseo subir a mi habitación y hacer cualquier cosa que me aleje de este sujeto.

Meto comida a mi boca, mastico y bajo, repito esa secuencia no se cuantas veces, solo se que al comenzar a observar el plato algo vacío, se que pronto saldré de esta silla.

Usualmente en estas reuniones aristocráticas me encuentro mejor, pero parece que hoy no es uno de esos días, mucho menos cuando un repentino toque hace que casi me baje un pedazo de carne sin siquiera haberlo masticado.

Toso, casi que no se cuantas veces, lo único que se es que llamo la atención de mis padres, en especial la de mi madre, quien comienza a observarme con preocupación.

- cariño toma agua... - suelta con rapidez para así servirme el vasado y dejarlo muy cerca de mi mano.

Lo tomo sin vacilación, tan solo queriendo quitar el ardor de mi garganta.

Poco a poco comienzo a sentirme mejor, al menos a lo que concierne a casi atragantarme, porque en cuanto mis ojos dan a parar a mi pierna puedo darme cuenta que no me he imaginado la extraña sensación en mi piel, una que es causada por la gran palma de la mano del Alpha.

Mis ojos se encuentran con los suyos, buscando de alguna manera decirle que no me toque de manera discreta, pero aparentemente no le llega el mensaje, ya que él solo sonríe y así comenzar a mover su dedo pulgar de un lado a otro en mi pierna, como si nada, con total normalidad.

- hija, ¿te encuentras bien? - cuestiona mi padre.

Todos los ojos se encuentran en mi, tengo toda la atención en la mesa, y verdaderamente enserio quisiera decirle que no, que su invitado esta tocándome sin mi permiso, que me siento incomoda, que quiero que se vaya o me dejen ir.

Quiero decirle tantas cosas, pero estamos hablando del Alpha, de un hombre que ya me dio una demostración de lo que puede hacer, un hombre que tiene todo el poder en sus manos, uno que si quiere puede destruir todo por lo que mis padres han trabajo. Por esas únicas razones es que decido respirar y estar en calma, pensar con cautela.

- si, solo se casi me bajo un pedazo de carne sin masticarlo - espeto antes de bajar mis manos a mi pierna y con brusquedad quitar lo que me molesta.

- ten cuidado Clary, puede ocurrirte algo malo y eso ninguno de nosotros nos gustaría - expresa el líder de la manada de una forma que podría decir que no solo se esta refiriendo al pedazo de carne.

BetaWhere stories live. Discover now