Yo soy.... Minato (Pausada)

Capitulo 12

-No entiendo porque siempre terminamos en estas situaciones. -mencionó Mikoto con voz ronca. Ella estaba acostada al lado mío, baja la misma manta.

Ella estaba acostada mirando hacia mi lado con un leve sonrojo, la cama no era lo bastante grande así que sentía el cuerpo de Mikoto pegado al mío. Sus piernas entrelazadas a las mías por alguna razón, su mirada pegada a la mía. Podía ver con claridad incluso con esta oscuridad sus ojos negros y su rostro avergonzado.

Claro que yo no era tan duro tampoco, yo me sentía algo nervioso. Mikoto no era fea, incluso era muy linda. Tenía razón, lo sabía porque siempre terminamos en estas situaciones. Yo me sentía bastante nervioso con estar con ella en la misma cama.

-Odio a mi papá por hacernos hacer esto. -murmuró Mikoto con clara molestia en sus palabras.

-Te estoy escuchando. -dijo Jimura, el estaba acostado en el piso con intención de dormir ahí sin ningún tipo de manta ni nada, solo con la ropa que tenía puesta-. ¿Que querías que haga? ¿Que deje dormir en el suelo a nuestro invitado?

-¡Porque no duerme en el cama tuya! -exclamó molesta con el padre.

-¿Dos hombres durmiendo el la misma cama? ¿Que tipo de sujeto crees que soy hija? -preguntó Jimura con clara molestia, y yo no sabía si reírme o golpearlo.

-¡¿Y por qué tengo que dormir yo con el?! -escuche claramente como Jimura trato de reprimir una risa... Esto solo lo divertía.

-Vamos Mikoto, que tiene de malo que dos simples niños estén el la misma cama. Duerme, sueña con unicornios, arcoiris y esas cosas. -estaba vez note que su tono de voz si estaba siendo burlón, se estaba mofando de Mikoto sin siquiera hacerlo con sutileza.

-¡Ya no soy una niña! -grito Mikoto mientras se levantaba de la cama y miraba con molestia a Jimura. Yo la mire molesto, está tonta me había destapado.

-¿O sea que ya piensas de otra manera? ¿Crees que no puede controlarte al dormir con el pequeño Minato? ¿Así de enamorada estas de el? -yo solo tape mi rostro contra la la manta... Es divertido cuando solo molestará a Mikoto...

-Pa..Papá...-tartamudeó Mikoto en voz baja, su tono de voz era sonaba muy irritado con Jimura.

-¡Minato! No dejas que mi pervertida hija te seduzca y duerme tranquilo, yo te protegeré que no te suceda nada. -premetió Jimura, yo siguiendo le el juego suspiro fuertemente con gran alivio.

-Gracias Jimura, no sé que haría sin ti... -luego sentí el gran golpe de Mikoto en mi cabeza y todo se volvió negro.

***

Me había despertado al día siguiente con un gran dolor de cabeza.

Ahora me encontraba caminando junto a Mikoto directo a la academia. Está mañana había sido muy animada también, incluso sonrió al recordarla. Había sido desayuno preparado por Mikoto, y aunque había sido simple, para mí había sido muy bueno, muy especial...

Me agradaba pasar el tiempo junto a Mikoto y junto a Jimura.

Me sentía en casa junto a ellos.

Está mañana había sido muy buena, al igual que resto. Desde que empecé a entrenar se me había sido muy habitual ir a la casa de Mikoto, Jimura siempre tenía un gran humor, el sujeto nunca se veía enojado o molesto. Incluso cuando me equivocaba en la manera en que lanzaba los kunai el tenía que corregirme una y otra vez, pero aún así nunca lo hacía con molestia. Siempre era un hombre pasiente y era muy agradable estar junto a el.

Mikoto también era genial, era una gran amiga. Con quién podía estar hablando por horas y horas, contar con ella, siempre o mayormente con una sonrisa. Y aunque había veces que ella se enojaba con migo, sabía que en el fondo nunca lo hacía de verdad. Ella era simplemente genial, una gran persona. Por eso tenía que disfrutar cada segundo que estaba junto a ella.

Yo la mire de soslayo mientras entrabamos a por la entrada de la academia. Su forma de caminar era muy segura, mirando siempre a lo alto. Con gran seguridad siempre por dónde iba, ella era un líder innato. Una persona con una seguridad sin igual, y ella tenía con que respaldar esa seguridad. Tenía a sus espaldas el gran apellido del clan Uchiha, y tenía una habilidad para asegurarse de que nadie de meta en su camino.

-¿Que miras Minato? -me pregunto Mikoto curiosa, creo que notó que me la quedé mirando demaciado tiempo.

-Solo en lo genial que eres. -ella sonrió algo presumida mientras me golpeaba en el hombro y me empujaba despacio. Yo solo la quedé mirando con una sonrisa, me agradaba pasar el tiempo con ella.

-Tu también eres genial Minato, no lo olvides. -dijo ella mientras se adelantaba unos pasos quedando al frente mío, así dándome una sonrisa para después empezar a correr hacia dentro de la academia, dejándome atrás con una sonrisa mirándola mientras estaba a la academia.

Luego sonó una campaña avisando que las actividades ya estaban por comenzar.

-¡Oye avísame si sabías que las clases iban a comenzar!