—James, deja todo lo que estás haciendo porque ya llegué. —canturreó Murphy adentrándose sin ningún permiso previo a la habitación de Bucky, que se encontraba usando o más bien investigando un teléfono móvil.
El nombrado alzó la vista mirando a Lucas con una inexpresiva pero enorme e intensa mirada azul. No era el mejor momento para soportar a Lucas y su extravagante forma de ser, más bien era el peor momento de toda la semana. Estaba algo melancólico y recibir a Lucas con todo el temperamento y desorden que su carácter suponía, era una dura prueba.
—¿Qué quieres? —trató de preguntar Bucky sin sonar descortés.— ayer no viniste en todo el día, pensé que estabas mal por algo, pero veo que no. Sigues siendo tú.
Lucas comenzó a toquetear todo en la habitación de Bucky desordenándolo todo y colocándolo a su gusto.
—Ya sé que me extrañaste pero estuve ocupado. —se sentó a su lado y tomó el IPad que descansaba polvoriento y olvidado en la mesa de centro de la habitación del hombre.— estuve todo el día con tu novia, y lo reconozco, tiene una bonita forma de ser. —dijo mientras haciendo uso del IPad realizaba una búsqueda por internet.— entiendo la obsesión de Parker y la tuya, es encantadoramente adorable. Mi hijo saldrá igual, pero más bonito.
—Me alegro de que ya estés conforme con lo de tener un hijo, te vas acostumbrando. —le felicitó Bucky.— y te recuerdo, no es mi novia. —le corrigió de mala gana mientras se cruzaba de brazos. Aunque le gustase un poco la denominación.— ¿me estás diciendo que la ves como una... Hija? Eso es raro.
Lucas se encogió de hombros sin apartar la vista de la pantalla.
—Solo digo que mi hijo quiero que sea como la hija de Stark, además créeme que es mucho mejor que yo la vea como una hija a que tu la veas como una futura novia.
—Eres muy desagradable cuando quieres. —dijo algo molesto el hombre a la vez que Lucas le lanzaba un beso. Ahora había algo que le preocupaba más. ¿Qué hacía Lucas pasando una tarde entera con Carey?
—Estuve con ella porque hicimos un acuerdo, no pienses cosas raras. —le aclaró Lucas con tranquilidad, volviendo una vez más y como todos los días a leerle la mente a Bucky sin ningún permiso.— yo la ayudo con Peter y ella a mi con Wanda.
—¿Que la ayudas con Peter? ¡Venga, no me hagas esto! Éramos amigos, traidor.
—Ya te dije que no es tu momento ahora, dale tiempo al tiempo.
Bucky se quedó en silencio y asintió quitándole cualquier importancia a lo que pudiera decir Lucas. Hasta el momento no había nada que le generara especial interés, conocía a Lucas y sabía que a él le encantaba meterse en problemas por lo que cualquier "trato" que estuviera haciendo con la Stark muy seguramente iba a salir lo peor posible. Y como iba a salir mal eso significaba que Peter y Carey no volverían, de ahí su repentina tranquilidad ante ese tema.
—Buck, ¿Qué opinas de este? —preguntó Lucas mostrándole la foto de un anillo de compromiso por el IPad al hombre.— no estoy muy seguro, igualmente tengo más opciones.
Y ahí es cuando Bucky comenzó a tener muchísimo interés por esa conversación.
—No me digas que le vas a pedir matrimonio a... —soltó un suspiro de sorpresa al ver el suave asentimiento de cabeza de Lucas, absteniéndose de terminar la frase.— Dios mío Luke, si ni siquiera están juntos.
—Confío en mini Stark y su capacidad de persuasión. —dijo con una sonrisa mientras seguía observando varios anillos.— estoy locamente enamorado de ella, y es que vamos a ser padres. No veo mejor momento que este. Lo he estado pensado y me hace ilusión ser padre, tener una familia con ella. Me gustaría que nos mudásemos juntos y hacer como los príncipes de Disney, ser felices y comer perdices. ¿Te imaginas? —le preguntó riendo.
Bucky no sabía cómo expresar su opinión sin ofender a su amigo. No era que no le gustase Wanda para él, de hecho en todo caso sería al revés. Pero no estaba contento y era más bien por una razón egoísta. Si Lucas y Steve se llegaban a casar, él pasaría a segundo plano, dejaría de formar parte de la vida de ellos dos y como consiguiente, se quedaría solo. Él mismo también, sí estuviera sano y tranquilo, le encantaría casarse y tener hijos, no entendía por qué le molestaba tantísimo que sus amigos hicieran eso. Quizás porque era mayor, quizás porque estaba resentido. Él también se merecía algo así y le tocaba estar solo de nuevo.
—Pero no te puedes casar con ella, apenas se conocen de unos meses. —le recordó Bucky, comenzando a manifestar su opinión sobre el tema.— ¿y si no es la indicada? No, es mala idea. ¿Te recuerdo que estás divorciado porque con dieciocho años también te casaste de forma impulsiva?
—Ay por Zeus, qué tiene que ver mi ex mujer con todo esto. —rodó los ojos.— la vida es corta, James. Bueno, en tu caso no... Pero lo que quiero decir es que igual mañana no estoy aquí, y si tengo que pasar el resto de mi vida con alguien, quiero que sea con la mujer que me va a dar mi primer hijo y me hace creer otra vez en el amor. —insistió el abogado con una corta sonrisa mientras que a la misma vez Bucky ponía peor cara.— además, maldito envidioso, tú si pudieras también te casarías y me dejarías solo, que ni se te ocurra poner otra vez esa cara de desaprobación porque te tragas el IPad. —añadió Lucas adoptando su forma de ser habitual.
Bucky lo miró ofendido y le quitó el Ipad de la mano, escondiéndolo detrás de él.
—Lucas suelta el Hay Pan y escúchame, es importante. —dijo con angustia el hombre ya que comenzaba a comprender que no había nada que pudiera hacer cambiar de opinión a su amigo.
—No, no te escucho. —se cruzó de brazos, apartando la mirada para hacerle entender que "no lo escuchaba".
—Wanda te dirá que no, le fuiste infiel y además la hiciste sufrir, vas a gastar dinero en una decepción amorosa.
—Me sobra el dinero y opiniones ajenas. —lo miró mal.
—¿Sabes?, ya eres demasiado mayor para casarte, esas cosas se hacen más joven.
—Es que ya me casé más joven. —le recordó Lucas.— me puedo volver a casar sin problema.
—Sigo pensando que estás muy mayor.
Lucas se giró rápidamente mirándolo de la peor manera posible, ahora no sabía si reír o molestarse aún más.
—¿Qué derecho tienes tú a decirme que estoy mayor, viejo envidioso? —se levantó molesto, yendo directamente a la puerta.— creía que tú siendo mi mejor amigo me apoyarías, pero supongo que te idealicé. Seguro que a Steve no le hubieras puesto tan mala cara.
—Luke...
—Cállate, James. No quiero escuchar ninguna negativa más de tu parte. —lo miró una última vez antes de irse, negando con suavidad.— gracias por nada. No esperes una invitación para la boda.
Diciendo esto último y tras echarle una fría mirada, Lucas abandonó la habitación de Bucky, molesto plenamente por no recibir apoyo o al menos un comentario alegre por cortesía.
Una calurosa discusión entre los Stark también se había hecho presente ese mismo día. Tony insistía en que su hija debía ir a una buena escuela y que Peter sin embargo era mejor que se quedase donde estaba. A Carey no le hizo ninguna gracia y tras varios minutos de discusión todo concluyó en que se haría lo que Tony decía, aunque eso implicaba que su hija iba a sabotear la entrevista para que no la aceptasen.
Molesta tras la discusión y por primera vez sin contar con el apoyo del capitán, que había decidido no condicionarse por ninguno de los dos, caminaba con rapidez en busca de Alan. Lo necesitaba para distraerse y disipar su enfado.
Encerrada en sus pensamientos y sin mirar bien por donde iba se chocó contra otra persona, cosa que le hizo perder el equilibrio durante unos segundos.
—Cuidado. —advirtió Peter sujetándola del brazo con fuerza antes de que cayese.
Carey perdió todo su enfado repentinamente. Algo nerviosa miró a Peter y le sonrió discretamente.
—Gracias Peter. —murmuró y aclaró su garganta.— perdóname, estaba distraída y no miré.
Peter relajó su expresión y asintió ligeramente, sonriéndole de esa manera tan tierna que sólo él podía hacer.
—No es nada, créeme cuando te digo que soy mucho más torpe que tú. Aunque supongo que eso ya lo sabes.
—Sí... Lo sé, me acuerdo. —se encontraba más cómoda con su presencia.
Había pasado días ignorando al chico y ahora tenerlo delante como si nada hubiera pasado era de lo más extraño. Había que tener cierta delicadeza con lo que se decía pues si querían evitar hablar sobre lo que había pasado entre ellos no cualquier tema era válido.
—No quisiera molestarte más. —dijo Peter tras esos escasos pero intensos segundos de silencio.— ya nos veremos por ahí.
Y despidiéndose con un suave gesto de mano y una suave, pero forzada, sonrisa se dispuso a retomar su paso hacia donde se dirigía. Suspiró levemente tratando de calmar los nervios y descargar parte de la tensión del momento, aunque sabía que le costaría incluso horas llegar a calmarse del todo.
—Peter, espera. —le llamó la Stark antes de que el chico desapareciera de su campo visual.
Se acercó al chico que ahora lucía un poco confundido, no sabía qué decirle en realidad, solo quería que no se fuese.
—¿Tienes algo importante que hacer? Acabo de discutir con mi padre y necesito distraerme. —murmuró desechando la idea de serle sincera y decirle lo que realmente sentía; quería volver con él. No sabía si por orgullo o porque su padre se lo había prohibido, pero quería.
—No en realidad, iba a ir a visitar a tu padre pero ahora que me dices que discutiste con él supongo que estará molesto. —dijo Peter tratando de sonar de lo más tranquilo, aunque realmente sentía bastantes nervios.— ¿qué fue lo que pasó entre ustedes?
Carey se sonrojó ligeramente al recordar el verdadero tema de conversación. Todo había sido porque básicamente ella no se quería alejar de Peter, aunque no se lo diría a él. Eso no cambiaría nada, por lo que prefirió no indagar mucho en el tema y contarle por encima.
—Solo no estuvimos de acuerdo en algo. Nada más que eso.
Peter la miró y asintió, de nuevo se hizo presente el silencio incómodo. El chico bajó la mirada, reuniendo valor para lo que diría. Quería aprovechar esa oportunidad para hablar con ella ya que Tony le había prohibido acercarse y ella prácticamente lo ignoraba.
—Tengo que decirte algo. —comenzó diciendo.— lo siento. Sé que de nada sirve y que llego muy tarde pero quiero que sepas que sé que me equivoqué. No debí dejarte ni alejarme por algo que tú no tuviste la culpa, ahora gracias a eso no he estropeado sólo nuestra relación sino que ademas no me dejan ni acercarme a ti. Entiendo que me ignores y que me odies, pero quiero que sepas que aunque actué de la peor manera igualmente te quiero, como el primer día. Estoy completamente enamorado de ti.
Suspiró con algo de alivio de haber dicho lo que sentía. Se esperaba un golpe por parte de Carey o quizás que se fuera, pero no pasó. La chica se quedó junto a él, mirándolo sin aún creer lo que había escuchado. Balbuceaba algo que no terminaba de ser ni una palabra coherente, que Peter le hubiera abierto su corazón tan repentinamente la había pillado totalmente por sorpresa y no sabía qué diría. Pero sí qué haría.
Se acercó a él y sin pararse a meditarlo demasiado tiempo le dio un beso en los labios, cosa que aparte de sorprender a Peter le hizo comprender que por fin, ella lo perdonaba.