22. Me encantas tú.

64.3K 3.9K 2.8K
                                    

Dedicado a @angiealejapire por su cumpleaños, pásala lindo hermosa 💐


Sí, Madison. Yo también me estoy enamorando de Eliot.

—Solo serán unos días, hasta que vuelvan tus padres.

—Se supone que iba a quedarme hasta que te pusieras mejor y ya te veo mejor.

—Tuve el accidente ayer.

—Y estuvimos juntos como cuatro veces, estás sano.

Resopló —No quiero que estés sola. Ya te lo dije. Por favor, ven conmigo. Te ayudaré a traer todo lo que necesites y si olvidas algo lo vendré a buscar y si te falta algo lo compraré... Pero quédate conmigo.

Respiré hondo, el problema era que no podía recibir las videollamadas de papá y mamá en su departamento —Eliot...

—Dime ¿que necesitas que haga para que vengas conmigo?

Lo miré.

—Lo que sea... Pídelo.

Bueno quizá podía haber una solución...

———

—¿Es en serio? ¿Quieres que ponga esto en mi departamento?

—Es la única opción.

—¿Y en la sala de mi departamento?

Asentí —Es el lugar que más se parece a mi cuarto.

Me miró —¿No puede ser una menos horrible?

—Ay —lo miré ofendida—, ¿qué tiene esta? ¿Por qué no te gusta?

—No lo sé ¿Será porque es una cortina horrenda con un estampado gigantesco de Pablo de los Backyardigans?

—Oye —lo señale—. No sabes de buenos gustos.

—Estoy empezando a creer que eres rara.

Me reí —¿Nunca te gustó algún personaje de caricatura? No sé, ¿Ladybug? Eres de Francia.

—No —dijo casi horrorizado—. Yo si soy normal.

—¿No tienes ni idea de quién es Ladybug, cierto?

—No, pero tampoco quiero saber, vi un fanfic con ese nombre en esa aplicación rara en donde lees.

—Se llama Wattpad, inculto.

Me dio la espalda y tomó la cortina de Pablo —Como sea.

—¿La llevarás? —le pregunté emocionado.

Me miró —Sí. ¿Me gusta la idea de llevarla? Nop. ¿Tengo alguna otra opción para no llevar esta cortina? —negué—. Lo supuse, lo supuse...

Salió de mi habitación con la cortina, el plan era acomodar una parte de su departamento como si fuese una parte de mi habitación, así podría hablar con mis papás sin levantar sospechas.

Empecé a sacar varias mudas de ropa y las puse sobre la cama, un par de tenis, algo de maquillaje y artículos de limpieza personal. Abrí el guardarropa y empecé a buscar una maleta de viaje, pero no la encontré.

—¿Necesitas ayuda? —giré hacia la puerta y Eliot estaba recargado al marco con los brazos cruzados.

Lo miré con atención y no podía creer que estaba recogiendo mi ropa para irme a vivir con él.

—Estoy buscando mi maleta pero creo que está en la cochera.

Miró todo lo que había puesto sobre la cama —No te preocupes si no te cabe todo, compraré lo que te haga falta.

Cartas con destino al cielo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora