Llegaste tú 2 || Gemeliers

Capítulo 52.

Narra Sara.

Dani: esto de ir en bañador y sudadera es demasiado raro -frunce el ceño caminando a mi lado, haciéndome reír

Tiene razón, pero no hay nada más guay que bañarte en una piscina en pleno enero.

Climatizada, obviamente.

El presupuesto no da para irnos a Punta Cana.

Sara: eres un quejica

Abre la puerta del recinto dejándome pasar y me saca la lengua cuando lo hago.

Hay únicamente dos parejas que apenas notan nuestra presencia.

Y aparte de la piscina, también hay un jacuzzi.

Nos dirigimos hacia las hamacas y nos apropiamos de dos de ellas para dejar nuestras toallas.

El calor asfixiante que hace aquí dentro provoca que Dani se deshaga de su sudadera rápidamente.

Y yo tardo lo mismo que él en quedarme en bikini.

Dani: ¿vamos? -pregunta quitándose las zapatillas

Asiento repitiendo su gesto y caminamos hasta los escalones de la piscina.

Él entra en el agua primero y yo meto un pie comprobando que está a una buena temperatura.

Alzo la cabeza para mirarlo y lo veo sonriendo ante mi gesto.

Dani: no está fría -me dice burlón

Sara: ya lo sé -le respondo del mismo modo cuando el agua me llega por las rodillas

Me adentro aproximándome a él y extiende el brazo ofreciéndome su mano cuando la distancia nos lo permite.

La tomo y tira de mí pegándome a su cuerpo, pasando su brazo por mi cintura.

Esto delante de gente que no conozco y que para colmo podrían ser mis padres, me da un poco de vergüenza.

Y creo que él lo nota, ya que esboza una sonrisa divertida acercando su boca a mi mejilla, la cual empiezo a notar caliente y, por tanto, supongo que roja.

Dani: no veía a la Sara tímida desde hace bastante tiempo -murmura en mi oído

Sara: tú solo piensa que pueden ser nuestros padres -apoyo mis manos en su pecho

Suelta una risa leve alejándose unos centímetros para mirarme.

Dani: pero no lo son

Abro los ojos exageradamente cuando siento su otra mano ascender por mi muslo.

Sara: Dani -le llamo la atención

Dani: ¿y si lo fueran qué pasa? -me ignora por completo

Sara: para por favor

Me está poniendo muy nerviosa.

La puerta de la sala se abre dejando ver a una pequeña niña de unos 5 años con sus padres.