Corriendo hacia ti (Pierre Gasly)

Capítulo 3 - Pierre

-Lo siento, mi mente está en algún otro lado.-solté.

Para este punto, ya todos sabían lo que significaba, así que siguieron caminando adelante sin detenerse para esperarme. Cuando estuvieron lo suficientemente alejados, saqué el teléfono de mi bolsillo, esperando ver alguna notificación con su nombre. Nada de nada todavía.

Revisé mi reloj. 2:30 p.m. ¿Habría iniciado ya su día? Ya la había despertado una vez con mi llamada y no quería ser grosero, así que decidí enviarle un mensaje después.

***

Después del track walk, cuando decidí llamarla, Gia sonaba diferente. Había cierta timidez en su voz y por un momento pensé que me había reconocido. O tal vez solo estaba cansada porque no la había dejado dormir y se sentía mal por decirme cosas hirientes en sus mensajes anteriores. Cuando terminamos de discutir las tarifas por su servicio de niñera, decidí ser un poco más amistoso con ella. Después de todo ella tenía a Pascal y si lo quería de vuelta tenía que procurar ser amistoso.

-¿Cuántos años tienes? - pregunté después de un silencio incómodo.

-Esas cosas no se le preguntan a una señorita.-contestó seria.

Me pregunté si lo decía en serio. A juzgar por su voz no podía tener más de 30.

-¿Y si dejé mi perro a cargo de una menor? Eso no sería muy responsable de mi parte ¿Tus papás saben que tienes a un perro escondido en tu habitación?

La escuché reírse por lo bajo.

-Nop, nada de eso. Tengo edad suficiente para beber y esas cosas.

-Hmmm... Entonces espero que no tengas por costumbre beber en el trabajo.

Volvió a reírse.

-Y yo espero que tú no acostumbres a llamar desconocidas mientras haces tu trabajo.

Ahora fui yo el que se rió.

-No te preocupes. Trabajo rodeado de hombres y todos se darían cuenta si lo hago.

No contestó. Esa fue mi señal para hacerle otra pregunta.

-Envíame una foto.- dije de repente.

-Te habías tardado en demostrar tus verdaderas intenciones.- me acusó.

Ok.Eso no había salido como quería. Simplemente tenía curiosidad y quería asignarle una cara a la voz que escuchaba por el teléfono.

-Lo siento, no quería incomodarte - me disculpé rápidamente - es solo que me pediste fotos de Pascal pero tú no me has enviado ninguna. ¿Cómo puedo saber que realmente lo tienes tú?

-De acuerdo, buen punto. Te enviaré una foto más tarde.En este momento Pascal está durmiendo sobre mí y no quiero despertarlo.

Ufffff, estuve cerca de arruinarlo todo.

-Me alegra que estés respetando su nombre real.- dije en un intento de mantener viva la conversación.Hablar con ella me producía una sensación extraña pero agradable. Hacía mucho tiempo no mantenía una conversación tan larga con alguien. Mucho menos con una desconocida.

-Bueno, no soy tan mal empleada como parezco. Odio admitirlo pero necesito el dinero para pagar la infracción del otro día, y reemplazar dos pares de zapatos que Roscoe...errr, Pascal destrozó - esto último lo dijo en voz baja.

Mierda. Había olvidado que cuando Pascal se ponía nervioso, destrozaba lo que encontrara en el suelo. Seguramente le había destrozado más de un par de botas caras a Giulia. Me reí imaginando la escena.

-¿Te estás riendo de mí, señor viajo-por-todo-el-mundo? - dijo intentando sonar ofendida.

Abrí la boca y la volví a cerrar. Había olvidado qué tan fácil era arruinar las cosas con tan solo un par de palabras.

-No - me excusé rápidamente - estaba pensando en la persona que solía cuidar de Pascal. De seguro por eso lo dejó escaparse.

-Hmmm. Ok.

Silencio incómodo. Vamos Pierre, piensa en algo me dije.

-Yo tampoco he visto tu cara, - dijo interrumpiendo mis pensamientos - podrías ser un tipo loco del internet.

-Ey, no soy ningún tipo loco del internet. - me defendí.

-¡Eso es exactamente lo que un tipo loco del internet diría! - dijo riendo un poco. Por un momento pensé que lo decía en serio.

-Bueno, te prometo que no soy un tipo loco del internet, - Mientras decía esto, un par de miembros del equipo pasaron a mi lado. Me miraron de reojo por un momento y siguieron su camino, probablemente intrigados por la conversación que estaba teniendo en ese momento.

-Demuéstrame que no lo eres.

Al parecer era una chica retadora y desconfiada. Era la segunda vez en un par de horas que me pedía muestras de algo particular.

A lo largo de la vida me había tocado probarle a mucha gente que podía ser lo suficientemente bueno, lo suficientemente veloz... el estar probando mis límites una y otra vez me hacía sentir exhausto. Pero esto era diferente porque no estaba intentando ganar un asiento o una carrera. Era casi como un juego, al menos para mí.

-Creo que es bastante obvio que no soy un anciano depravado por mi voz, pero si aún desconfías, esto tal vez te tranquilice. - dije mientras buscaba en mi galería. Encontré una foto con Pascal que no le había mostrado antes y esta vez, no recorté mi cara antes de presionar "enviar". 

Tengo un mar de trabajo por hacer pero no podía no escribir  💙