Narra Dani.
Me pongo el abrigo y agarro la maleta bajando las escaleras.
Mi hermano está desayunando en el salón y oigo a mis padres hablar en la cocina.
Jesús: ojalá no tuviera que ir a clase -se queja mirándome
Dani: despiértate tío, que ya es hora -lo animo
Suelta una carcajada irónica.
Jesús: tú no estás sobado porque vas a conocer a tu suegra -apunta- porque sino lo estarías, incluso más que yo -se defiende
Me río dándole la razón y me dirijo a la cocina.
Ya es viernes, por fin.
Desayuno en unos diez minutos y ponemos rumbo a casa de Sara, pasando antes por la de Ana y Álvaro para dejar a mi gemelo.
Jesús: disfruta capullo, y tráeme una postal de la Sagrada Familia -bromea bajándose del coche
Dani: sin duda -vacilo despidiéndome con la mano
Y después de un par de minutos, llegamos a nuestro destino inicial.
Llamo a mi chica por teléfono indicándole que ya estamos en la puerta, y en apenas un par de segundos aparece sonriente.
Se sube al vehículo, sentándose a mi lado, y Luis deja su maleta en el maletero.
Sara: hola -saluda alegre a mis padres
'Hola guapa' le responden al unísono.
Su padre se acerca a la ventanilla del copiloto, empezando a charlar con los míos.
No puedo dejar de mirarla con una sonrisa imborrable mientras se pone el cinturón.
Alza la cabeza una vez lo consigue y se topa con mi mirada, haciéndola sonreír de nuevo.
Sara: estoy nerviosa -murmura
Y se acerca a mí dejando un corto beso en mis labios.
Dani: ¿por qué? -cuestiono acomodándome en el asiento
Sara: vuelvo a Barcelona, contigo -aclara- vas a conocer a mi madre -alza las cejas obviando sus nervios
Dani: le voy a encantar -vacilo haciendo que esboce una sonrisa
Sara: lo sé
Dejo mi mano en su muslo animándola a entrelazar sus dedos con los míos, y así hace.
Llegó el día de partir hacia Barcelona.
Sé cuánta ilusión le hace y creo que me la ha contagiado a mí.
Hemos pasado toda la semana quedando por las tardes los cuatro -Sara, mi hermano, Ana y yo- para 'estudiar' para el teórico del carnet.
Digo 'estudiar' porque al final cualquier tontería era buena excusa para cerrar los libros.
Tenemos ganas de quitarnos el examen de en medio, pero estudiar siempre da pereza.
Y en cuanto al tema de la Universidad, en una de esas tardes perdidas nos dio por buscar carreras, y encontré así "Ciencias de la Actividad Física y del Deporte".
Siempre me ha gustado todo lo relacionado con el deporte, así que, por ahora, esa es la carrera que pretendo hacer.
No he vuelto a hablar de eso con Sara.
Intentar aclarar nuestro futuro solo nos va a traer quebraderos de cabeza, porque ahora mismo todo está en el aire.
Supongo que tiene razón, y que lo mejor ahora mismo es dejar que las cosas fluyan.
. . .
Nos despedimos de mis padres y entramos en la estación.
Un escalofrío sacude mi cuerpo.
Trago saliva.
Tengo un recuerdo tan amargo de la última vez que estuve aquí que...
Suspiro.
Sara: ¿qué pasa?
La miro y sonrío tristemente.
Y creo que no es necesario que le diga nada, porque sabe lo que pasa.
Lleva su mano hasta la mía, entrelazando nuestros dedos sin articular palabra y recordándome que esta vez no se va ella sola.
Pasamos un par de controles de seguridad y nos montamos en el tren finalmente.
Divisamos nuestros asientos y avanzamos hasta ellos.
Dani: ahora mismo nos estamos riendo de la vida -anuncio sentándome
Suelta una pequeña carcajada.
Sara: espero que sigamos haciéndolo -apoya su cabeza en mi hombro
Dani: mírame -le pido tras unos segundos de silencio
Hace justo lo que le digo y beso sus labios con delicadeza.
Sonríe levemente al separarnos.
Dani: vamos a seguir haciéndolo, tenlo claro -susurro
Se acerca a mi boca de nuevo como respuesta para después volver a apoyarse en mi hombro.
Nuestros dedos se entrelazan, otra vez, y al poco tiempo noto como su respiración comienza a ser pesada, indicándome que se ha dormido.
. . .
Siento una mano en mi pelo que pasa posteriormente a mi mejilla.
Sara: amor -trata de despertarme
Abro un ojo, encontrándome, esta vez yo, apoyado en su hombro.
Dani: me he dormido por tu culpa -me froto el otro ojo y lo abro también
Suelta una risa.
Sara: ¿por mi culpa?
Dani: pues sí -alzo las cejas incorporándome- nadie me daba conversación
Besa mi mejilla repetidas veces haciéndome sonreír, y paso uno de mis brazos por sus hombros.
Sara: estamos llegando -anuncia
Resoplo.
Dani: ¿en serio voy a conocer a mi suegra con esta cara de sobado?
Sara: sí cariño -vacila
La miro desafiante y termino bostezando, perdiendo toda mi credibilidad.
Se ríe de nuevo y busca mis labios ante mi mirada amenazante.
Dani: te quiero
Sara: te quiero -alza las cejas divertida dejando una de sus manos en mi rostro
Y, por megafonía, la voz de una mujer nos indica que hemos llegado a Barcelona.
Le doy un último y rápido beso y nos levantamos, cogiendo nuestras maletas y saliendo del tren.
Ella está concentrada en su móvil, hablando con Marisa, supongo.
Yo he de reconocer que estoy algo nervioso.
Me paso los dedos por el tupé para asegurarme de estar bien peinado.
Sara: ya sé dónde está, ven -hace un gesto con su cabeza
La sigo durante un par de minutos hasta que diviso a lo lejos a una mujer rubia.
Es ella.
Sara me mira un segundo y puedo notar su felicidad.
Marisa: hola corazón -exclama correspondiendo a su hija en un abrazo
Observo la escena sonriente, hasta que se separan y Marisa se acerca a mí con los brazos abiertos.
Marisa: ¡el famoso Dani! -me saluda
Dani: ¿ya iba siendo hora de conocernos no? -le doy dos besos
Marisa: evidentemente -asiente- eres más guapo en persona eh -aclara haciéndole una mueca burlona a mi chica
Sara: mamá -rueda los ojos en una queja
Suelto una carcajada.
Dani: usted también
Marisa: ay por favor háblame de tú, me siento mayor cuando me llaman usted -me susurra
Dani: tú mandas -bromeo
Sara: creo que os vais a llevar demasiado bien, tengo miedo -admite
Tanto su madre como yo sonreímos divertidos.
Marisa: ¿dónde os apetece comer? Invito yo -nos guiña el ojo
. . .
Sara: estoy muy cansada -se queja montándose en el coche
Me monto a su lado, en los asientos traseros, mientras Marisa arranca.
Nos ponemos el cinturón y automáticamente Sara apoya su cabeza en mi hombro, en la cual dejo un beso.
Hemos pasado una tarde turística por el centro de Barcelona.
Bueno, turística para mí.
Y la verdad es que ha sido movidita.
Sumándole lo poco que dormí anoche a la caminata que nos hemos dado, afirmo que yo también estoy muy cansado.
Marisa: ¿no vais a salir? -nos pregunta dirigiéndose a su casa
Mi chica me mira y suelto una risa.
Su cara me indica que ganas de salir tiene pocas.
Sara: ¿quieres salir? -murmura
Sé que mentalmente está rezando para que diga que no.
Dani: yo también estoy cansado -admito
Suspira.
Sara: gracias -me dice aliviada
Y se incorpora para besarme varias veces, cogiéndome por sorpresa.
Marisa: ¿hola? -alza la voz con tono burlón
Ella sonríe contra mi boca.
Me humedezco los labios y vuelve a apoyarse en mi hombro.
Sara: no vamos a salir mamá
Deja su mano en mi pierna, la cual empiezo a mover nervioso cuando alza la cabeza, respirando sobre mi cuello.
Capulla.
Marisa: pues yo voy a cambiarme de ropa y me voy, he quedado para cenar con unas amigas -informa- volveré a casa sobre las... bueno no sé si..., sí, sí que dormiré en casa, qué digo -recapacita- no, así os dejo un poco de espacio, duermo fuera -anuncia finalmente mirándonos a través del retrovisor
Dani: no te preocupes Marisa, duerme en casa -le quito importancia
Sara comienza a reírse, aún en mi cuello, ante mi nerviosismo, contagiándome una sonrisa tonta.
Pellizco su muslo haciendo que se sobresalte y en dos segundos muerde con fuerza mi piel.
Marisa: no cariño, ya me habéis tenido hoy todo el día pegada a vosotros
Ahogo una queja ante la acción inesperada de mi chica y ella estalla en sonoras carcajadas.
Marisa: ¿qué pasa? -cuestiona
Y le doy gracias a Dios o a lo que exista por ser de noche y haber poca luz.
Se aleja de mí, como si no acabara de morderme el cuello como si de un vampiro se tratase.
Sara: nada mamá -cesa su risa
Alzo las cejas y le lanzo una mirada llamándole la atención.
Dani: ya te vale -gesticulo con los labios
Sara: perdón -me dice del mismo modo
Me mantengo serio un segundo hasta que, inevitablemente, sonrío.
La que es mi suegra para el coche, por lo que deduzco que hemos llegado.
Marisa: ¿me paso a comprar una pizza mientras os ducháis? -se gira para mirarnos
Sara: sí por favor -suplica
Marisa: vale -nos guiña el ojo
Dani: gracias Marisa -le digo antes de salir del vehículo después de su hija
Marisa: nada cariño, Sara, ¿te has traído las llaves?
La susodicha asiente antes de cerrar la puerta.
Sacamos nuestras respectivas maletas del maletero y nos adentramos en el patio de la vivienda.
❤️
Feliz Navidad un poco atrasada !!! 🤗
Perdonad mi desaparición pero entre los exámenes finales y las vacaciones no he tenido tiempo de actualizar. A pesar de ello estoy escribiendo capítulos para poder subir más a menudo cuando volvamos a clase 🔥
❤️
Si COMENTAS en este capítulo te AVISARÉ cuando suba el siguiente ⚡
❤️
La PREGUNTA DE HOY, aprovechando estas fechas:
¿Os gusta la Navidad? ¿Preferís Nochebuena o Nochevieja?
Os leo 😊