Deseo inherente (Sterek)

11. Comunicación ineficiente

Scott manejo hacia el loft por segunda vez en el día y el camino fue tan incómodo y silencioso como la primera vez, pero al menos con el rubio podía usar su aroma para ayudarlo a tranquilizarse, en cambio con Stiles eso no funcionaría y en estos momentos deseaba ser más hábil con las palabras para ayudar a su amigo a sentirse mejor, porque los silencios prolongados cerca su hiperactivo amigo, solo podían significar que sus pensamientos no eran precisamente agradables.

— Hermano, prometo que no te haré pasar por una situación incomoda, iré por Isaac, traeré sus cosas y volveremos a casa, no tendrás que ver a Derek ¿De acuerdo?

— De acuerdo — contesto el castaño de forma automática, sin dejar de pensar en la última semana, muchas cosas habían cambiado desde el momento que se enteró que podía embarazarse, todo sucedió tan rápido que se sentía triste que hubiera terminado antes de comenzar y aunque quería pensar que había alguna equivocación no tenía caso albergar falsas esperanzas.

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Cuando Scott estaciono el jeep fuera del edificio, el sol ya se estaba ocultando, le dio una palmada a Stiles en los hombros para animarlo y subió al loft decidido, abrió la puerta sin tocar y encontró a Derek y Isaac tan cerca que sintió su sangre arder por la furia, el rubio se separó un poco del mayor mientras limpiaba sus lágrimas intentando deducir que hacía Scott ahí, pero el moreno dejo que su lobo interior decidiera que hacer y avanzo rápidamente hacia el mayor para intentar golpearlo, pero aunque Scott era fuerte, realmente nunca tuvo oportunidad y Derek lo detuvo fácilmente.

— ¿Qué crees que haces? — dijo molesto Derek mientras sostenía su puño, el moreno se liberó, pero su actitud seguía siendo agresiva.

— ¡Eres un cobarde Derek! engañaste a Stiles y no quieres hacerte cargo de tu hijo con Isaac — estalló el moreno mientras el rubio lo veía extrañado — y tienes el descaro de intentar consolarlo.

— ¿De qué hablas?

— Pero te ahorrare las molestias, ya no es tu problema Isaac y su hijo, no te necesitan ahora me tienen a mi y yo los cuidare — dijo empujándolo e intentando tomar del brazo a Isaac.

— No entiendo... — dijo el rubio.

— Isaac, no lo necesitas ven a vivir a mi casa yo te apoyare en el embarazo — dijo el moreno y Derek estaba perdiendo la paciencia, pero notaba la preocupación genuina del latino, así que espero que Isaac le explicara.

— Scott escucha, Derek me apoyara, pero él no es el padre — dijo Isaac que no entendía cómo había llegado a esa conclusión — y gracias por preocuparte, pero lo estas malinterpretando todo.

— Pero... tu olor siempre está impregnado del de Derek y Stiles escucho parte de su conversación... — dijo Scott, pero el furor inicial se había esfumado y se mostraba confundido — el escucho que Derek no quería que tuvieras al bebé y por eso venimos.

— Espera ¿Stiles está aquí? — pregunto de pronto el alfa de mayor rango.

— Si Stiles esta... — empezó Scott, pero Derek ya había salido del lugar, con la imperiosa necesidad de aclararle todo al castaño antes que fuera muy tarde.

— Isaac... no sé qué decir... lo lamento — dijo el moreno.

— Esta bien Scott, pero antes de hacer algo así, debiste preguntarme... y ahora tengo una duda sobre eso que dijiste... sobre hacerte cargo... no entiendo... ¿Por qué lo harías? — pregunto el chico de rulos curioso del motivo de Scott para ayudarlo.

Scott no pudo contestar de inmediato, sabia que le preocupaba Isaac y lo correcto era ayudarlo, pero entendía que al rubio le extrañara su actitud sobreprotectora.

— Porque somos amigos... ¿no?

— Si... lo somos — dijo Isaac que claramente había sobreestimado el interés del moreno — Y gracias por ofrecerme tu ayuda Scott, pero no será necesario, cuento con Derek — dijo con una sonrisa.

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Stiles esperaba en el jeep, pero Scott y Isaac no regresaban y en esos momentos deseaba tener el oído súper desarrollado de su amigo, para saber porque tardaban tanto, tal vez Derek se opuso porque no quería perder a un omega de su manada, pero mientras pensaba alguien toco el cristal de su ventana y el castaño dio un salto en su lugar al ver a Derek fuera.

— Stiles escucha yo... — empezó el mayor, cuando el chico salió del auto, pero antes que pudiera agregar nada más, Stiles se adelantó con todas las ideas que habían pasado por su cabeza.

— Sabes Derek en el camino, estuve repasando nuestras conversaciones para saber si malinterpreté algo, si fue mi error esperar algo más, pero me di cuenta que simplemente me mentiste, tal vez enamorarme y luego transformarme eran parte de tu plan para que Scott y yo nos unamos a tu manada, pero eso nunca pasará.

— Stiles te equivocas...

— Bueno si ese no es tu propósito dime entonces ¿qué ganas tú? al menos me debes una explicación ¿por qué me hiciste creer que en un futuro podríamos formar una familia? cuando tenías otros planes o ¿me vas a negar que Isaac esta embarazado?

— No lo voy a negar, pero es algo más complicado de lo que crees... — dijo Derek paciente, porque no quería alzar la voz y alterar más al chico, aunque no parecía dejarle oportunidad de explicar nada.

— ¿En serio Derek? a mí no me parece tan complicado, bien pudiste haberme dicho "Sabes Stiles voy a cortejarte, pero al mismo tiempo tendré sexo con Isaac sin protección, así que es probable que quede embarazado en cualquier momento, mejor vete buscando otro alfa" ves no era tan difícil.

— Stiles, jamás cortejaría a dos chicos al mismo tiempo, créeme Isaac no es mi pareja.

— El que no sea tu pareja no cambia el hecho que está esperando un hijo tuyo — dijo Stiles y la voz se le rompió un poco sintiéndose lastimado, por las esperanzas que llego a tener, sabia que esto era reciente, pero no le fue difícil imaginarse un futuro a lado de Derek — No sé cómo realmente pensé que tu estabas interesado en mí, que me ayudarías a cumplir mi sueño... yo no puedo... — dijo Stiles mientras unas lágrimas invadían sus ojos y Derek sintió miedo de perderlo, que sus pocos avances fueran echados por la borda, no sabía que decir y lo único que se le ocurrió fue acortar la distancia y besarlo, pronto los labios de Stiles fueron reclamados por los del hombre lobo con impaciencia, mientras lo acorralaba entre su cuerpo y la puerta del jeep.