Capítulo 160: A continuación

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Yang Jiali se llevó a tres personas con él y comió mucho.

Fue a la mansión Wennan, un lugar notorio para la gente de dinero.

Wennan Mansión habia sido siempre un restaurante de alto nivel, al que era difícil acceder sin reserva, y no ofrecía servicios a los no socios. Por el camino, Li Da seguía dudando: "Hermano Yang, no podemos entrar en ese sitio sin reserva, ¿por qué no cambiamos a un lugar más barato, como el gran puesto al que siempre vamos?"

Yang Jiali agarró el volante y se rió.

"Es el primer día de nuestra reunión de cuatro gigantes, así que tenemos que ir a algo con clase, no te preocupes".

Yang Jiali condujo hasta la puerta de la Mansión Wennan y le arrojó la llave del auto al chico del estacionamiento. 

Condujo a Li Da, Li Er y a Wang Yang hasta el Salón Público de Wennan, subió familiarmente al tercer piso y abrió una espaciosa y elegante sala.

Antes de que tuviera tiempo de sentarse, el encargado del vestíbulo se acercó corriendo y agarro a Yang Jiali.

El gerente dijo: "Hola, señor, lo siento, no puede usar esta habitación por el momento".

Yang Jiali levantó las cejas: "Por qué".

El gerente hablo tan amablemente como pudo: "No tiene reserva. Además, las elegantes habitaciones de la tercera planta están reservadas por los miembros más veteranos de la casa pública durante todo el año, aunque estén vacías, no puedes usarlas, lo siento mucho".

Yang Jiali se apoyó en el marco de la puerta y señaló la matrícula de esta elegante habitación: "¿Quién tiene alquilada esta habitación?".

El gerente dudó un momento y respondió: "El Sr. Ye de Guanghui". 

Yang Jiali levantó una ceja y sonrió: "Entonces está bien, conozco a ese tal Ye, estoy bastante familiarizado con él. No le importará que use esta elegante habitación, no te preocupes".

El gerente aún así le impidió entrar.

Yang Jiali no pudo hacer nada: "¿Por qué no llamas a Ye Ting?".

El director sacó su teléfono móvil del bolsillo y levantó la mirada: "¿Cuál es su apellido?".

Yang Jiali dijo: "Dígale que su apellido Yang, sólo dígale a Ye Ting que es su padre Yang quien quiere usar su elegante habitación".

El rostro del director se puso blanco, miró a Yang Jiali y se dirigió a la esquina para hacer una llamada telefónica.

Después de la llamada telefónica, el gerente se secó la frente con sudor y tomó la iniciativa de darle la bienvenida a Yang Jiali a la habitación privada.

Al entrar a la elegante sala, Li Er observó la decoración barroca y se maravilló: "No me extraña que tengas tanta confianza para traernos aquí a gastar dinero, resulta que este es el lugar que el Sr. Ye tiene reservado".

Yang Jiali levantó la barbilla: "Así es".

"Desde estos restaurantes y casas públicas de alto nivel hasta los puestos callejeros, no hay lugar al que no podamos ir. Trabajemos juntos, sigan a su hermano Yang y los llevare a volar no a presumir".

Li Er arqueó la mano: "Te admiro".

Yang Jiali se movió y sonrió expectante: "Entonces, ¿Cómo deberías llamarme ahora, eh?".

Li Da y Li Er se miraron por un momento.

Li Da dijo: "¿Mujer noble?"

Yang Jiali: "?"

Li Er dijo: "Qué noble, es una noble consorte".

Yang Jiali: "???"

Yang Jiali golpeó la mesa y fingió enfado: "¡Te pido que llames papá! ¿Lo estan haciendo a propósito?".

Li Da y Li Er estallaron en carcajadas y Wang Yang no pudo evitar torcer los ojos de risa.

Los cuatro, nada educados, pidieron una mesa llena de platos calientes. 

Li Da y Li Er eran de Liaoning, nacidos y criados en el vasto noreste de China, por lo que tenían su propia audacia cuando se trataba de comida, comiendo con gusto y sudor mientras exclamaban que estaba buena.

Wang Yang era un poco más comedido y su apetito no era demasiado bueno, comiendo un pequeño cuenco como un hámster.

Cuando llegó el momento de pagar la cuenta, Yang Jiali pasó su propia tarjeta, llegando al tope y cancelándola de golpe. 

Li Er aplaudió su espíritu de independencia financiera a pesar de estar sentado sobre una mina de oro.

Tras pagar la cuenta, Li Da y Li Er se marcharon.

Yang Jiali se quedó en el cálido vestíbulo con Wang Yang y esperó a que Ye Ting llegara.

En cuanto Ye Ting salió de su oficina, condujo su coche hasta la mansión Wennan.

Entró en el vestíbulo vestido con traje negro y zapatos de cuero, pero con una bufanda blanca y esponjosa alrededor del cuello y la cabeza cubierta con un gorro de oveja y cabra cosido a la bufanda, con dos orejas de oveja blancas y rosas que se movían alrededor de su cabeza con su paso firme, extrañamente bonito, haciendo que las comisuras de la boca del encargado del vestíbulo se movieran dos veces.


Capítulo 160: A continuación (2/2)

Ye Ting llevó a Yang Jiali y a Wang Yang al coche.

Primero condujo a Wang Yang de vuelta y luego llevó a Yang Jiali de vuelta a casa con él.

Cuando llegaron a casa, Yang Jiali tiró de las pequeñas orejas peludas de la cabeza de Ye Ting y se burló de él: "¿De verdad la estas usando? ¿No tienes miedo de que la gente te mire como si fueras retrasado y no te dé vergüenza?".

Ye Ting giró el volante e hizo retroceder el coche hasta el garaje.

Dijo tranquilamente: "Mi bebé me lo tejió a mano, no se llama pasar vergüenza, se llama presumir".

Yang Jiali levantó las cejas y dijo dos veces: "Hoy te has quedado con la miel en los labios, ¿verdad?".

Ye Ting no dijo nada, pero sonrió.

Cuando llegó a casa, Yang Jiali no pudo esperar a entrar en el baño y darse una ducha. Ni siquiera llevaba ropa interior, así que se limitó a ponerse un albornoz y a atarse un cinturón a la cintura y salió, haciendo que Ah Fu levantara la vista y casi se quedara ciego cuando pasó por debajo del albornoz.

Mientras Ye Ting estaba sentado en su estudio ocupándose del resto de sus asuntos, Yang Jiali estaba aburrido, así que rebuscó en las estanterías.

Buscando en él, encontró el certificado de matrimonio que habían hecho en Las Vegas.

Yang Jiali levantó el delgado trozo de papel y lo agitó delante de Ye Ting, riendo: "Ahora estamos enamorados, separados, reunidos, propuestos, casados, todo ello, completo y perfecto".


Ye Ting dejó de golpear su mano en el teclado y giró la cabeza para mirar el certificado de matrimonio en la mano de Yang Jiali.

Ye Ting sonrió levemente y dijo: "Esta completo pero todavía falta una boda".

Yang Jiali estaba desconcertado: "¿No tuvimos una boda en Las Vegas una vez?".

Ye Ting negó con la cabeza: "Eso fue un truco. No algo verdadero".

Yang Jiali se encrespó y gruñó: "Entonces este certificado de matrimonio también es un fraude, ¿por qué no nos divorciamos y lo volvemos a hacer después del divorcio?".

Ye Ting frunció el ceño cuando escuchó la palabra divorcio.

Se levantó de la silla y bloqueó a Yang Jiali en el rincón del catre utilizado para descansar en el estudio, sus ojos dijeron cálidamente: "No hay necesidad de reabrirlo, podemos tener todo entre nosotros, pero no el divorcio. En el futuro, no vuelvas a mencionar estas dos palabras, ni siquiera en broma, es difícil para mí escucharlo".

Yang Jiali fue bloqueado por Ye Ting, por lo que sólo pudo asentir: "Esta bien, esta bien, lo sé".

Sólo entonces Ye Ting soltó a Yang Jiali, lo recogió en sus brazos y le preguntó con voz cálida: "¿Qué quieres que sea la boda?".

Yang Jiali levantó la vista y dijo seriamente: "¿De verdad quieres tener otra boda?".

Ye Ting asintió solemnemente: "Sí. Quiero que aceptes voluntariamente casarte conmigo delante de todos".

Yang Jiali asintió pensativo.

Después de unos segundos de pensar, de repente pareció reaccionar y saltó, argumentando: "¿Tengo que ser yo quien se case contigo?, yo también soy un hombre, ¿no tienes vergüenza?".

 Ye Ting tocó la cabeza de Yang Jiali: "Bebe, no hagas problemas".

Yang Jiali se enojó y miró fijamente: "¿No provoque problemas?, tengo que acostarme debajo de ti por el resto de mi vida. No soy un bebé, ahora llámame hermano. ¿No puedo presionarte una vez?".

Ye Ting sonrió.

Yang Jiali apretó los dientes: "Si ríete, me engañas para que lo diga yo, ¿tengo que estar ahí abajo el resto de mi vida?".

NT: Se nos viene la boda :3

Vigilado por mi Ex otra vezWhere stories live. Discover now