Capítulo 28

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Capítulo dedicado a...Regi_Ra :D Gracias por estar ahí <3 Gracias, gracias, gracias. Disfruten...



Sé que muchas veces digo que sacarse el maquillaje es esencial para que la piel no se arruine. Es más, yo nunca usé demasiado maquillaje. Solo unas veces me olvidé de sacarme el rímel, y al despertarme tenía manchas negras cubriendo mis ojos. Como ahora, por ejemplo. Las lágrimas habían dejado de correr por mis mejillas, pero el dolor que sentía en el pecho era inmenso. Había llorado por horas, mi pulso se había calmado hace unos minutos, y mi cara estaba hinchada.

    Abrí el agua fría, y la dejé correr. Apoyé mis manos en el borde del lavabo y miré mi reflejo. Exhausta, estaba exhausta. Eran las cuatro de la mañana, y gracias a que no me rendí, Freya ahora está viva. O lo más parecido a eso.

     Al sacar las dagas, abrimos paso a una infección y un derrame. Había perdido tanta sangre que yo fui la primera en vomitar. Cuando Will dijo que no tenía pulso, sentí como la sangre se drenaba por mis venas. Era imposible, todos estábamos en negación. Will estaba en shock. Todos habían decidido que era hora de mover el cuerpo, para que no genere olor. Pero yo me negué y decidí llamar a una ambulancia a escondidas. No la podía dejar, no podía y no quería. A veces es cuestión de fe y confianza. Y la mía decía que ella no estaba muerta. Antes de que sea demasiado tarde la agarré y le di respiración boca a boca mientras que le hacia RCP. Apolo trató, al principio, de detenerme, porque las lágrimas y mi respiración agitada daban a entender que estaba entrando en pánico. Pero cuando una respiración milagrosa y exagerada salió del pecho de Freya, abrió sus ojos por unos minutos y agarró mi mano. Todos nos pusimos a su servicio. Cerré bien las heridas con telas que habíamos encontrado, mientras trataba de dejar de llorar, mientras esperábamos a la ambulancia.

    Cuando por fin los médicos llegaron, le pusieron una máscara para respirar artificial y empezaron a conectar pequeños cables a su pecho. Will no la dejó ni un segundo, supe que iba a estar bien desde el momento en que dejó mi casa.

    Así que, aquí estoy. Tratando de no llorar de alegría. Will no había dicho palabra alguna, hasta que Freya dio su primera señal de vida. Y en este momento, él esta con ella en el hospital. Sonreí secamente a mi reflejo, y mojé mi cara. Agarré una toalla y me sequé mientras sacaba todo resto de maquillaje.

     Dos golpes secos retumbaron por el baño.

-¿Thea?

Respiré hondo, y todo mi cuerpo vibro. Decir que estaba feliz, era demasiado. Estaba atónita, y las imágenes que había presenciado no se borrarían jamás de mi mente.

-Pasa...

Gruñí, al escuchar mi voz quebrada. Apolo entró sin vacilar, y cuando nuestros ojos se encontraron, pude notar el dolor en ellos. Tal vez mi dolor se reflejó en los suyos, somos dos personas diferentes, pero parecía que éramos una sola alma. De esas que a veces escuchar en las películas. Uno siente lo que el otro.

-Siento que hayas tenido que ver eso.-Dijo.

-Yo también.

Apolo se acercó hasta rodearme con sus brazos y guiar mi cabeza al hueco de su cuello. Aspiré hondo y me aparté, mirándolo a los ojos.

-Sé que me lo has dicho muchas veces, y que lo que te diré no te va a gustar-dije tragando el nudo que se había formado en mi garganta- pero aunque no lo quieras escuchar, es la verdad.

-¿De qué estás hablando?

Me alejé de su cuerpo caliente y crucé los brazos sobre mi pecho.

Ojos color fuego [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora