𝗢𝟱𝟱. la pérdida de un hijo
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Rachel junto a Suni ayudaba a los demás empacar todo lo que usarían para el viaje. Sería un viaje largo—y según el hijo mayor de Deanna complicado—ya que traerían muchisimas cosas, entre ellas intentarían conseguir una máquina ultrasonido.
Una parte de Rachel estaba más que emocionada por el hecho de que si conseguían traerla, por fin podría ver al bebé que hace siete meses abarcaba dentro de ella, pero por otro lado la preocupación de que Glenn y Noah estarían afuera la llenaba por completo.
—Anoche te escuché hablando con Holly.—Suni le habló a Noah mientras le ayudaba a empecar.
—Sí, ¿y?—preguntó el moreno con una sonrisa, la asiática alzó una ceja.
—¡Fue una pregunta inocente! no me obligues a pegarte.—le retó mientras le pegaba en el brazo, Rachel les observó con una sonrisa cuando la risa de ambos no tardó en llegar a sus oídos.
—Hey.—la castaña se gira cuando alguien la toma del brazo, al mirar por sobre su hombro, logra ver a Glenn quien le miraba con una sonrisa.—Está todo listo.
Rachel sonríe y no tarda en colocar su mano sobre la mejilla del asiático.—Lo lograran, siempre puedes.
Glenn no puede evitar sonreír para luego estampar sus labios contra los de ella, Noah no puede evitar compartir una mirada burlesca con Suni, quien solo rodó los ojos.
—¡En marcha, se nos va la luz del día!
La asiática se coloca junto a su madre cuando su mirada se enfoca en Glenn, él no tarda en darle una media sonrisa y revolver su cabello con cariño.
—Estaré aquí en unas horas, por mientras cuida a mamá, ¿está bien?
—Siempre me dices lo mismo.—se queja mientras se cruza de brazos, Glenn sonríe y menea la cabeza.—Ya lo tengo grabado.
—Lo sé, pero solo me gusta recordartelo. Estoy orgulloso de ti, ¿lo sabes, verdad?
Suni sonríe ante las palabras del coreano y no tarda en abrazarle con fuerza logrando sacarle una sonrisa a más de una persona en el lugar.
Tras separase, el asiático comparte algunas palabras con Denna y su esposo, tan pronto como conversa él se mete al auto y el vehículo avanza. Dejando atrás a las Rhee junto a los Monroe.
—Volveran a salvo.—asegura Reg sonriendole a Rachel, esta hace una mueca y trata de sonreír a pesar de que siente un vacío en su pecho.
—Lo sé.
—¡Mamá! Carol me dijo que podríamos ir hacer galletas con ellas, ¿vamos?
Deanna sonríe tras la insistencia de la asiática, y Reg sujeta su hombro cariñosamente. Rachel desvía la mirada hacia el camino que se habían marchado antes de posarla sobre su hijo.
—Claro, vamos.
—Suni, cariño. ¿Puedes pasarme la harina, por favor?—Carol pidió amablemente a la coreana, la niña asintió y no tardó en acercarse a Carol con la harina en mano.
—No sabía que tus galletas eran tan ricas hasta que las probé en la fiesta, Carol.—Rachel le dice con sorpresa mientras bate el chocolate para que se derrita.
—¡Es cierto! Ron y yo las probamos y quedamos...encantados.—admite mientras asiente.—Eres talentosa en la cocina.
—Y estoy segura que en muchos aspectos más.—Rachel bromea logrando sacarle una sonrisa cómplice a Carol.
Ambas se quedan calladas unos segundos más mientras cada una esta concentrada en cada cosa, Carol amolda la masa, Rachel bate el chocolate y Suni mezcla algunos ingredientes.
—Y...¿cómo va todo el tema del bebé?—Carol pregunta con una sonrisa mientras enfoca su mirada en la crecida panza de su amiga.
—Oh..—por inercia la mujer lleva su mano a su panza.—estoy bien, Pete avisó que dentor de poco nacerá ya que al aprecer será prematuro, algo así, él lo sospecha pero no está seguro. Por eso traeran la máquina.
Carol alza las cejas de la sorpresa.—¿Y tiene nombre?
Enseguida Rachel enfoca su mirada en Suni, quien había dejado de mezclar los ingredientes para mirarlas.—Noah y yo estabamos pensando en Alexandra si es niña...por honor a Alexandria.—traga saliva al sentir la mirada potente de la mujer en ella.
—Eso suena bonito, cariño.—Rachel sonríe.—¿Y niño?
Suni baja la mirada avergonzada ante el nombre que pensó, pero luego tragó saliva y alzó la mirada con un leve sonrojo.—Sunset me gusta.
Rachel y Carol se miran con una sonrisa ante el nombre ocurrido de la niña. A Suni le gustaba que la llamaban Sun por honor al sol, por lo cual no fue sorpresa que para su futuro hermano le gustara que se llamara Sunset, en honor a la puesta de sol.
—Sunset será entonces.—Suni muerde su labio con alegría tras escuchar las palabras de su madre, Carol las mira con una sonrisa y niega.
Ambas siguieron haciendo las galletas hasta que fueron puestas finalmente en el horno, y mientras están se hacian, fueron hasta la sala para poder jugar un rato a las cartas.
Solo faltaban unos minutos para que empezara a oscurecer cuando la camioneta en la que se habían ido Glenn y compañía esta mañana se abrió paso por las calles de Alexandria. Suni, quien se encontraba hablando con Mikey sobre el cómic que récientemente había leido, fue la primera en correr para darle la bienvenida a todos, sobre todo porque quería prestarle su cómic a Noah.
Sin embargo antes de llegar, el primero en bajar de la camioneta es Glenn, quien se encontraba con una mirada furiosa dejando desconcentrada a no solo a Suni, si no también a varios Alexandrianos quien se habían acercado para curiosear lo que había traido el grupo.
—¿Papá..?—pregunta confundida la niña, sin embargo Glenn la ignora y abre el baúl.
Alguien también se baja de la camioneta, se trata de Eugene quien trae a Tara en brazos. Enseguida varias exclamaciones se escuchaban por algunos Alexandrianos y no tardan en acercarse para ayudarlo a llevarla a la enfermería con Pete.
Rachel se acerca ante todo el alboroto y busca con la mirada a Glenn, sin embargo solo logra ver a Glenn, Tara y Eugene por lo que inmediato frunce el ceño.
—¿Dónde están los demás?—pregunta alguien desconocida a un lado de la castaña.
Glenn finalmente se gira y comparte contacto visual con algunos, parandolo en Rachel. Él intenta abrir la boca para hablar, pero tan solo niega mientras traga saliva.
Suni retrocede antes de enfocar su mirada buscando rastro de Noah; su hermano. Pero solo empieza a negar mientras siente un nudo formarse en su estómago, Rick y Carl se acercan corriendo para poder apreciar mejor lo que estaba sucediendo.
Carl al ver a Suni tan afectada, no tarda en abrazarle, por lo que esta vez la asiática decidió ignorar sus sentimientos por él y abrazarlo.
Rachel se hizo paso para llegar hasta el asiático, una vez frente a él, ella vio como una lágrima rodó por su mejilla.
—Glenn..
—Lo perdí.
Rachel rompió en llanto y lo abrazó con fuerza.
Aquella noche los Rhee no pudieron dormir.
estamos llegando al final gente!