MERODEADORES: Historias de amor y guerra.

10.- Vida vs Muerte (Sirius Black)

Era la primera vez, en siete años, que me decepcionaba de James. Tal vez yo no podía comprenderlo porque jamás me había enamorado pero... ¿Dejar a tu mejor amigo de lado? Palabra de Black, que eso jamás sucedería. Amigos antes que chicas.

Apostaría lo que fuera a que Evans lo dejaría de lado más temprano que tarde y lo bajaría de esa nube rosa. Nada me quita de la cabeza que James se está ilusionando de l a nada.

Bajé lo más rápido que pude de la habitación dejando a mi mejor amigo atras y choqué con Remus, que subía distraído la escalera.

- ¿Sirius... Qué...?

Fue lo que alcancé a escuchar que salió de su boca mientras yo lo esquivé ignorándolo y me fui de la sala común.

En mi cabeza daban vueltas muchas cosas que quería olvidar... pero que por más que tratara, al parecer jamás podría. Pensé que hacía ya muchos años atrás que las relaciones con mi familia habían dejado de importarme y afectarme, pero al parecer en lo más profundo de mi corazón aún causaba más impacto de lo que yo quería aceptar.

Me detuve a mitad de un pasillo random y me apoyé contra la pared, cerrando los ojos y dejando que los recuerdos de aquella noche en Las Tres Escobas me inundaran.

Estábamos rodeados. Los Mortifagos y sus aliados nos comenzaban a superar por número. Miré a Sparks de reojo, se encontraba a solo a unos centímetros de mí y se veía agotada pero no perdía la guardia. Era a la única que podía ver, había perdido de vista a James y Remus, y me encontraba demasiado rodeado para darme el tiempo de buscarlos.

Los hechizos se lanzaban en todas direcciones y lo único que pensaba era en salir con vida de esa situación.

De pronto, dos Mortifagos más entraron y tomando en posición su varita avanzaron hacia nosotros, ya que Ayra y yo éramos los más cercanos a ellos.

Antes de esperar un ataque por parte de ellos, le lancé un hechizo al más alto, el hechizo rebotó en su máscara y la lanzó lejos, dejando al descubierto su rostro...

Regulus.

Abrí la boca sorprendido y sentí otra voz familiar.

- ¡Acaba con ese traidor a la familia! ¡Es la oportunidad más que perfecta!

Era mi prima mayor, Bellatrix. No era necesario que se quitara la máscara, su insana voz podría reconocerse sin problemas en cualquier lugar.

- ¡BLACK, CUIDADO!

Ayra gritó y me empujó al piso, logrando esquivar una luz verde que daría de lleno en mi pecho.

- ¿Estás bien? - Me miró acalorada y yo asentí, poniéndome de pié rápidamente.

Los miembros de mi familia habían sido enfrentados por otros magos y ahora se regían en una ardua batalla aunque Regulus volvía su mirada de odio hacia mí cada vez en cuanto.

- ¿Tú estás bien? - Examiné a mi compañera con la mirada, tenía una herida en una mejilla, pero solo eso - Hay que salir de aquí - Miré hacia todos lados buscando una salida, cuando un hechizo impactó de lleno en mi brazo.

Caí al piso de golpe y lancé un hechizo sin saber bien donde iba destinado, pero al parecer acertó, ya que sentí un quejido por parte de mi hermano. El muy imbesil no jugaba, si no que disparaba a muerte.

Ayra me tomó del brazo bueno rápidamente y creó un hechizo protector sobre nosotros; me ayudó a ponerme de pié y tratamos de salir de ahí.