Nunca Seré Como Ellas

15. No puedo hacer esto

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Los estaré leyendo ;)
¡Cambio y fuera!
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Antes del encuentro de Mark y Jake....

Melody

¡Oh, vamos! Tiene que ser una jodida broma. Olvide mi chaqueta en una de las aulas y yo ya me quería largar a mi apartamento. De mala gana, regrese a buscar en cada uno de los salones que había estado. Realmente, quería estar un tiempo a solas por lo que pasó el día de hoy, pero parece que ni ese capricho puedo tener.

—¿Estás bien?— pegué un brinco por el susto, creí que estaba completamente sola.

—Ahh. Por favor, no vuelvas asustarme de esa manera— le dije, poniendo una mano sobre mi pecho.

Me miro extrañado y confundido.

—No es usual de ti—se acercó —¿No escuchaste cuando abrí la puerta y te llame?— me entregó mi chaqueta.

Estaba tan perdida en mis pensamientos y en mi deseo de irme de este lugar, que ni me di cuenta de su presencia.

—No —desvíe la mirada avergonzada— ¿Y desde cuando le hablas a tu superior, de forma informal?— regañe al tonto rubio que estaba delante mío.

—Pffff..... —pusó su mano sobre su boca, aguantándose la risa— regresó la maestra ¿en si misma? ¿ehhh? — dijo pícaro Jake.

—Gracias— le agradecí— Por animarme—sonreí de lado— Cuando estemos solos, me puedes llamar por mi nombre—puso los ojos en blanco— Por favor, no pongas esa cara. No soy tan mala —entrecerro los ojos— Bueno... a lo mejor un poco. Ese no es el caso, lo que quería decir es que ustedes son los únicos que saben lo complicado que es para mí— Jake asintió en silencio y un poco decaído, es raro.

—Lo sé— sin verlo venir, él me abrazo y quede petrificada ante eso. Segundos después, le correspondí el abrazo porque era lo necesitaba— Nosotros comprendemos lo difícil que puede ser para usted—dijo mientras deshacia el abrazo— Además de que todos queremos conocer la verdad, de lo qué pasó hace cuatro años. Pero no podemos, porque arruinaríamos la misión— afirme dándole la razón.

Por más, que quiéramos acércanos y preguntar. No podemos, nos conoce y pone en riesgo nuestra misión; tenemos que mantener nuestra distancia con él.

—Vamos a concentrarnos en nuestro trabajo—dije, Jake sonrió con aprobación— Sí, acabamos con esto antes. Podré preguntarle lo que realmente paso, así que no se les ocurra acercarse a él—le advertí y me puse mi chaqueta— Nos vemos, en unas tres horas "para mi despedida y vuelo"—salí del salón para dirigirme lo más rápido posible a mi apartamento.

*

Mark

Después, de haberme reencuentrado con James. Seguí buscando a mi esposa, ella al estar molesta, se desquitaba mucho con los trabajadores y no quiero que les haga la vida imposible a ellos.

—Amor— la llame desde lo lejos, ella me volteó a ver con indiferencia— Vamos a comer juntos, como querías— regresó su atención a los trabajadores y suspiré— Mira, siento lo de antes y como disculpa comeremos en tu restaurante favorito— los demás me agredecían con la mirada.

—Mmmm....—meditó no tan convencida de la idea.

Sabía que no, la iba a convencer solo con eso.

—Y vamos al cine— cedí.

Los trabajadores alzaban sus pulgares y festejaban en silencio hacia mi. Conocían que no se quitarían a Lorreine de encima, si tenía un pésimo humor.

—Esta bien—se dirigió a mi— Mañana los veré con el informe de hoy, pueden recoger sus cosas y descansar— tomo sus pertenencias, agarro mi mano y salimos de la universidad.

Yo no tenía ganas de comer, ni de ir al cine. Pero, no me gustaba pelearme con Lorraine; la quiero mucho y la aprecio demasiado. Quería ir a mi casa, encerrarme en mi estudio y planear lo que iba hacer para aclarar las cosas con Melody. No quiero que se casé con ese mujeriego ricachon, no soporto la idea. Y por otro lado, no puedo poner mi trabajo en riesgo.

Ya al llegar restaurante, ordeno cada quien su comida.

—¿Te encuentras mejor?— le pregunte a mi acompañante, ella asintió contenta mientras comía su comida.

—Por eso, te amo— dijo a la vez que tomaba otro bocado, yo reí— Me conoces tan bien, cuando estoy de mal humor— dejo de comer y se limpió con la servilleta— Mark, yo quiero que nosotros....— arrugó con su mano la servilleta.

—Ya hemos hablado de esto, Lorraine. Muchas veces— la interrumpí y le recalqué que no era el momento, ni el lugar para hacerlo.

—Tienes razón— dijo cabizbaja, tome su mano y le di un pequeño apreton, ella sonrío un poco— Gracias— murmuró y continuo con su degustación.

Siguió la tarde normal, hasta que llegamos al cine y escogimos una función. Esta se trataba de una película de terror; a ella le fascinaba leer libros de terror y suspenso tanto como las películas. En varias ocasiones, hemos llegado a discutir por las películas; ya que nuestro gustos son muy opuestos.

No me desagradan las películas de terror, pero no las encontraba tan interesantes.

Faltaba poco para que se acabara la película, pero Lorraine hizo un comentario que no me esperaba para nada.

—Este día no fue como esperaba, pero resultó mucho mejor. Gracias— me agradeció —Y lo bueno de todo esto, es que se larga la perra de Zack a California y no tendré que soportarla por bastante tiempo— dijo a la vez que tomaba otro puñado de palomitas.

—¿Eso significa que volverá o no?— mis manos comenzarón a sudar y empece a sentir bastante ansiedad.

—Volverá hasta la boda, donde tendré que verle la jeta de nuevo como en unos cuatro meses— me contesto sin despegar la vista de la pantalla.

¡¿QUÉ?!

Después, de que  acabara la película le dije a Lorraine que tenia que ir al baño.

Cosa que era mentira.

Tomé un taxi lo más rápido posible.

—Lléveme al aeropuerto lo más rápido posible y le pagó el doble— el taxista no dudo ni un segundo y arranco. Mientras, yo escribía un mensaje de texto a Lorraine.

"Perdón, tuve que salir de imprevisto hacia la casa de Caleb. Te veo en la casa."

Mandé otro mensaje a mi amigo Caleb para que me cubriera.

Al llegar, le pagué lo prometido al conductor y entré corriendo al aeropuerto. Por lo que, pude inferir de lo que dijo Lorraine es que apenas saldría el vuelo a California.

—Disculpe, señor no puede entrar sino tiene un boleto de avión— dijo el policía que se encargaba pasar a los pasajeros.

—Necesito pasar, estoy buscando a una persona— le mostré mi placa y se retiró dejándome ingresar— Gracias— le dije.

Seguí mi camino a toda velocidad, pero habían demasiadas personas e iba ser muy difícil encontrarla. Busque en todos los lugares que podía estar, hasta que llegue a verla desde lo lejos. No esta lejos y puedo alcanzarla.

Es mi última oportunidad.

—Yo no haría eso si fuera tu, Mark— sentí escalofríos al escuchar eso y me quede helado— ¿Quieres arruinar todo?—dijo.

Ella agarró su equipaje y se levantó del banco que estaba sentada para dirigirse a su vuelo. Yo quería correr como loco hacia ella, pero mi cabeza me dice que no me deje llevar por mis impulsos. Suspiré y me quede quieto en mi lugar.

—Eso pensé— pude sentir como sonreía detras mio.

Me sentí incapaz de responderle y destruido por dentro.