Desastres impulsivos ©️✔️

|Capítulo 23|

Capítulo 23

Me veía y me sentía como una mierda. Así de simple. No tenía ganas de hacer ni de decir nada. Pero me estaba esforzando, ¿vale?

No había sido fácil. Había tenido que volver a una medicación que me mantenía drogada, prácticamente, la mayor parte del tiempo. Y estaba bien con eso. Era lo que necesitaba. Porque, de una forma u otra, la situación de Ayden había sacado todo lo que había tenido retenido durante dos años.

Había explotado, finalmente, como una bomba.

Me había derrumbado, y mis únicos soportes habían sido mis amigos.

—Ya, deja de leer eso, —Bruce me ordenó quitándome el celular de las manos. Alcé la mirada, y esta vez quien le quité el celular de entre las manos fui yo. Me sentía como siempre, en una especie de nave espacial.

—Déjame leerlo, —le pedí volviendo la vista a la pantalla. Suspiré y miré la foto ante mis ojos. Incluso con toda la medicación que tenía dentro, verla me dolió horrores. No fui muy consciente de nada, pero si sentí como si una espina hubiese sido clavada en mi pecho sin aviso previo.

Como si me dijese: «ahí tienes, es lo que mereces»

Ya habían pasado dos semanas desde que había salido del hospital. No había sabido nada más de Ayden más que nada porque había ignorado sus llamadas y mensajes. Había venido unas cuantas veces pero le había suplicado a Calu que le dijese que no quería verlo.

Así que, al final, había desistido.

Y, sobre todo, había hecho lo que le había dicho, y lo que sus padres le habían propuesto:

Había anunciado su compromiso con Selene Russo. Hija del presidente de Italia. Y lo que estaba viendo en aquel momento era una foto de ellos dos junto a un artículo sobre su compromiso.

Selene Russo era bellísima. Tenía el cabello marrón cayéndole hasta la cintura. Su piel era trigueña, y tenía unos ojos verdes bastante llamativos. Y se veía como lo que era: la hija de un presidente. Todo en ella dictaba atención. Era elegante. Y muy...refinada.

Justo lo que él necesitaba.

Ayden tenía el brazo alrededor de su cintura. Pegada a su cuerpo. Ella tenía una de sus manos sobre su pecho. Ambos se veían bastante cómodos. Ella sonreía sin mostrar los dientes, y Ayden no sonreía en lo absoluto. Pero solo porque él nunca sonría en ninguna foto.

Y era evidente, se veían bien juntos. Demasiado. Tanto que por un momento me dio gusto que finalmente, haya encontrado alguien, a su misma altura.

Suspiré y pasé a leer lo que decían:

«Ayden Grace anuncia su compromiso con la hija del presidente de Italia Selene Russo...

El soltero más codiciado de Londres sorprende a todos con la noticia que llega acompañada de la hermosa Selene. Su prometida y futura esposa. Una noticia que sin duda nos dejó asombrados y ahora, después de asimilarlo, contentos.

Ambos fueron captados cuando cenaban en uno de los mejores restaurantes de la ciudad pareciendo muy íntimos y enamorados. Un beso entre ambos confirmó la relación. Parecen llevar bastante tiempo saliendo.

"Era momento de sentar cabeza" fueron las palabras de Ayden cuando le preguntaron por su compromiso. Desmintiendo de esta forma, la supuesta relación que mantenía con Alice Grace, su hermana»

Me tragué todas las ganas que tenia de lanzar el celular y que se estrellara directamente contra la pared. Por un segundo solo me quedé quieta. Soltando respiraciones temblorosas. Respiraciones que traté de tranquilizar.