Historias de un amor

28.Favor

Para donde quiera que volteara habia vikingos y dragones peleando, o muertas y casas quemadas. Necesitaba encontrarla. Era su única esperanza.

Un fuerte choque de espadas a su espalda lo hicieron voltear justo a tiempo para contraatacar a un marginado que al pareser tenia la intenciòn de atacarlo. Dos tres choques de espadas y el marginado callo muerto a su lado.

Siguio andando hasta encontrar a su dragón peleando con un par de los intrusos, le corto el cuello a uno mientras que Chimuelo aprovechaba para encajar sus garras en el pecho del otro. Cuando terminaron Hipo se monto en él y le susurro algo a su amigo para despues salir volando del lugar esperando que nadie los siguiera. Desde la tierra un robusto hombre los veía alejarse.

Volaba tan rapido como el cansancio y el dolor en su ala derecha se lo permitia mientras Hipo lo alentaba a seguir.

Cuando llegaron, aterrisarón en un hermoso claro con un gran árbol en medio y una cueba. Hipo se bajo de Chimuelo y comenzo a caminar en dirección al árbol del que tomó uno de sus frutos y se dirigio a la cueva, adrentandose en ella. Chimuelo se quedo afuera de la cueva para vigilar.

Estaba ocuro pero así que tomo su espada y la prendio e inmediatamente la cueva se ilumino. Hipo pudo observar que en sus paredes había dibujos e inscripciones en diferentes idiomas. Siguio avansando hasta llegar a un pequeño lago dentro de la cueva y ahí arrojo la fruta y guardaba su espada dejando todo en penumbra, entonces un luz azulada se vio en el fondo de agua acercandose cada vez mas hasta que comenzo a emergir una figura. Al principio no se podia ver que era pero conforme salía del agua Hipo pudo ver a una mujer rubia y de piel palida completamemte desnuda y mojada ante él. Su rostro tenia bellas facciones y su largo cabello estaba suelto y calendole por lo hombros y la espalda, tenia los ojos cerrados pero cuando los abrio Hipo pudo ver que eran de un hermoso color azul.

Cuando salio por completo del agua se vieron solo unos segundos antes de que la mujer hablara con una sorisa traviesa y confiada mientras comenzaba a caminar alrededor de él y el dragón.

-Me buscabas Hipo?

-Vine a perdirle su ayuda...mi lady. Ahora mismo mi pueblo esta siendo atacado y aunque mi gente a peleado con valor son dos bandos los que nos atacan incluido uno que ya controla dragones...

-Y que esperas que yo haga?

-...ayudenos.

-Cómo?

-...no lo se.

Ambos se quedaron callados por unos segundos. Ella atras de él lo observava viendo mas alla de su piel y su carne. Él suplicaba en silencio a los dioses que aceptara ayudarlo y debido al largo silencio y callendo en la desesperación hablo sin pensar.

-Me lo debes!

En menos de un segundo ella ya estaba en frente de él, alzo la mano con la intensión de golperlo, pero en vez de eso Hipo sintio en su mejilla una suave caricia.

-Lo se...

Lo había dicho con una voz tan dulce y calma que dejo a Hipo un tanto descolocado y no pudo evitar deaviar la mirada de sus ojos a sus labios recordando cierto contacto ocurrido en el pasado.

-Lo se... Vuelve con tu pueblo y espera.

Y antes de que Hipo pudiera decir o hacer algo ella desaparecio.

Hipo se quedo un segundo ahí parado antes de poder reaccionar. Cuando salío de la cueva fue con su amigo y ambos salieron de aquella isla rumbo a Berck.

Al llegar se encontro con una pelea aún mas sangrienta y cruda que cuando se fue. Ambos, justo antes de aterrisar fueron atacados por un dragón y durante en forsejeo Hipo callo del lomo de Chimuelo y fue atrapado por los gemelos.

Chimuelo y el dragón junto con el jinete de este sigueron su lucha hasta que de la nada ambos dragones dejaron de luchar. Todos los dragones que se encontraban luchando se detuvieron de subito y aterrisaron suavemente en la tierra.

Todos dejaron de pelear y todo se sumio en un profundo silencio, entonces se comenzo a escuchar un hermoso canto y sin saber porque y sin poder evitarlo Hipo se sintio tentado a ir a buscar su origen pero sus pies no se movian. Sorprendido vio como no era el único con la misma sensación y como sua enemigos hiban caminando en dirección al mar undiendose poco a poco en el agua, y mientras esto ocurria pudo ver en el agua una luz y una cabellera rubia.