-Esta noche ha sido magnífica, han pedido la mano de tu hermana-dijo el hombre recargándose más en su asiento, dándole un sorbo a su copa. -¿Pidieron la mano de Angii? Vaya ya era hora, pobre sujeto-respondió el otro, sonriendo, cambiando rápido de expresión cuando vio a su padre negar lentamente- ¿Vas a entregar así de buenas a primeras a mi hermana menor? -Te recuerdo, querido hijo, que Angii también es tu hermana pero sí, nuevamente ella a cautivado todas las miradas. Los Marquéz están encantados y ansiosos por... -No me importa cómo estén, no vas a entregarla a ellos, menos a su hijo es un cerdo en todo el sentido de la palabra. -¿Quieres acaso que te de su mano? ¿Eres tú el único digno de ella? El joven se puso de pie y lo miro muy seriamente. -Mi hermana no va a casarse con ese hombre, tienes la propuesta de ese príncipe es el más apto de todos. -Sabía que entrarías en razón tarde o temprano, hijo.