Silencio ; Ramaela

Undercover

Narra Mica

Durante todo el programa Ramiro se mantuvo en un actitud distante. Trataba de imaginar que era lo que tenía planeado hacer para como él dice, demostrarme que estoy loca por él. La verdad es que lo disimulo bastante bien el hecho de que a veces me pongo nerviosa cuando se me acerca tanto, pero es algo normal. Es decir, si un chico como él, con su físico y su personalidad, se te acerca tanto, te abraza ¿Quién no se pondría nerviosa? es algo normal e instintivo, yo estoy segura de que no lo quiero.

No puedo negar que sí, me atrae, pero como en su momento me atraía Nacho hasta que me enamoré y me saqué todas esas cosas de la cabeza. Supongo que cuando volviese a enamorarme, ya no me acordaría de él. Sacudí mi cabeza para borrar esos pensamientos de mi cabeza y me concentré en el juego, aún quedaba media hora.

Narra Rama

Llegué a los camarines y me cambié de ropa corriendo, ante la mirada confusa de mis compañeros que no entendían mi nerviosismo. Nada más acabar fui corriendo a buscar a mi hermano.

-¡Vamos o te vas a casa caminando!.-Grité.

-Ya voy, que impaciente por favor.-Resopló molesto. Yo sonreí.-¿Por qué tienes tanta prisa?.-Frunció el ceño.

-Quiero ir a casa de Mica antes de que llegue ella y darle una sorpresa.-Contesté.

-¿Debería preocuparme?.-Me miró mientras seguíamos caminando hasta el estacionamiento.

-No, tranquilo.-Me encogí de hombros.

Llegué a casa y solté mis cosas en la habitación, le pedí a una fan que estaba afuera que entretuvieran a Mica lo máximo posible a la salida del canal, así me daba tiempo de darme una ducha rápida y ponerme ropa limpia.

Una vez acabado, y apunto de salir, recibí un mensaje directo ''se acaba de ir''. Bajé corriendo las escaleras, no podía ir en auto por que lo vería y me descubriría antes de tiempo, así que salí corriendo. En diez minutos ya había llegado. Entré por la puerta de atrás y esperé a que llegara escondido debajo de su cama.

Narra Mica

Me dirigía hacia mi casa cuando me encontré afuera a Pitu, no sabía que hacia ahí ni me importaba, quería que se fuera. Estacioné el auto y bajé. Me acerqué a él con desconfianza, si bien lo respetaba no significaba que iba a tirar pétalos de rosa por donde pasara.

-¿Podemos hablar? es importante.-Dijo serio.

-No más de 20 minutos, así que se claro.-Dije abriendo la puerta.

Los dos entramos. Solté mis cosas y pasamos a mi habitación ya que mientras escuchaba lo que quisiera que me fuese a contar, necesitaba enviar un correo electrónico urgente. Nos sentamos en la cama, el en una punta y yo en la otra con el laptop.

-Puedes hablar.-Me dirigí hacia él mientras encendía el aparato.

-Sé que te han ofrecido ir a Combate Perú, y que no estás muy cómoda aquí, por como te tratan, me contaron lo que pasó con los hermanos en los pasillos y como tu también saliste mal parada.-Comenzó.

-¿Y?.-Dije sin levantar la vista del laptop.

-A mi también me lo han ofrecido, y estoy casi seguro de que voy a aceptar, quería que lo supieras para que luego no pienses que quiero arruinarte el trabajo y cosas así.-Explicó.

-Está bien, yo voy a ir igualmente, estés tu o no.-Lo miré de reojo.

-¿Eso significa que has aceptado?.-Preguntó.