Nunca Seré Como Ellas

27. ¿Quién eres?

Melody
-¡Fue genial! ¡Sigue así, Chris!- grito Mark desde las gradas y estaba sentado de lado de ¡¿Zack?!.

¡¿Qué?!

No, no, no. ¿Esto se puede poner peor?

Pensé en los idiotas y los busque con la mirada, estaban escondidos en las gradas y solo me hicieron una seña con el pulgar de arriba y vi desde lejos que articulaban "buena suerte".

Y lo próximo que sentí fue la duela en mi cara.

-Enano, ¿qué no te fijas, por donde caminas?- escuché la voz de Issac. Me había tropezado con mis propios pies. Me levante rápidamente del piso, aunque empecé a sentir algo en mi nariz, toque y había sangre.

Genial....

-Lo siento, sólo iré a la enfermería- le avise, él parecía despreocupado y asintió. Yo me iba dirigir a la salida, pero opte por irme por la salida más pequeña, para no llamar mas la atención. Además, de que sentía que dos personas se me iban abalanzar en cualquier momento.

Como lo predije, empecé a caminar rápido en dirección opuesta de las gradas. Pero, ya sentía los pasos de las personas atrás.

Parecía, que tenia dos gorilas como guardaespaldas.

Quiero que me trague la tierra, en este momento.

-Puedo ir a la enfermería yo solo, no es tan grave- dije calmado, por dentro estaba bastante enojada.

-No, te pienso acompañar- hablo el oji-verde.

-¿No crees, que es suficiente con lo que hiciste?- le pregunto Muller.

Quiero correr y huir, de estos dos.

-Pero se lo dije, cuando se iban a regresar a sus posiciones- se defendió Crowley.

-Eso no le quita, que se sorprendió porque le llamaste y por eso lo desconcentraste- reclamó el niñato.

-No importa, yo tuve que tener más cuidado cuando corría- corte a ambos, antes de que siguieran discutiendo- Les agradezco, su preocupación pero no es necesario que me acompañen- apresure más mi paso con el fin de que se fueran.

-Oh no, por su puesto que no- dijo Zack y escuche como ambos apresuraban más sus pasos.

Deje de caminar y ambos se pararon cuando lo hice. Me di la vuelta y mire a los dos gorilas, que tenía persiguiendome.

-No soy una chica- los mire alternativamente.

Zack se quedo un poco en shock, sin saber que decir.

-¿Eso que tiene?- preguntó Mark y sin verlo venir paso un brazo sobre mi hombro, inmediatamente me tense- ¿Qué no puedo cuidar de mi amigo?- evite la mirada con él.

-Tiene razón, eres delicado. Por eso, no podemos dejarte solo- concordo Zack.

Ehhhh... ¡¿Qué?! ¡¿Ahora se están poniendo de acuerdo?

-Esperen... ¿cómo es que...- comencé a decir.

-No podemos dejar solo a nuestro delicado amigo- me interrumpió Mark, sonrío un poco divertido.

Me contuve de hablar, quería matar a ambos.

-Si quieres te podemos cargar- ofreció Muller con una sonrisa y se puso del otro lado de mi- No tenemos ningún problema, lo primero es que tu te encuentres bien- comenzó hablar por los dos. Pero, el otro castaño parecía no importarle lo que dijo, ya que solo asentia con la cabeza.

-A mi, si me importa parece que tengo dos guardaespaldas- por no decir, gorilas- Repito, no soy una damisela en apuros- volví a insistir de manera amable.

-No, nos importa- dijeron a unísono, iba darme por vencida pero vi a lo lejos como se acercaba la bruja desde atrás de ellos.

-Creo, que tienen otro asunto que atender- señale atrás de ellos. Voltearon y no perdí ni un segundo para desaparecerme de ahí.

*

Narrador omnisciente

Melody llego a la enfermería y dejó ambos en el pasillo, mientras observaban que Lorraine se acercaba rápidamente a ellos resonando sus típicos tacones negros. No se dirgia a ellos con una actitud muy agradable, al llegar los miró como si los fuera a fusilar con la mirada.

-¡Hola, mi amor!- dijo al instante Crowley, mientras que parecía que la pelinegra se le iba lanzar encima en cualquier momento.

-¿Eso significa que viniste a ver, al renacuajo?- preguntó molesta Lorraine- De verdad, pensaba que venias a verme -alzó la voz molesta y un poco dolida.

Zack se quedo un poco impactado por la reacción de Lorraine, ya que no esperaba nada de lo que estaba sucediendo.

-Ehhhh.... bueno yo creo que mejor me voy. No quiero, meterme en...- dijo Muller con la intención de irse.

-¡¿Y tú?! ¡¿Qué carajos se supone que haces aquí?!- interrumpió la joven molesta- No me digas, que también ¿vienes a ver a tu amigo?- preguntó más enojada qué antes.

Zack se quedo mudo y solo quería desaparecer de ahí, antes de ver como se armaba una revolución. Mark también notaba la incomodidad de Zack, al estar ahí.

-¿No deberiamos irnos, Lorraine?- dijo Mark. Esperando, a que ella se calmara un poco- Perdón, sino te avise que pasaría por la escuela. No lo pensé, bien- se disculpo para que no hubiera alguna escena o algo por el estilo. Lorraine volteo a verlo de nuevo, pero con enojo todavía presente.

-¿Porque, les interesa tanto ese enano?- les pregunto a ambos. Mientras, se quedaba en silencio y se cruzo de brazos, observo a los alternativamente.

-¿Pero, que cosas dices? Es obvio, él es mi mejor amigo y por él conocí al amor de mi vida- dijo Zack con un tono altanero. Mark solo desvío la mirada y se contuvo de no reflejar su enojo. Lorraine lo miró con decepción y rodó los ojos. Dirigió su mirada con su esposo y este saco un suspiro.

-Nos hicimos buenos amigos, cuando fuimos a la empresa de Muller y te fuiste con Zack- explico calmado el castaño- Además, él me cayo muy bien desde que trate con él- la pelinegra bufo molesta y  dio media vuelta.

-Te veo, después del partido Mark- se retiro con la misma actitud y refunfuño por lo bajo.

-Perdón, creo que fue mi culpa- se disculpo Crowley con Muller.

-No te disculpes, ya se como es ella. Es rara verla de esa manera. Pero entiendo que es normal en una pareja casada- negó con la cabeza y todavía se quedo asimilando lo que había sucedido. Porque, nunca había visto de esa manera a Lorraine. -Creo, que deberiamos de regresar. Nuestra sola presencia, causa mucho alboroto- dijo para aligerar el ambiente.

-Estoy de acuerdo contigo- concordo el otro castaño, mientras reían ambos.

*

Por otro lado, Jake salia de la enfermería porque se había encontrado a Chris en el camino. Pero, para su sorpresa se encontró con una fastidiosa mujer que lo veía con inferioridad. Jake solo rechino los dientes y quiso evitar cualquier tipo de interacción con ella. Aunque, ella no tenia para nada esa intención.

-Uf- bufo con arrogancia y para llamar la atención del rubio- ¿Quién te crees que eres para ignorarme?- le pregunto irritada.

-¿Quiere que le diga majestad, reina, líder o excelencia?- contestó con sarcasmo- No eres nadie para que me estés reprocancho, Lorraine- dijo lo último con un mal humor- Somos iguales, no te confundas- la miró de la misma manera que ella lo había hecho antes.