My boyfriend is famous » horan.

Capítulo 14.

Parte I: One Direction.

Niall PDV.

Falta muy poco para que llegue la tan esperada Navidad, y realmente jamás me pudo haber importado menos. Antes, en Irlanda, era un motivo más para estar en familia; riendo, abrazando a los tíos, peleándose con los primos, abriendo regalos y comiendo, mayormente. Pero ahora, de hecho, las navidades apestan. Todos los chicos van a celebrarlo con sus familiares mientras yo me quedo esperando una llamada de mis padres, cuando eso sucede, no dura más de veinte minutos. Y ¡Listo! ahí está tu maldita navidad.

Aunque podría estar en las miles de fiestas en las que me invitan cada año, simplemente no quiero, siento que estoy cortando un lazo entre mi familia y yo. Siento esa necesidad de escucharlos, y estar relajado diciéndole a mamá como va todo. Son esas pequeñas cosas de la vida cotidiana que a veces extraño mucho.

Justo en este momento estoy en esa faceta de mierda de superar-a-tu-ex y realmente no lo llevo del todo bien. Bob, la persona que se suponía era mi mano derecha, me ha estado llamando como ya diez veces de lo que va la mañana, no contesté a ninguno de sus mensajes. No lo haré.

Entonces son exactamente las diez y mi vida parece no tener sentido en este momento. La calefacción está encendida y me encuentro mirando el punto inexistente en la pared mientras mi mente divaga entre el ayer y hoy en un tiempo récor.

Y luego toda mi concentración se va a la jodida mierda cuando la voz tan feliz de Louis Tomlinson irrumpe en mi campo auditivo. 

—Horan —saluda, no me molesto siquiera en mirarlo y nuevamente busco el punto en la pared de lienzo celeste. Lamentablemente éste ya no está —. ¿Dónde están los chicos?

Frunzo el ceño, también estoy en esa faceta de: no me hables o te pateo el trasero que al parecer Louis no nota porque sigue hablándome. Alzo mis hombros e intento volver a perderme en otro punto de la sala, porque es la única manera que el tiempo parece transcurrir un poco más rápido.

—No importa, nadie necesita a esos bastardos, de todos formas quiero presentarte a alguien.

Sigo sin mirarlo y muy de mala gana sé que mientras Louis esté en mi casa la tranquilidad no será mi aliada.

—Niall, ¿Recuerdas a Harry, no?

Algo en mi mente resuena y mis ojos se viran para observar a Louis, quien al parecer no está solo, hay un chico a su lado. Por su cabello rizado puedo distinguir que es Harry Styles. Y realmente no me alegra verlo, para nada.

—Hola —digo, sueno algo brusco y frío.

—Sí, hola —Harry Styles suena amable al decirlo, incluso algo intimidado.

— ¿Qué haces aquí? —Louis me mira mal cuando pregunto eso, pero ni siquiera me tomo la molestia de sonreír.

—Harry está aquí porque yo lo he invitado —Louis alza un poco la voz. Entorno mis ojos.

—Genial. La habitación está arriba. No hagan mucho ruido ¿sí?

Harry pliega el ceño y Tomlinson bufa —Ignora a Niall, está en sus días de perra malhumorada.

—Es mi casa—le recuerdo a Louis—. Puedo ser más perra aún.

—Harry quería saber cómo era ser el amigo de Niall Horan, ¿lo ves, Harry? es igual que estar con una mujer con síndromes menstruales.

— ¿En serio Harry quería saber cómo es ser uno de mis amigos?

Mis ojos se conectan con los de Harry Styles y él se limita a sonreír.