|Quince|

2K 180 56
                                    

—¿Crees que debemos salir a la vez?

River se giró hacia Cole.

Él aún se estaba arreglando la ropa.

—¿Por qué no? No creo que en nuestra cara ponga "acabamos de corrernos juntos".

Cole resopló.

—No hables así.—Él lo dijo en un tono suave. Si River no lo conociera, diría que Cole estaba incómodo y tímido.

River se acercó a él y le ayudó a cerrar los botones de su bata.

—De todos modos, deberías quedarte un rato hasta que tu rostro se vea menos sonrojado y tu cabello esté decente.

El tono de piel de Cole se tornó más rojo y River se contuvo de burlarse de él.

–Te odio.

River asintió.

Correcto.

Precisamente por eso es que habían acabado como se encontraban.

—Seguro que algún día te convencerás a ti mismo de tantas veces que lo dices, sigue intentándolo.

Cole le ofreció otra de esas miradas que si pudiera, posiblemente le asesinaría.

—¿Quieres hablar de lo que te pasó las horas que estuviste cautivo?

Cole desvió la mirada.

—No realmente.

River aceptó su decisión. No tenía por qué presionarlo.

—¿Seguro estás bien?—Él por lo menos podía preguntar eso.

Cole rodó los ojos.

—No te preocupes, River.—Él le dio una pequeña sonrisa, para sorpresa del rubio.—Solo me llevé un susto cuando me sentí desnudo, atado y sin saber cómo estabas.

River ladeó la cabeza.

—¿Pensaste en mí?

Oh.

Sintió algo bonito y emocionante en su pecho y vientre.

Se negó a descubrir qué era.

A veces la ignorancia te hace más feliz.

—¿Cómo no hacerlo?—Cole le dio un pequeño golpe en el brazo.—Ahora salgamos, ¿cómo me veo?

River se echó hacia atrás para estudiarlo.

–Definitivamente te pondría de nuevo contra la mesa con las piernas abiertas. Te ves más bonito hecho un desastre.—Señaló poniéndose una mano en la barbilla, pensante.

Cole lo miró como si le hubiera faltado el respeto. River supuso que realmente sí lo había hecho pero no era su culpa, él había tenido una inocente intención. Dentro de lo que cabe.

—No me mires así. Has sido tú quien me ha preguntado cómo te veías: Perfecto para tenerte de nuevo.

—Estás tomando demasiada confianza, Scott. Esto sigue sin cambiar nada.—Cole negó.

River asintió cansado ya de ese discursito. ¿Era eso todo lo que Cole podía hacer? Le consideraba más maduro e inteligente.

(...)

Cole no podía evitar sentirse asqueado y culpable.

Pero por los motivos equívocos.

Su mente aún trataba de convencerle de que no había nada fuera de lo normal. No habían hecho nada malo porque todo había sido consensuado. Sin embargo...También le decía que eran familia y a pesar de no compartir sangre, había algo que hacía la situación incómoda.

Último sentimiento (4)Where stories live. Discover now