Narra Dani.
Al menos no me ha matado ni me ha gritado.
Bueno, por ahora.
Saco las tostadas y el alivio es real al ver que no se han quemado.
No creo que le apetezca churros o algo con chocolate con la resaca que tiene que tener.
Y soy un desastre en la cocina, para qué engañarnos.
Zumo de naranja, tostadas, galletas... fresas.
Necesito fresas.
Abro el frigorífico y...
Dani: bingo -murmuro
Cojo una pastilla, que supongo que le vendrá bien, y me dirijo a la habitación con el desayuno.
Pero me encuentro con ella a mitad de las escaleras.
Sara: te has pasado -alza las cejas mirando la bandeja
Dani: ¿dónde vas? -hablo a la misma vez que ella
Esbozo una inevitable media sonrisa al verla así.
Prácticamente recién levantada, con una sudadera mía que le cubre justamente lo que tiene que cubrirle y el pelo despeinado.
Rastros de rimmel en sus ojeras me indican que anoche no hice muy bien mi trabajo, el de desmaquillarla digo.
Es que joder, ahora mismo podría dejar el desayuno a un lado y llenarla de besos.
Podríamos tirarnos las horas muertas tumbados en la cama haciendo nada, con nuestras tonterías continuas y sus carcajadas constantes.
Quiero quererla y que se deje querer.
Qué digo, quererla ya la quiero, es obvio.
Pero necesito que me deje demostrarlo porque me matan las ganas de besarla, con seguridad y sin miedo.
Con seguridad de que mañana también podré hacerlo y sin miedo a su reacción segundos más tarde.
Sara: Daniel -chasquea los dedos delante de mi cara haciendo que salga de mis pensamientos
Dani: ¿qué pasa? -vuelvo a la realidad- ¿estás mejor? ¿no prefieres desayunar en la cama?
Sara: te estoy diciendo que quiero bajar al salón -me dice sin entender nada
Dani: ah... claro
Me dirijo al salón y dejo la bandeja en la mesa.
Veo como mira apetitosa las fresas.
No falla. Le encantan.
Sara: en realidad no tengo hambre
Dani: tienes que comer algo
Se sienta finalmente y bosteza.
Sara: gracias -murmura después
Sara: ¿y tus padres? -habla de nuevo
Dani: han dormido en tu casa -le informo
Sara: ah... -asiente
Dani: cuánto echaba de menos verte así -suelto sin dejar de mirar como empieza a desayunar
Ella alza la vista y se ríe levemente.
Sara: ¿así de guapa? -ironiza
Me siento frente a ella.
Dani: en su día te dije que eras preciosa incluso recién levantada -apoyo mis brazos en la mesa- y sigo pensando lo mismo
« flashback »
Dani: lo que tú digas, pero te he traído churros y chocolate
Sara: -se destapa la cara y me mira- ¿en serio? -pregunta ilusionada
Dani: -la miro fijamente- como puedes ser tan guapa incluso recién levantada tío
« fin flashback »
Me mira y se centra de nuevo en su desayuno, ésta vez más seria.
Sara: como cambian las cosas eh -murmura
Dani: esa decisión ha estado en tus manos -musito
Sara: ya, mientras las tuyas estaban en el culo de Sandra -suelta tajante mientras mastica- tus manos digo
Frunzo el ceño molesto.
Dani: ¿por qué no te olvidas de eso y te quedas con todo lo bueno que he hecho por ti? -pregunto
Se queda callada y se levanta dirección a las escaleras después de tomarse la pastilla.
Dani: creía que tenías más coraje -suelto yo ahora
Sara: ¿qué? -se gira para mirarme amenazante
Dani: creía que eras capaz de arriesgarte por lo nuestro, pero veo que el miedo te supera -continúo
Se queda mirándome en silencio hasta que estalla.
Sara: ¿¡cómo quieres que no me supere el miedo después de ver cómo terminas haciéndome daño de la forma más rastrera posible?! -exclama- ¿¡qué quieres que te diga?! ¡no Dani, no pasa nada no te preocupes, confío en ti plenamente y sé que no vas a volver a liarte con Sandra! -ironiza llena de rabia alzando los brazos- ¡es que me da hasta asco nombrarla!
Dani: supongo que será fácil pasar del tema si ya no sientes absolutamente nada por mí -le digo totalmente relajado
Sara: ¿¡que no siento nada por ti?! -los ojos se le llenan de lágrimas rápidamente- ¡nunca he dejado de quererte gilipollas! -rompe a llorar
Se sienta en el primer escalón de las escaleras y se tapa la cara con las manos.
Sara: no aguanto más -solloza
Esto estaba buscando.
No, claro que no tenía la intención de hacerla llorar.
Simplemente quería que soltara todo lo que tenía guardado dentro de sí misma.
Me levanto de la silla y me agacho frente a ella agarrando sus brazos para apartarle las manos de la cara.
Agacha la cabeza con su rostro empapado en lágrimas.
Dani: necesitabas desahogarte -murmuro
Me mira unos segundos y vuelve a agachar la cabeza.
Solloza.
Me siento a su lado en el escalón y agacho la cabeza yo también.
Dani: sé que tienes miedo Sara... -hablo tras unos segundos de silencio- y no te culpo por ello porque te dije que no iba a hacerte daño y joder, -suspiro- te he visto llorar mil veces por mi culpa y créeme que me siento la persona más despreciable del mundo por ello -admito, y noto como se me nubla la vista
Ella permanece mirando hacia abajo y su llanto no cesa.
Dani: y... no voy a mentirte, lo único que buscaba cuando te conocí era un rato contigo como con todas las demás, pero no sé... con el tiempo me di cuenta de que eras diferente, -la miro- que no me bailabas el agua y que eras difícil, muy difícil -aclaro
Asiente admitiéndolo.
Dani: yo siempre había ido a lo fácil y estaba acostumbrado a irme con cualquiera sin ningún tipo de esfuerzo -continúo- pero... llegaste tú con tu pasado, tu carácter de mierda y tu don de ser borde por naturaleza y... -alzo la cabeza y me muerdo el labio inferior para evitar que mis lágrimas caigan- y las ganas de quitarte a besos todos los miedos se apoderaron de mí, ¿sabes?
Me mira fijamente y una lágrima desciende por mi mejilla al encontrarme con sus ojos brillantes.
Dani: y no sé -me encojo de hombros- todo fue demasiado rápido y de un momento a otro empecé a sentir algo que... nunca había sentido -trago saliva- y me asusté, me asusté porque nunca había tenido la necesidad de estar con una persona -admito- me sentía jodidamente bien cuando estábamos juntos y a pesar de no entender qué me estaba pasando contigo, decidí arriesgarme. Y no te imaginas cuánto me alegro de no haberte dejado ir... -agacho la cabeza de nuevo- cada vez que te miro siento y sé que eres la persona con la que quiero estar diez vidas enteras si hace falta y... -suspiro con la voz temblorosa- sé que esto está sonando muy cursi -sonrío tristemente- pero... pase lo que pase, aunque no volvamos a estar juntos, aunque decidas seguir con tu camino... quiero que sepas que nunca, nunca -repito- voy a olvidarme de ti
Siento muchísimo el tardar tanto en subir capítulo, pero ya llega un punto en la novela en el que hay que pensar milimétricamente todo lo que escribes, espero que me entendáis y os pido perdón de nuevo!!! Este capítulo es más largo como recompensa 😝❤❤