Capítulo 4 (Parte 2/2) - Disculpas incomodas

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Adam (Punto de vista)

—¿Las quieres? —Si decía que sí, iba a pensar que era una arrogante y que solo quería humillarme, lo cual, al parecer se le hacía fácil, porque por alguna razón yo no lograba ser coherente a su lado, y eso: que me daba a respetar en la escuela y donde fuese, no me dejaba pisotear, pero ella me sorprendió...

—No, ¿para? Ni si quiera debías haberme dicho todo esto, solo andar por tu vida tranquilo... Y si Josse me iba a cuestionar sobre el asunto, pues solo tenías que decirme: "Amelia, lo siento, por no haber estado aquí cuando llegaste" Lo cual, dijiste, o más o menos, el día que nos vimos por primera vez, ¿hace 3 días? Ummm... no, hace 4, creo. —Se dio la vuelta para cerrar una carpeta que estaba en la cama, ignorando mi presencia.

—Wow... —Dije, y luego se me salió un pensamiento que no pensaba decir en voz alta: —tremenda mujer, ¿Cómo haces para callarme así?

—¿Qué dijiste? —Preguntó, mirándome. Menos mal, no escuchó.

—Nada... nos vemos. —Salí lo más rápido de ahí, como si mi vida dependiera de eso.

Tienes que cuidarte de ella, es como...

No, esos pensamientos no me van a llevar a nada, solo es una inquilina, o lo que sea... ella no es como... Mejor me cuido. No quiero volver a lo mismo, no después de haber salido de ahí.

Fui a mi cuarto, el más grande, porque por alguna razón mis padres quisieron que fuese así, pensé que Emma se quedaría con este al ser mayor, pero al parecer ellos tenían planes de aceptar más gente en casa, mejor dicho: Más chicas. Porque así las chicas tenían su baño, y yo el mío, dentro de mi cuarto. Pero ¿para qué quejarme? Me conviene, además, tengo más espacio.

Me di una ducha y salí del cuarto directo a la cocina, donde estaba Emma.

—¿Conociste a Amelia? —Dijo preparándose un tazón con cereal.

—Sí. Es muy...

—¿Muy? —Testaruda ¿es la palabra? No, no es, ella es muy astuta. —¿Adam?

—¿Qué? —Dije volviendo a la realidad.

—¿Es muy?

—Amigable. —Mentí, no pensaba eso, pensaba que era todos menos amigable.

Claro si te recuerda a aquella persona, la que te llevó a caer en ese agujero, del cual fue difícil salir. Porque eso que pasó es solo culpa...

—Adam Smith, no puedes mentirme, después de tantos años ¿aún crees que puedes mentirme? ¿Y más en mi cara? Te conozco desde que naciste. ¿Qué pasa con ella? ¿Te dijo algo malo? Porque ella ha sido todo un amor...

—No Emma, no.

—No vallas a hacer lo mismo que con...

—Emma. —Mi voz sonó fría, sin una pizca de tacto.

—Bien. —Alzó las manos en señal de rendirse. —Solo te advierto de una cosa: No lo hagas.

—No lo haré Emma.

Eso dices ahora, siempre terminas cayendo.

—Eso espero, tomaré tu palabra, no vayas a defraudarme.

—Sí, sí... —Me cansé de su represión. Por lo que me fui directo a la calle, a cualquier lugar, menos aquí. 

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Capítulo corto, lo sé, pero espero que les guste, este es el primer capítulo narrado desde la perspectiva de Adam.

¿Qué piensan de él?

Bueno, sin más, me despido, nos leemos en la próxima. (El lunes)

Les quiero recordar que: actualizo los lunes y viernes. Gracias por el apoyo. <3

Besos de: magia, suspenso, terror y brillitos. 

Angela

La canción, como siempre, es la que escuché mientras editaba este cap. <3

Un Juego Sucio (Completa)Where stories live. Discover now