10. El amor de su vida.

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El mismo lugar que había sido testigo de cuánto se amaban, también estaba siendo testigo de cuánto daño a Eliot le causaban

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El mismo lugar que había sido testigo de cuánto se amaban, también estaba siendo testigo de cuánto daño a Eliot le causaban.

═══════≪ Madison Mintz ≫═══════

Harold abrió la puerta de la oficina y me indicó pasar primero, mi atención cayó en Min al instante, Elena y Clay me miraron y luego a Harold que al entrar cerró detrás de sí.

Sentí la mirada de Franchesco sobre mí, y al mirarlo ví que su atención estaba fija en las carpetas que tengo en las manos.

—Hasta que llegan —se quejó Min.

—Ella estaba buscando algo importante, así que tuve que ayudarla un poco —resumió Harold.

Esnifé y me acerqué a Min.

—¿Encontraste algo? —mi voz salió un tanto rasposa por haber llorado.

Min empezó a teclear en la computadora y pronto se desplegó un vídeo de un hospital, se veía... abandonado.

—¿Es ahí? —inquirí, deseando que la respuesta fuese un "no".

—Sí. —Giró en la silla y nos miró a todos mientras explicaba—: Es un hospital psiquiátrico, su nombre es Amador D'auxure, pero está fuera de servicio desde el año pasado —me miró y luego a Franchesco—, díganme ustedes si es posible que Eliot esté ahí.

Empecé a rebuscar entre las carpetas que llevaba y abrí la del documento hospitalario.

—Miren —inicié, colocando la carpeta abierta sobre el escritorio—, aquí dice que Eliot fue internado de forma involuntaria en ese hospital, tiene la firma de un doctor, no perderemos tiempo buscándolo porque es muy seguro que le diga a Eider, el punto es que, tengo la corazonada de que Eider compró y deshabilitó el hospital para que nadie descubriera lo que hacía con Eliot.

—Claro, todos piensan que está en Rusia —habló Elena—, pero... oye chico, ¿puedes ver si hay cámaras en ese lugar?

—Por supuesto —Min giro en la silla, hacia la computadora y empezó a teclear.

Cartas con destino al cielo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora