I'll be by your side - nomin

¿Debería creerte?

— ¿De verdad no funcionó? —Su mirada estaba siendo dura contra aquél individuo.

— ¿Cómo querías que funcionara eso? Aún de ese modo, él seguirá tocando. Una simple y leve herida en el dedo no descompone todo. No seas tonto, Minhyung. —Alguien más se metió a la conversación.

— Exacto, concuerdo con lo que dice él. —Apuntó al recién llegado. —Aparte no quiero seguir más involucrado en esto, de tal forma me siento sucio. Olviden que les ayudaré.

— Está bien, gracias por ayudar en eso. Es algo que no funcionó pero lo intentaste. —Alzó sus hombros y se río. —Con esto... haces mucho por tu amigo. Demuestra que lo quieres mucho.

Bufó y se largó de ese lugar antes de que lo integraran a otro maldito plan.

— ¿Ahora cuál es tu plan? —Haechan sacó un cigarrillo de sus bolsos. — ¿Tienes? —Hizo referencia a un encendedor para prenderlo.

Asintió y lo sacó, más no se lo dió, sino lo prendió él mismo. Hae sonrió coqueto ante tal gesto.

— Destruir al protagonista. —Pudo oler esa "fragancia" para él. Su compañero había sacado el humo de su boca y lo hacía repetidas veces. El olor inundó todo el lugar.

— ¿Piensas matarlo? —Rió cínicamente y le echó un viztazo mientras de nuevo llevaba el cigarro a sus labios.

— No seas estúpido. El protagonista no es él, sino el piano. El piano es el único que al mismo tiempo puede glorificar y destruir la presentación. El sabotaje es mi fiel amigo. —Soltó una amplia y maliciosa sonrisa.

— Entonces... si no hay piano, no hay presentación. El estúpido eres tú al no haber pensado eso desde el principio.

— Lo hice, el chiste es que también quería que Jeno saliera lastimado. —Empezó a mover sus piernas repetidamente, estaba emocionado.

— ¿En qué salió lastimado? —Arrugó su nariz.

— El daño no fue como tal pero él no puede ver sangre, tiene un trauma.—Soltó una carcajada. Y su compañero lo miró extrañado.

— Al parecer fueron muy amigos, como para que supieras tanto de Lee. —Alzó ambas cejas.

— Muchísimo... nunca creí que nuestra amistad se arruinaría. Éramos tan buenos juntos, pero me provocó, el maldito la tuvo que romper, te juro que era muy divertido pero eso cambió cuando se mostró en realidad. Deseo tanto poder burlarme de todas sus desgracias, y hacerle pagar por esas veces en las que me hacía sentir miserable. —Tronó su puño en contra de la barda en la que estaban recargados.

— Dale tiempo al tiempo, lo harás. Y yo estaré dispuesto a ayudarte, también quiero verlo sufrir. Lo conozco lo suficiente.

— Todos sus ex amigos o compañeros fueron víctimas. Más no se atreven a enfrentarlo por miedo. Malditos inútiles.

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En una habitación de color marrón,  con las ventanas abiertas y las cortinas haciendo un espacio para que pudiera pasar la luz.

Pesadamente parpadeaba, ya miraba luz. Otra vez la maldita luz.

Su oír no estaba funcionando al 100, por eso se escuchaba un eco al fondo.

"Una voce poco fa
Qui nel cor mi risuonò
Il mio cor ferito è già
E Lindor fu che il piagò

Sì, Lindoro mio sarà
Lo giurai, la vincerò
Sì, Lindoro mio sarà
Lo giurai, la vincerò"