04. Deseo físico

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Jackson lo atrajo con suavidad, logrando que el más alto se inclinara para unir sus labios, empezó apenas con un roce, pero pronto la intensidad del contacto le hizo olvidar a Isaac casi como respirar y es que jamás lo habían besado así antes, la lengua y labios de Jackson se movían expertos sobre su boca, al mismo tiempo que sus manos empezaron a acariciar su cuerpo en los lugares correctos, haciendo que pronto empezara a sentir calor y una imperiosa necesidad de quitarse la ropa para iniciar el contacto piel con piel.

El kanima estaba embriagado por el olor que despedía Isaac, podía notar lo excitado que estaba, sabía que el chico gustaba de él y en agradecimiento a las últimas semanas, le daría una experiencia inolvidable porque el rubio siempre había logrado satisfacer a todas sus parejas y el joven de rulos no sería la excepción.

Lo condujo a su cama y se colocó encima de él, separando los labios de su boca para ayudarlo a desvestirse y aunque no opuso resistencia un ligero rubor coloreo sus mejillas cuando quedo desnudo, así que el mismo se quitó su propia ropa para ayudarlo a sentirse más cómodo, los dos observaban complacidos el cuerpo ajeno y pronto los labios del alfa viajaron a su cuello y sus clavículas, Isaac dejo salir un gemido satisfactorio y de inmediato mordió su labio intentando controlar sus gemidos.

— Isaac déjame escucharte — pidió Jackson y el aludido asintió un poco inseguro, jamás se había sentido así de bien, su cuerpo estaba receptivo a todas las sensaciones y caricias que estaba recibiendo, no terminaba de hacerse a la idea lo que estaba pasando, se sentía como un sueño hecho realidad pero a la vez sentía nervios después de todo esa era su primera experiencia con un chico, su miembro estaba erecto y sentía como un líquido empezaba a escurrir entre sus nalgas, el rubio separo sus piernas y acerco dos dedos a su húmeda entrada que resbalaron con facilidad.

— Esto es fantástico, parece que tu cuerpo ya está listo para recibirme — dijo al sacar sus dos dedos llenos de su lubricante natural y se los llevo a la boca.

— Oh no hagas eso — dijo al verlo lamer el espeso liquido provocando un sonrojo mayor en Isaac.

— ¿Por qué no? tu sabor es delicioso — dijo Jackson y marco un camino con su lengua desde su cuello pasando por sus pezones asegurándose de dejarlos erectos, bajando por su ombligo y llegando hasta su miembro, para lamer su glande y acariciar con su lengua la longitud de su pene, mientras las manos de Isaac se aferraban con fuerza a las suaves sabanas.

— Ja-Jackson — gimió el chico, Isaac no podía creer que su amor platónico de tantos años tenía su pene en la boca, el chico se aseguró de seguir un ritmo constante y usar mucha saliva, pero Isaac no estaba listo para esa descarga de sensaciones y no podía aguantar demasiado y le advirtió — Espera Jackson... espera... ya estoy cerca — fue apenas capaz de pronunciar cuando Jackson aumento la velocidad logrando que terminara en su boca.

Isaac disfrutaba de su reciente orgasmo y cuando Jackson se acercó a él sellaron de nuevo sus labios, en ese beso había deseo y pasión y el más alto esperaba que el kanima lograra ver lo mucho que quería demostrar en ese beso.

— ¿Quieres continuar?

— Si Jackson por favor, necesito sentirte dentro de mi — pidió el chico de cabello rizado.

— Iré por un condón.

— No, no es necesario estoy tomando supresores.

— De acuerdo ¿estás listo? — Isaac solo atino a asentir con la cabeza mientras el rubio se acomodó entre sus piernas y con sus manos las levanto para facilitar la penetración y sin dejarlo de ver a los ojos fue entrando poco a poco.

— Isaac estas tan estrecho — el más alto no sabía que contestar y solo jadeo al sentirse invadido por el miembro del otro chico, apenas sentía un ligero dolor, pero sobretodo placer, la voz de Jackson se escuchaba tan erótica y el temía decir algo que no fuera correcto, que les cortara el momento.

— Mmmm — gimió el omega.

— ¿Te gusta? ¿puedes sentir como entro en ti? - dijo al retirarse un poco y volver a entrar rápido hasta el fondo.

— Aaah si.

— Vamos gime mi nombre — pidió y por supuesto que Isaac lo complacería, mientras marcaba el vaivén de las embestidas, los sonidos que llenaban la habitación estaban resultado demasiado, los choques de la piel, los jadeos que escapaban de su boca, la respiración de Jackson sobre la suya, la forma en que el pene de Jackson rozaba su próstata en cada oportunidad, lograron que Isaac no pudiera evitar terminar de nuevo en medio de los dos y cuando el semen caliente de Jackson se derramo en su interior sintio que no habia nada en el mundo que pudiera superar este momento.

Se quedaron un momento así, hasta que el alfa se levantó y le acerco una toalla para que se limpiara un poco y le indico donde estaba el baño.

— Puedes quedarte a dormir, toma lo que necesites de ese cajón.

Isaac asintió y se levantó para asearse sin borrar una sonrisa de su rostro, cuando regreso, Jackson ya estaba limpio y había cambiado las sabanas los dos se acostaron y se durmieron abrazados, a la mañana siguiente cuando despertó Isaac, Jackson aún estaba dormido a su lado y se veía mucho más atractivo de lo normal haciendolo sentir muy feliz de poderlo ver asi.

— Buenos días — dijo cuando lo vio abrir los ojos.

— Buenos días guapo — dijo Jackson dando un beso corto en los labios y el más alto se sonrojo.

— ¿Quieres desayunar?

— Si, vamos.

Bajaron los chicos y ya estaba preparado un nutritivo desayuno en el comedor.

— Debo irme a la escuela, supongo que nos vemos más tarde — dijo como despedida cuando terminaron de comer, pero el más bajo lo detuvo.

— Si, Isaac escucha... quiero agradecerte, porque me diste el mejor regalo de despedida, pero creo que lo mejor es mantener en secreto esto que paso entre nosotros — dijo trayendo al otro chico a la realidad.

— Si por supuesto Jackson — dijo tranquilo, sabía que iba a pasar, pero aun así le dolió, porque al escucharlo en voz alta lo hizo real.

Deseo inherente (Sterek)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt