❛ QUEEN BEE ❜ ❝el síndrome de la abeja reina nunca cobró tanta vida y tuvo tanto sentido hasta que él la conoció a ella.❞
Kim TaeHyung es el Capitán de
la Unidad de Inteligencia del De-
partamento de Policía de Seoul y
a quien se le asigna el...
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queen bee capítulo dieciocho
LA PELINEGRA SENTÍA SUS PALMAS sus palmas sudorosas y constantemente estaba limpiándolas en la falda del atuendo que llevaba ese día, removiéndose a cada rato en el mullido sofá en el que estaba sentada, luciendo claramente nerviosa frente a la pareja de adultos mayores frente a ella que la veían con desconcierto, recelo y un toque de enojo.
Ella no podía culparlos. Llegó de la nada, tocando el timbre de su casa a casi nada para las doce de la noche, con un rostro pálido y una mirada que dejaba en evidencia lo aterrorizada que estaba de estar allí. La hora y las condiciones en la que llegó a la casa de los padres de JungHoon no ayudaron mucho a que el ambiente en la sala de estar de los susodichos fuera más amena y menos tensa.
—Díganos, señorita Bae —el padre de JungHoon pareció forzar un tono de amabilidad hacia ella con bastante esfuerzo—, ¿qué hace aquí a esta hora?
HaNa no ignoró el hecho de que no era bienvenida en esa casa, probablemente perturbando la poca paz que le quedaba a la pobre pareja desde que su único hijo murió, pero ella sentía que en otra ocasión no volvería a reunir la misma valentía para poder disculparse.
Lo pensó mucho después de que salió corriendo del juicio, vagando por la ciudad hasta que se decidió por disculparse finalmente con los padres de JungHoon, queriendo terminar ya con el asunto y poder tener un poco de tranquilidad consigo misma desde ese momento en adelante.
—Y-Yo —ella tartamudeó ante las miradas intensas de los señores Kim sobre ella—... quería... vine a disculparme formalmente por todo lo sucedido con JungHoon en la graduación —la pelinegra encontró la fuerza en su voz para poder decir el nombre de su ex compañero en voz alta.
—Usted debería saber que su padre ya vino a «disculparse» en nombre de toda la familia Bae —fue la madre de JungHoon quien habló, con un tono seco que le dejó en claro a HaNa que estaban claramente disgustados con ella allí.
—Lo sé, pero-, yo sólo quiero disculparme personalmente, hacer lo que debí haber hecho antes de que JungHoon hiciera lo que hizo... —la voz de HaNa salió silenciosa, no soportando mantenerles las miradas a los padres del susodicho.
—No se esfuerce, señorita, lo que pasó, ya pasó, ahora no se puede cambiar lo que sucedió y su disculpa no traerá de vuelta a nuestro hijo —el padre de JungHoon dijo con dureza hacia la menor—. Como usted dijo, debió de haberse disculpado cuando mi hijo aún estaba vivo, debió de haberlo hecho en el mismo momento en que le dijo lo que dijo, ¿o le costaba mucho hacerlo al día siguiente? Parece que su consciencia en ese momento estaba bastante tranquila.
