🧡18🧡

713 76 91
                                    

"...Cuando entendemos que no es un dia más,

si no un día menos,

empezamos a valorar lo que realmente importa..."


Pov San

Una semana entera pasó, en la que Wooyoung aprovechaba el más mínimo momento para echárseme encima y obligarme a besarlo.

Yo intentaba mantenerle quieto, por temor a lo que pasaría si alguien se enteraba.

Estaba seguro de que su madre sabía más de lo que aparentaba y por su actitud me daba a entender que no tenía problemas con ello.

También pensé, que si lo mirabas de una manera racional,mientras más me encariñara yo con su hijo, más empeño pondría en protegerlo, era una simple pero inteligente jugada.

Lisa y Lucas ya se habían dado cuenta aún antes que yo, de lo que el pequeño demonio se traía entre manos.

El que realmente me preocupaba era su padre, al que sin querer le había escuchado decir al teléfono: "que quieres que haga, nunca se hará un hombre si siempre que le pasa algo va a llorar con su guardaespaldas...", había algo en aquella frase que me generó incomodidad, y maldije para mis adentros por no poder escuchar más.

Cuando sus padres marchaban de viaje, diez minutos después de la cena, aparecía Wooyoung abriendo la puerta de mi habitacion de par en par, para reclamar una sesión de besos que acababa en un vano intento de escabullirme de él.

Se metía en la cama y yo me iba al sofá, entonces el venía al sofá conmigo y yo volvía a la cama donde él se metía después, así, hasta que yo me resignaba y el satisfecho se dormía en mi pecho.

Por las tardes más de lo mismo, después de comer yo me ponía a leer algo tranquilamente acostado y él aparecía con libros, lápices y cuadernos a instalarse en mi cama a hacer los deberes.

Así fue como sin realmente quererlo, acabe aprendiéndome todos los malditos ríos de Europa y Oceanía.

Aquel sábado estábamos a punto de cenar, yo me había duchado y estaba saliendo del baño con la toalla en la cintura, cuando una vibración en mi teléfono me anunció la llegada de un whatsapp.

Aquel sábado estábamos a punto de cenar, yo me había duchado y estaba saliendo del baño con la toalla en la cintura, cuando una vibración en mi teléfono me anunció la llegada de un whatsapp

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Después de cenar, sabiendo que la pequeña garrapata que tenía al lado no pararía hasta lograr su cometido, nos encaminamos hacia mi habitación.

Él se había parado encima de mis pies abrazándome y tuve que caminar así con él hasta allí.

Me tiré de espaldas a la cama con ambos en esa misma posición y como era su costumbre se sentó justo sobre mi entrepierna.

Me arrastré hasta quedar apoyado en el cabecero de la cama para darle los besitos que con tanta ansia había venido a buscar.

My Cold Revenge Woosan  SanwooWhere stories live. Discover now