4

2.5K 268 47
                                    

El tiempo había pasado tan rápido que no se había dado cuenta y esa noche tenía ya la gala de los Oscars. No le apetecía nada, pero ya se había hecho a la idea de lo que tocaba y por un par de horas soportando eso otra vez no se iba a morir. Además luego habrá fiesta y esperaba que no hubiera paparazzis ni nada porque desde luego iba a divertirse todo lo que pudiera.

De lo que si tenía ganas era de empezar a arreglarse, y no estaba segura de si la razón era que se iba a ver rompedora, o que cierta morena iba a estar ahí para verla. Le ponía nerviosa pensarlo pero por otra parte le relajaba saber que ella iba a estar ahí.

No se habían visto desde ese día en el estudio, tampoco habían hablado. De hecho quien citó a Wanda al lugar donde Natasha se arreglaría fue su manager, no ella, y en realidad no sabía si Wanda había aceptado e aparecería, pero ella se había hecho ilusiones de que iba a presentarse allí, y eso esperaba.

...

Las horas que Natasha llevaba maquillándose y peinándose se le estaban haciendo eternas. Siempre se aburría de estar tanto tiempo allí, y aunque los maquilladores tratasen de ser agradables y darle conversación ella respondía con monosílabos o tonterías. Era verdad lo que le había dicho Clint, los aguantaba porque no le quedaba remedio. Y por esa misma razón no sabía que le había llevado a invitar a Wanda allí esa vez si ella nunca hacía eso, ni siquiera era amable con sus trabajadores. Que por cierto, está tardando en aparecer, igual no quiere venir. Normal, con lo mal que la he tratado... Pensó.

Llegó el momento de vestirse y todavía no había rastro de la morena por allí. Pensar eso dejó un poco mal a Natasha pero olvidando rápidamente esos pensamientos se fue al vestidor que le habían dicho y comenzó a cambiarse.

Justo cuando iba a salir a salir oyó una voz que le resultaba familiar, y al retirar la cortina la vio ahí plantada, charlando animada con uno de los peluqueros. Ella tardó un par de segundos hasta darse cuenta de que los ojos azules de la pelirroja la estaban mirando, y entonces se giró y se fijó en toda ella. Impresionante, no tenía otra palabra. La miró de arriba abajo con la boca abierta, ni se molestó en disimular su reacción. Si a esta ya le sobra ego, total para qué.

Cuando había elegido ese vestido casi la había podido imaginar metida en él, pero no se comparaba para nada a la realidad. Verla con el vestido y ya maquillada y peinada era otro rollo. Wanda pensó en ese momento que jamás había visto a alguien más sexy vestir uno de sus looks. Cuando volvió a mirar su cara Natasha tenía una media sonrisa, pero no era arrogante ni nada, parecía sincera, como esperando a que dijera algo.

– Estás... ¡Wow! Te queda muy bien. –sonrió grande. Natasha sintió que se derretía, era la primera vez que la veía sonreír así, y era para ella.

– Se ve que al final no tenías tan mal gusto. –rió.

– También se ve que tú no eres tan borde como pareces. ¡Si te sabes reír y todo! –bromeó. Se veía claro que no lo dijo con ninguna mala intención, sin embargo la pelirroja se sintió mal recordando lo que había pasado.

– Oye yo... Lo siento. –hasta Tony que rondaba por allí se sorprendió de oír a Natasha decirle esas palabras a alguien que apenas conocía.– El otro día me pasé, estaba enfadada y pagué contigo algo con lo que en realidad no tenías que ver.

– Ya... Yo también lo siento, igual me puse muy a la defensiva.

– Bueno un poco sí eh, que tampoco llevabas tanta razón... –picó. Wanda levantó las cejas en respuesta.– Vale lo dejo, lo dejo. -levantaba las manos en señal de rendición y se rió contagiando a la morena.

– Eres un poco insoportable Romanoff, pero está bien poder hablar contigo más de 5 minutos sin que vuelen cuchillos.

– Uf pero no me llames Romanoff. Natasha, o Nat, por favor. –sonrió.

Las apariencias engañan - wandanat / scarletwidowOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz