El viaje hasta mi casa no fue nada silencioso. Como estábamos vestidas para ir a un bar, pasamos por la casa de Em para cambiarnos por algo más festivo. Me puse un vestido corto-bastante corto para mi gusto- color azul oscuro que resaltaba mi color de pelo y mis zapatillas. Em y yo no compartimos talle de zapatos. Pero Eme y ella tenían el mismo talle en casi todo. Eme se puso un vestido de verano color verde, que le quedaba pintado y combinaba con sus ojos. Emma optó por una pollera de tiro alto color cereza y un top negro. Estaban hermosas. Al lado de ellas me sentía un topo. Mi pelo color miel hasta debajo de mis hombros no se compara con el pelo de Eme y Emma. Y mis ojos eran dos piedras, al lado de zafiros número uno y número dos. Mi maquillaje era un simple, delineado y rímel. Según Emma hacía que mis ojos grises sean más grandes y brillantes.
Cuando bajamos las escaleras para partir Tré se quedó estático cuando vio a Eme. Literalmente su boca se abrió tanto, que pensé que iba a tocar el piso. Em y yo reímos, por lo que Eme se puso roja y Tré recuperó su postura.
-¿Primo, quieres que te dé antes de irnos una toalla?- Tré la miró con el ceño fruncido.
-¿Por qué querría una toalla?
-Para limpiarte la baba.- Dijo antes de partir en una carcajada.- Si sigues así le vas a dar mal de ojo a nuestra querida Esmeralda.- Emma y yo éramos las únicas que nos reíamos.
-Ja, ja, ja. Muy graciosa Emma. Vamos por favor.- Dijo Eme que estaba claramente avergonzada. Paso por al lado de Tré, tratando de no hacer contacto visual y salió.
-Emma por dios, vas a hacer que la chica me odie.- Dijo Tré.
-Oh tranquilo, nadie puede resistirse a vos. Pero te advierto, si la lastimas estas muerto. Thea es cinta negra.- Lo señaló con el ceño fruncido.
-Eso no es ciert- Emma me miró con su mirada asesina- Digo… eh… sí, soy cinta negra. Así que ten cuidado.- Tré se partió de la risa.
-Ay ustedes sí que son lindas. No la voy a lastimar. Es la chica más hermosa que vi en mi vida.- Dijo con una sonrisa.
-Muy bien Romeo, vamos en busca de tu Julieta.
Al llegar a la entrada de mi casa no pudimos creer los autos que habían estacionados. Eran por lo menos cien o más.
En el jardín había por lo menos cincuenta adolescentes. No me quiero imaginar lo que es adentro.
-Vamos.- Dije. Entramos a la casa y estaban todos bailando apretados, bebiendo o jugando. Algunos ya se encontraban en la zona “caliente”. En eso veo a mi hermanito.- ¡Jav!- grité encima de la música.
-¡Hermana! Pensamos que no iban a venir.- Nos acercamos a él y me dio su mirada de enfado cuando vio mi vestido. Pero su mirada se transformó cuando vio a Emma agarrada del brazo de Tré. Su mirada paso por todo el cuerpo de mi Em.
-¿Y este quién es?- Espetó hacia Tré.
-Oh lo siento, soy Tré Connor. Primo de esta dulzura.- Dijo él de lo más natural señalando a Emma. Trate de ahogar la risa, pero se ve que yo no era la única que trataba de hacerlo. Eme que estaba al lado mío se río y se tapó la boca con la mano. Así que la seguí.
-No sabía que había que preguntar si quería traer invitados.- dijo Emma. El rostro de Jav era vergüenza, furia, y ¿ternura? Diablos sí que lo tiene.
-No, no es eso. Puedes traer a quien quieras. No me importa.- Espetó. Noté como dijo ME. Ya firmó su sentencia de muerte.- Bien, que se diviertan.- Se fue para el jardín trasero, no antes de mirar a Emma, le iba a preguntar algo pero se arrepintió.
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Ojos color fuego [Terminada]
Science Fiction-¡Ya deja de decir mi nombre completo! Parece que estás hablando en serio sobre algo que no tiene sentido. Yo no puedo controlar el clima o la madre naturaleza. Si vino una tormenta de la nada, no le vas a echar la culpa a una persona. Tal vez crea...