CAPÍTULO 31.- segundo fragmento

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Solo diré una cosa...

Amo demasiado escribir sobre Estefan.

Cada vez que escribo sobre Estefan y Joon escucho  skyfall de Adele o i wanna be yours  de arctic monkeys

Espero les guste el cap <3



***




Alan hablaba con algo de agitación de todas las ceremonias de nacimiento que habían truncado, explicando lo que habían encontrado y el tipo de magia que enfrentaron.

Joon escuchaba atento mientras Estefan miraba a nada en específico con cara de aburrimiento.

Su tío tuvo ganas de gritarle como siempre lo hacía, reprenderlo por no prestar atención y hacerle comprender que estaban en un peligro mortal, a pesar de que ellos eran poderosos podían salir muy heridos de esta ocasión.

Sin embargo, se guardó su rabia porque sabía que solo lograría discutir con él sin sentido, era como verse reflejado, recordaba lo inconsciente e infantil que también era él a esa edad. Estefan podría ser incalculablemente poderoso, pero no dejaba de ser su majadero sobrino que apenas había alcanzado la mayoría de edad.

—Entonces ya deberíamos estar en marcha —dijo Joon mirando hacia el cielo—. Ya está anocheciendo.

—Dentro de poco saldrá la luna y ellos seguramente estarán preparando todo para empezar con su ritual de nacimiento —dijo Alan—. Entonces irrumpimos y le arruinamos la fiesta.

—¿Están más adelante cierto? —pregunto Estefan después de bastante rato callado—. Puedo sentir muchas cosas raras más arriba en el monte.

—Si, creo que están debajo de una cascada cercana y seguramente ya nos esperan —respondió Alan mirando en esa dirección—. Deben suponer que los hechiceros y vampiros no llegaron por nosotros.

—¿Es realmente necesario llevar a Joon? —preguntó Estefan.

Joon puso los ojos en blanco.

—Supongo que solo para la entrada —Alan volvió a prestarles atención—. Todas las entradas siempre están selladas con la magia característica del lugar donde estamos, como explique, cuando ya estemos dentro, Joon tendrá que volver.

—¿Por qué no simplemente no destruimos todo? —Hablo Estefan con fastidio—. Si los enterramos vivos nos evitaremos problemas.

—Deben tener distintas salidas y además es necesario destruir los altares yo mismo —respondió Alan—. Tengo que sellarlos para que dentro de otros 50 años no intenten traer otros demonios.

—Entonces hagámoslo —dijo Estefan asintiendo a regañadientes—. Hay que matarlos a todos y volvamos a casa.

Los dos jóvenes siguieron al semidemonio mayor dentro del bosque que se internaba más al monte, dejando atrás el claro donde habían tenido su trágico pasado.

Sin embargo, los recuerdos no dejaban de saltarle a Estefan en la mente, estaban recorriendo el camino que él había tomado hace más de 600 años atrás, para recoger agua.

El destino parecía siempre llevarlo al mismo lugar.

Joon sintió su intranquilidad y se acercó más a él, sabía que su calor y su aroma relajaba a su mate. Estefan no demoró en atraerlo con cariño y ansias. Estaban enojados el uno con él otro, pero eso no importaba en esos momentos.

HEIRS OF THE RISING KINGDOMWhere stories live. Discover now