My Cold Revenge Woosan Sanwoo

🧡 23 🧡

"... Cuando algo es urgente

Ya es demasiado tarde..."

Narrador omnisciente

En una sencilla y calurosa habitación de hospital, debatiéndose entre la vida y la muerte, esposado a la estructura de la cama se encontraba San, ajeno a todo lo que pasaba a su alrededor.

En las afueras de la Central de Policía de México, se daba una conferencia de prensa, horas antes del entierro con honores de los tres policías que habían muerto en aquel tiroteo.

Con una foto de cuerpo entero del acusado, el comisario se retorcía de gusto comunicando que el Señor Choi San, de nacionalidad estadounidense estába bajo arresto por el asesinato de tres elementos de la policía judicial y que es el principal sospechoso del secuestro de Jung Wooyoung.

Una voz masculina se escuchó desde el fondo de la multitud.

-Mi nombre es Choi Beomgyu, periodista e investigador del Periódico Nacional, quería hacer solo una pregunta los archivos muestran que los tres oficiales que mataron estaban fuera de servicio en ese momento, entonces ¿por qué tenían sus uniformes puestos y estaban dentro de la patrulla?-

-Lo que es seguro es que murieron heroicamente- respondió el comisario.

-¡Por supuesto que sí!, pero ¿qué hacían exactamente en el lugar del rapto, o es que eran famosos por tener mucha suerte?- volvió a insistir Beomgyu.

-Eran famosos por corruptos y ahora se les celebra porque han muerto- dijo otra voz a su costado, perteneciente a Choi Yeonjun, Director de la Agencia de Investigación Federal de México, quien se retiró del lugar luego de hacer aquel comentario.

El comisario se quedó sin palabras que responder, y desvío la mirada hacia las demás personas autorizando que le hicieran más preguntas.

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Mientras tanto en la mansión de la familia Jung, el resto de la policía y los investigadores interrogaron al personal de la casa, y a Jisoo que lloraba desconsolada paseándose por la sala.

Rain, luego de responder su interrogatorio se encontraba fumando junto con su abogado en el ventanal del salón.

Seonghwa se acercó a Rain dejándole un apretón en el hombro.

-Tranquilo si, tranquilo Rain,sé que es tu hijo, pero cuando te digo que todo estará bien, todo estará bien- afirmó dando una calada larga a su cigarrillo, dándole un fuerte abrazo. -lo siento- susurró en su oído a lo que él simplemente asintió con la cabeza.

Había mucha gente en aquella sala, con ordenadores en todas las mesas, auriculares puestos, cables por todos los sitios, los teléfonos todos intervenidos, listos para grabar y localizar cualquier tipo de llamada que entrara de los secuestradores, pidiendo el rescate a cambio de la vida de Wooyoung.

Caminando a paso rápido, alguien de traje entró a la sala como si fuera el dueño de la ciudad.

-Señor Jung, lo lamento, lo lamento mucho, Kim Hoongjong división antisecuestros y jefe de la Policía Nacional - se presentó estrechándole la mano con fuerza.

-Señor Kim, disculpe... Soy Park Seonghwa, abogado de la familia Jung, yo conduciré las negociaciones y no necesitamos ni queremos ayuda de la policía, nosotros nos encargaremos de esto- aseguró pasándose la mano por su cabello barriéndolo hacia atrás.

-Señor Jung- volvió a hablar Kim,- tres policías fueron asesinados durante el secuestro de su hijo, tengo una orden escrita del ministerio público autorizando nuestra participación en su oficio- afirmó extendiéndole unas cuantas hojas de papel bien grapadas y firmadas.

-El secuestrador le pedirá que entregue el dinero usted solo, por favor, no lo haga o se encontrara en un verdadero infierno mexicano sin mariachis ni tequila ni Wooyoung.- volvió a afirmar a lo que Rain simplemente tragó duro y volvió a encender su cigarrillo, mirando como llovía en el exterior de la ventana.

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Yuta llegó casi corriendo a aquella habitación de hospital, apenas le permitían ver en qué estado se encontraba su amigo.

-San, San- intentó despertarlo Yuta, pero sin éxito, aún estaba inconsciente, muy débil, enchufado a montones de máquinas y goteros.

Alguien entró a la habitación comiendo rosquillas y riendo.

Limpiándose la mano en el saco se la extendió a modo de saludo.

-Choi Yeonjun, director de la agencia federal de México, ¿y usted quién es?- preguntó metiendo otra rosquilla a su boca.

-Yuta Nakamoto, amigo de él, aclaró señalando a la camilla.

-San,¿me escuchas?- preguntó sentándose a su lado..

Él apenas pudo abrir los ojos y buscarle con la mirada.

-Oye... murieron siete- explicó Yuta serio.

-¿Wooyoung?- preguntó San con voz rasposa.

-Bueno, ya pasaron dos días, están negociando su rescate- respondió su amigo tomándole la mano.

-Estas cosas llevan su tiempo Señor Choi- aseguró Yeonjun.

En aquel momento un susurro bajo se escuchó en aquella habitación mientras él volvía a cerrar los ojos.

-San, no juegues conmigo- gritó Yuta, nervioso al ver que su amigo perdía el conocimiento otra vez.

Yeonjun prometió mantener el contacto con Yuta para tenerle informado y conseguirle más horas de visita.

Él no quería dejar a San solo, sabía perfectamente que lo que había pasado no acababa aquí.

"...Hazme caso, por favor.

Te prometo que llegaré

a buscarte donde estés,

en cualquier momento,

voy a salir de aquí...

Te prometo que Escaparé ...!

Se prendió esto...

No lloren ni me odien .... 

saben que los quiero...