Vigilado por mi Ex otra vez

Capítulo 125: Operación: Robar a Yang Jiali

Cuando Yang Jiali entró en los bastidores del estudio, Li Da y Li Er estaban discutiendo.

Parecía que estaban discutiendo, y se estaban poniendo rojos.

Yang Jiali se descargó la bandolera y se preguntó: "¿Qué les pasa a ustedes dos hoy?".

Li Er giró la cabeza, resoplando y jadeando, con los ojos llenos de agresividad, y apuntó con la mano a Li Da, gritando a Yang Jiali: "Hermano Yang, ayúdame a buscar justicia, Li Da está violando mis derechos humanos".

Li Da no solía ser muy emocional, y era un hombre más bien budista y estable como un oso.

Apuntó a la cara de Li Er y levantó la voz: "No me importan tus derechos humanos, ¡tienes que cambiarme hoy, ahora mismo!"

Yang Jiali vio que el fuego entre ellos se hacían cada vez más densos, y se ocupó de alejar a los dos el uno del otro.

"Qué pasa, ustedes dos hablen claramente uno por uno, Li Er primero, treinta segundos para hablar, el tiempo comienza".

Li Er tiró de la mano de Li Da y la sacudió como un cañón: "Hoy he cambiado el fondo de pantalla del chat de mi teléfono, es cosa mía, no es asunto de nadie, ¡quién sabe lo que está haciendo, ha estallado cuando lo ha visto, ha tenido que obligarme a cambiarlo, es inexplicable!"

Los ojos de Li Da se agrandaron. : "¿Te atreves a dejar que el hermano Yang vea el fondo de pantalla que colocaste?"

Li Er no dijo una palabra, conteniendo la respiración y tapándose la cara.

Li Da le arrebató el móvil a Li Er de la mano y se lo entregó a Yang Jiali.

Yang Jiali levantó los ojos para echar un vistazo, solo para ver en la pantalla, a Zhao Xianghai con sus gafas de montura dorada y su reloj de negocios, sosteniendo su café, elegante y gentil, mirando a la cámara con una ligera sonrisa, Li Er se inclinada al lado de Zhao Xianghai, con los ojos inclinados, sosteniendo su teléfono móvil en una mano, haciéndose un selfie los dos.

Li Da se mostró raramente malhumorado: "¡No estoy en contra de la homosexualidad, pero tú no! Eres heterosexual, te lo dije hace mucho tiempo, no quieres doblegarme, la vieja familia Li no puede permitirse el lujo de llevarse tal emoción , ¿cambiar esto como tu fondo de pantalla?, ¿Qué quieres decir?, dímelo tú".

Li Er cogió de nuevo el teléfono y argumentó: "Sólo admiro a Hai, eres tu el que piensas mal".

Li Da dijo en tono serio: "Entonces cambia tu fondo de pantalla por algo más. ¿No te gustan las mujeres? Está bien, Yui Hatano a ver cámbialo".

Yang Jiali los vio discutir y lloró de risa.

Se estimaba que Li Er estaba realmente convencido por el carisma de Hai, y los hombres heterosexuales no podían evitar adorar al mismo sexo y Li Da era el que estaba demasiado preocupado. Asi que decidió que cuando llegue el momento, le pediría a Hai que hablara bien con Li Er, y ya todo estaría bien.

Dio un paso adelante y los persuadió algunas palabras, de alguna manera los apartó antes de que el programa comenzara a grabar.

Al principio de la grabación, todavía estaban un poco enfadados, pero como eran hermanos y compartían las mismas raíces y sangre, no tardaron en superarlo.

Yang Jiali exhaló ligeramente antes de empezar a concentrarse plenamente en la grabación del programa.

Desde las 9 de la mañana hasta las 8 de la tarde, Yang Jiali sólo tomaba dos bocados de su almuerzo en caja, con muy poco tiempo de descanso, y estaba sometido a una presión constante.

Cuando por fin terminó de grabar su parte y se dirigió a los bastidores, sus piernas y su estómago estaban débiles y su ropa estaba empapada de sudor.

Cuando su agente se acercó a sostenerlo, Yang Jiali miró a Li Da y Li Er, que seguían en el escenario sostenidos por la cámara, y al personal que corría por el escenario, trabajando intensamente sin tiempo que perder, sacudió la cabeza con una sonrisa: "Adelante, obsérvalos, yo iré a sentarme un rato en el salón".

Salió del estudio y de repente quiso llamar a Ye Ting, pero sabía que Ye Ting había estado trabajando duro en ese proyecto de licitación en Hai'an recientemente y estaba en una etapa crítica, por lo que temía perturbar su trabajo, así que lo pensó y volvió a guardar su teléfono en el bolsillo.

Volvió a pasearse lentamente por el salón.

Tan pronto cuando abrió la puerta del salón, vio que había alguien más en la habitación.

El hombre llevaba una sudadera negra, un sombrero negro y una máscara negra, y estaba tirando rápidamente de la bolsa de hombro de Yang Jiali.

Yang Jiali se estremeció, le señaló y gritó: "¡Wang Yang!"

Wang Yang, que estaba rebuscando en su bolsa, se sobresaltó y rápidamente sujetó la bolsa del hombro de Yang Jiali contra su pecho, al instante cogió una silla de un lado y la tiro para aplastarla contra el cuerpo de Yang Jiali.

Yang Jiali esquivó inconscientemente hacia un lado y lo bloqueó con la mano.

Cuando bajó la mano, vio que Wang Yang ya había agarrado su bolsa y salió corriendo del salón, presa del pánico.

Yang Jiali no perdió el tiempo y fue tras él, gritándole que se detuviera mientras lo hacía.

Capítulo 125: Acción de robar a Yang (2/2)

No había gente en el pasillo estrecho y la mayoría del personal estaba reunida en el estudio.

Yang Jiali persiguió a Wang Yang hasta el baño.

Cuando Wang Yang entró corriendo en el baño, finalmente se detuvo y se volvió para mirar a Yang Jiali cuando ya no había camino.

Yang Jiali jadeó y tendió la mano a Wang Yang, diciendo fríamente: "Devuélveme mi bolsa".

Wang Yang agarró la bolsa con fuerza, con los ojos enrojecidos, y sacudió la cabeza con fuerza.

Yang Jiali apretó los dientes: "¡Wang Yang! Me he dado cuenta de que llevas mucho tiempo actuando de forma extraña, eres un caballero, ¿está bien ser malo?, ¿por qué sigues robándome? ¡Devuélveme la bolsa!".

Wang Yang retrocedió paso a paso hasta estar contra la pared de porcelana y no pudo retroceder antes de detenerse.

Yang Jiali siguió adelante y se acercó.

Cuando estaba a punto de arrebatar la bolsa de la mano de Wang Yang, vio que las pupilas de éste se dilataban bruscamente en ese instante. <<(osea mostro una expresión de susto)

Acababa de sentir que algo iba mal cuando una mano salió de repente de detrás de él y le cubrió la boca y la nariz con una toallita húmeda.

Yang Jiali luchó violentamente, pero sus brazos y piernas fueron rápidamente sujetados.

Wang Yang se quedó atónito junto a la pared, observando la escena todo el tiempo.

Yang Jiali fue arrastrado al interior del cubículo, incapaz de gritar mientras luchaba, tenía la boca y la nariz tapadas y lo único que podía hacer era soltar un gemido ahogado, atragantado por el fuerte olor a estuco de etileno, que le irritaba los ojos y rápidamente le hizo llorar.

Los brazos y las piernas de Yang Jiali se debilitaron gradualmente, su energía desapareció y sus ojos se volvieron negros.

No supo más de lo que ocurrió después.