38.

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Klaus se estación en la Academia Umbrella.
Años que había pisado ese lugar desde que habían decidido vivir lejos de ahí.

Diego y Cinco lo matarían, pues se había cruzado ciertos altos para llegar, ya que _______________ insistía mucho en llegar antes de que alguno de ellos dos los alcanzaran.

—¿Me dirás que sucede? —volvió a preguntar Klaus.

Ella simplemente no respondió y salió del auto para entrar a la Academia, dejando la carpeta en su asiento.

Klaus la tomó rápido, pues vagamente la había reconocido, aquella vez que él y Ben leyeron sobre la otra ______________. Miro rápidamente y leyó sobre la parte de la máquina.

—Ay, mierda —dijo y salió del auto corriendo hacia la chica.

Cinco y Diego habían llegado 10 minutos después. Número Cinco no tardo en teletransportarse al lado del auto, que estaba vacío. Pero su mirada fue también rumbo a la carpeta.

_______________ bajaba las escaleras del sótano, según donde estaba la dichosa máquina. Accionó el interruptor de luz, rogando a todos los cielos que funcionara, o caminaría a ciegas.

Poco a poco los focos viejos se iluminaron, dejando ver algunos pasillos algo largos. Cuando iba a dar otro paso, escucho los osos de Klaus, que iban hacia ella rápidamente.

—¿Por qué estamos aquí? —dijo mirando a todos lados.

—Quiero comprobar si es cierto —murmuro mirándolo—. ¿Tú lo sabías? Sobre la máquina.

—Claro que no —respondió seguro—. Tal vez sobre la otra tú y que se veía por última vez aquí... —y se quedó callado.

_____________ lo miro unos segundo y siguió caminando. Klaus la volvió a seguir, diciéndole que era mala idea, pero se quedó callado cuando ella la miro mal; así que solo la siguió.

Ambos llegaron a la habitación y ahí estaba la máquina, que parecía que realmente la habían arreglado.

Ella dio un paso más cuando Cinco se teletransporto frente a ella, estaba nervioso por cómo iba a reaccionar.

—Nunca me lo dijiste —habló ella en voz baja, suficiente para que Klaus y Cinco lo oyeran.

—No creí que fuera necesario...

—No lo creíste necesario —repitió de forma sarcástica—. ¡¿No creíste necesario el que yo volviera a ver a mi familia?! —empezó a elevar la voz—. ¿Cuando lo supiste?

Cinco se quedó callado.
Diego había llegado con ellos y miro la máquina algo desconcertado, luego a sus hermanos y al final a la chica, que seguía mirando a Cinco en espera de su respuesta.

—Eso no importa —respondió evitando su mirada.

La chica la miro mientras sentía su enojo ir en aumento. Entonces noto equestrian Cinco llevaba la carpeta en su mano, así que se lo quitó rápido y buscó la hoja donde lo decía, soltando los demás al suelo.

—... Cinco Hargreeves —empezó a leer—, es uno de los posibles causantes que la máquina estuviera dañada. Algunos de sus hermanos pudieron ayudarle —y miró a Klaus y Diego—. ¿Sabían sobre esto?

—Ya te dije que no —dijo Klaus.

—¿De que demonios hablas?

—Diles, Cinco —volvió a mirar a su esposo—, diles como me viste la cara de estupida por años y nunca se te ocurrió decirme que había una posibilidad de ir a mi dimensión y ver a mi familia —soltó sacando todo su enojo—. Diles como solo te importo lo que tú quisieras sin considerarme nada —él solo se quedaba callado—. ¿Realmente algo de lo que me has dicho es real? —su voz se empezó a quebrar—. ¿Realmente lo nuestro es real?

Almas gemelas || Cinco Hargreeves & Tú.Where stories live. Discover now