Capitulo 4:

3.6K 401 38
                                    

Cuando por fin Mikoto me había dejado de tratar de seducirme, y notar que era en vano, fui a mi casa el horfanato.

Ahí los chicos me recibieron con alegría y halagos.

—Así que un tonto como tu pudo sacar un perfecto, supongo que estan aceptando a cualquiera como ninja. —dijo un chico de cabello castaño, el era unos dos o tres años mayor que yo. El era uno de los chicos que se había graduado de la academia antes que yo y venía de ves en cuando al horfanato para recordar sus tiempo aquí.

—Y por si no fuera mucho, mira la golpiza que te dieron. —dijo tratando de aguantar una clara risa falsa. Yo lo mire directo a los ojos, quedando a unos pasos delante de él.

—¿Que miras, virgen? —le dije mientras sostenía su mirada y me cruzaba de brazos. El puso una mirada sería, mientras daba media sonrisa, una que mostraba lo superior que se creía.

Después de una largos segundos en silencio, el solo se rió de gran manera y me revolvió el cabello.

—Me alegra que sigas vivo. —le dije mientras le daba una sonrisa. El era uno de los chicos con quién más había compartido en en horfanato, tenía unos 15 casi, 16 años. Ya era un Chunin, y era como un tipo de primo mayor tonto.

—Ehh, que falta de confianza me tienes tonto... ¿Que hay de comer hoy aquí? —pregunto mientras se tiraba sobre mi cama como si fuera dueño de todo el lugar.

El era Haiku, un chico huérfano al igual que yo. Tenía el pelo castaño corto, unos ojos de color ámbar y una piel algo morena. Sus brazos eran musculosos y su cuerpo estaba bien formado, todo gracias a un entrenamiento riguroso que el había llevado a cabo como Chunin que era.

—Ahora que me acuerdo, toma esto. —dijo tirando un fajo de dinero bastante grande. Yo abrí los ojos inprecionado, era mucho dinero. Con eso podría comer como por un mes entero y aún así quedaría dinero.

—¿C..Como tienes tanto dinero? —pregunte inprecionado. Sabía que Haiku ya era un ninja bueno, tenía su propio departamento y todo esas cosas. Pero esto era demaciado dinero incluso para un Chunin.

—Hice una misión de Rango S junto a un equipo nuevo... La misión fue muy dura... Hubo... Hubo muchos muertos Minato... Pero aún así logramos completarla. Gane mucho dinero, lo que te di no es ni la mitad de lo que gane... —dijo con un semblante tétrico y triste, mientras la presión de la habitación crecía. Yo solo baje la mirada, no sabía que decir ante este tipo de situaciones.

—¡En fin! ¡Soy todo un ninja ahora! —Haiku cambio rápidamente su estado de humor de una serio y severo a uno simpático y alegré—. Ahora dime quién fue en idiota que te golpeó, creeme que los pagará. —dijo con una sonrisa mientras se tronaba los dedos.

—No hagas nada, son problemas míos. —le advertí soltando un suspiro. Si iba a ser un ninja tendría que aprender a cuídame por mi mismo, valerme por si solo era algo que tendría que aprender.

—Pero si quieres entrenarme en combate no me quejo. —le propuse con levantando las cejas divertido. El solo me miro y puso el puño en su barbilla.

—No quiero, aprende tu solo y no molestes. Así hize yo. —solte un suspiro decepcionado, sabía que me diría algo así. Creo que la única solución sería aprender en la escuela y mejorar por mi cuenta.

—Lo que si puedo ayudarte en los sellos de manos, y un block de notas que tenía sobre el manejo de Chakra...  Si, creo que eso te podría resultar útil. —me comento mientras miraba por la ventana del horfanato. El solo se quedó viendo a la nada mientras las personas pasaban por las calles de Konoha.

Haiku era un chico extraño, podría camabair de actitud sumamente rápido. Para muchos podría resultar molesto, irritante o algo así. Pero el era un buen chico, y el me agradaba.

—Minato... —murmuró Haiku mientras me miraba a los ojos. Yo me sentí algo extraño, el tenía la mirada apagada, se veía cansado y muy vacío. Me preguntaba que era lo que le estaba sucediendo, el no solía tener está tipo de aura deprimida.

—¿Sucede algo Haiku? —pregunte extrañado. El no parecio interesarle mi pregunta y continuo hablando.

—¿Estás seguro?.... ¿Estás seguro de querer ser un ninja?

Yo lo mire extraño, ser un ninja era una de las cosas más increíbles que se me podrían imaginar ser. Siempre veía como los ninjas escupian fuego, saltaban por los aires, hacían miles de asañas inprecionante. Era claro que yo quería ser un ninja.

—¡Claro que sí! —respondí enérgico, ser ninja era genial—... ¿O acaso crees que no soy capas de llegar a ser uno?...—Haiku no dijo nada, solo me sonrió antes de desparecer en una explosión de humo.

Yo solté un suspiro cansado.

—¡Es hora de comer!

Yo salí de la habitación para después ir comedor y recibir mi plato.

Yo soy.... Minato (Pausada)Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz