Distancia.
Una palabra. Un significado. Cientos y miles de corazones rotos por ella. Personas sintiéndose solas en este mundo por culpa de esa palabra.
Cuando piensas en la persona que más quieres en este mundo, pero te das cuenta de que no estas con ella y te separan miles de kilómetros, sientes impotencia. Y esa impotencia va creciendo mientras piensas más en la distancia.
Simplemente quieres salir corriendo para disminuir esos kilómetros que hay de separación entre tú y la persona a la que quieres. Escapar de donde estas, coger el primer avión que haya hasta el lugar en donde él o ella esta y abrazarle para nunca dejarle ir. Para nunca dejar que se vaya y que la distancia se vuelva a interponer entre vosotros.
"¿En que piensas?" La voz de Jason me sacó de mis pensamientos mientras comía algo para comer. Tragué la cucharada de yoghurt de grutas que tenía sobre una pequeña mesa sobre mis piernas y suspiré mirándole atentamente.
Me encogí de hombros. "Extraño estar con los chicos. Eso es todo." Le intenté quitar importancia con una leve sonrisa y volví a tomar otra cucharada. El me miró suspirando.
"Lo se, pero tienes que recuperarte antes." Se acercó a mi dándome un ligero apretón en mi hombro. Yo asentí.
"Lo se, pero..." El me interrumpió.
"Pero echas de menos a Justin." Me miró a los ojos. Me quedé en shock por su respuesta. El emitió una pequeña risa divertida al mirar mi reacción. "Tranquila, es normal." Sonrió tranquilizándome.
"Ayer no llamó." Me recosté sobre mi cama con la espalda contra la cama algo elevada. Suspiré y miré a la nada.
"Estabas durmiendo cuando llamó por la noche." Le miré rápidamente. Eso no me lo había dicho. "Le dije que no podías hablar y me comentó que te dijera que había llamado." Tragó saliva.
Fruncí mi ceño. "¿Pensabas decírmelo?" Le desafié con mi mirada. Estaba molesta por eso.
"Tranquila chica." Puso sus manos delante de él con diversión intentando aliviar la tensión que había crecido en tan solo segundos. "Acabas de despertarte, ni siquiera he tenido tiempo." Se excusó.
Yo suspiré. "Esta bien." Me disculpé agitando mi mano. "Lo siento yo--"
"No pasa nada. Se como te sientes." Me miró con comprensión en sus ojos.
"Llevo días en esta cama durmiendo, sin hacer nada y creo que hasta estoy olvidando como andar." Mordí mi labio. El rió divertido.
"_____, tranquila. No te vas a recuperar en dos días, esto lleva su proceso."
"Pues se podía dar prisa ese proceso." Dije con molestia y el rió de nuevo. "Estoy cansada." Lamí mis labios.
"Paciencia _____, esa es la clave." Me miró sonriente.
Suspiré. "Lo se." Tragué saliva y lamí mis labios poco después. "¿Donde están mis padres?" Pregunté con curiosidad arqueando mis cejas.
"Están en la cafetería comiendo algo, han entrado pero estabas dormida." Yo asentí con mi cabeza y justo en ese momento la puerta de la habitación se abrió. Apareció Adrián y sus ojos azules, por los que un día me quedé sin aliento.
Me sonrió mientras se aproximaba hacia mi. Jason me miró y yo le asentí con mi cabeza para decirle que nos dejara solos. "Nos vemos luego chicos." Jason comentó mientras Adrián asentía, caminando hacia la cama para quedarse de pie a mi lado.
"¿Como estas?" Preguntó sonriente mientras me miraba, una vez que los dos escuchamos el sonido de la puerta al cerrarse.
Yo suspiré. "Supongo que mejor. Han pasado ya cuatro días." Me encogí de hombros y el se sentó en una silla a mi lado, después de acercarla. Sus codos se pusieron en sus rodillas y se acercó un poco a la cama mirándome atentamente.
"Ya verás como pronto te dan el alta, es cuestión de tiempo..." Yo asentí con mi cabeza sonriendo algo fingidamente. Suspiré. "¿Estas bien?" Preguntó con curiosidad frunciendo su ceño en el centro de su frente.
Mordí mi labio intentando contenerme pero no pude evitarlo más. "En realidad quería hablar contigo sobre la noche en la que me operaron." Tragué saliva y luego lamí mis labios. "O debería de decir, la noche en la que tu y Justin casi os peleáis." Le miré con molestia en mi mirada.
El se quedó sorprendido por mi reacción. "_____, yo--" Le interrumpí.
"¿Porque montaste todo eso?" Le miré con decepción en mis pupilas.
Suspiró. "Simplemente... estaba fuera de mis casillas. Sabía que estabas mal y estaba alterado por lo que había pasado y el susto y..." Pasó su mano por su nuca. "Perdí los papeles." Se encogió de hombros.
Tragué saliva sintiéndome mal por ser tan dura con él. Su mirada se había suavizado bajo la mía. Lamí mis labios y suspiré. "Eso no te da el derecho de culpar a Justin por lo que pasó, porque él no tuvo la culpa."
Levantó su mirada para mirarme atentamente a los ojos. "Pero arriesgaste tu vida por él." Me miró sin dejar ir mis ojos.
"Sigues sin tener derecho a culpar a una persona por algo que él no ha hecho." Fruncí mi ceño esquivando su pregunta.
"Si no hubieras--" Le interrumpí.
"No sigas." Tragué saliva con dificultad.
"Lo siento." Suspiró. "Pero no puedo evitar pensar que si ese chico no se hubiera cruzado en tu camino, tu no habrías salido herida aquella tarde. Al fin y al cabo, tú estabas protegiéndolo y creo que él tiene muchos gorilas rodeándole las veinticuatro horas del día, para que tu le tengas que proteger. Ni siquiera se preocupó por ti por el tipo que te acosaba." Se levantó de la silla mientras mi mirada se levantaba sin apartarla de su rostro. "Al menos, si se hubiera preocupado, te hubiera protegido y habría puesto medidas para que ese hombre te dejara en paz, ¿no?"
"Es mi decisión. Yo decidí arriesgarme y no decirle nada a nadie. En todo caso, fue mi culpa, no la suya. El no sabía nada del tipo que me estaba acosando."
El suspiró. "¿Vas a seguir defendiéndolo?"
Asentí con mi cabeza. "No me gusta que culpen a personas que no tienen culpa alguna." Mi mirada era dura.
Tocó su pelo de nuevo con su mano con frustración. "Joder." Se volvió dándome la espalda y guardó un momento algo de silencio mientras mi mirada se posaba sobre su espalda esperando a que dijera algo. "Tienes algo con él, ¿Verdad?"
No respondí. El se volteó para mirarme atentamente. "No es tu problema, Adrián." Lamí mis labios.
Suspiró. "Me lo estas confirmando."
"¿Y que si lo tuviera? Eso no te sigue dando derecho a que le culpes por mi disparo." Lamí mis labios.
Suspiró y negó con su cabeza mirando al suelo mientras soltaba una risa sarcástica. "No puedo creerlo." Tragó saliva. "Si realmente le importaras no habría creído esos mensajes y no te hubiera dejado tirada."
"Todos cometemos errores." Le desafié con mi mirada.
"Por eso decidiste irte del tour, ¿Verdad?" Me miró atentamente. "Por que el se había creído esos malditos mensajes y estaba enfadado contigo." Frunció su ceño en su frente. "No puedo creer que todavía lo defiendas ______." Negó con su cabeza.
Mi corazón se empezó a acelerar, sintiendo como la máquina a mi lado emitía más sonidos agudos mientras pasaban los segundos. "Fue mi decisión no decirle a nadie lo que pasaba. Fue mi decisión irme del tour. Pero el no ordenó que me pegaran un tiro en el pecho y mucho menos me apuntó con la pistola o lo que fuera que me disparó." Dije alterada.
El suspiró dirigiéndose hacia la cama con preocupación al sentir como la máquina emitía mas pitidos de lo normal. Lamió sus labios. "Lo siento." Tragó saliva.
Me recosté cerrando los ojos, esquivando su mirada y suspiré intentando calmarme. Ni siquiera contesté, simplemente permanecí con mis ojos cerrados. La puerta se abrió rápidamente mientras una de las enfermeras pasaba. "¿Esta bien?" La voz aguda de una enfermera morena me hizo girar mi cabeza para mirarle.
Asentí con mi cabeza. "Si, estoy bien." Lamí mis labios.
"Hemos escuchado que el ritmo cardiaco estaba aumentando." Se dirigió hacia la máquina y empezó a ver una hija con rayas de color negro escritas. "¿Que ha pasado?" Levantó su mirada del papel blanco.
"Nada." Negué con mi cabeza. "Es... la emoción." Si, menuda emoción. Me encogí de hombros y ella sonrió con comprensión.
"Esta bien, si se encuentra mal, solo tiene que avisarnos." Asentí con mi cabeza.
"Gracias." Suspiré mientras ella cerraba la puerta a sus espaldas.
La mirada de Adrián volvió hacia mi. "Lo siento." Se disculpó de nuevo. "Es solo que... No me gusta ese chico."
Miré hacia el techo mientras sentía su voz a la vez que se sentaba en la silla a mi lado. Tragué saliva con dificultad y ni siquiera dije nada. Solo guardé silencio.
"_____, mírame." Le miré rápidamente, coincidiendo con esos ojos azules.
"¿Que?" Espeté con molestia.
El suspiró pasando su mano por su pelo. "Siento lo de antes... no pretendía hacerte sentir mal." Lamió sus labios con arrepentimiento.
Asentí con mi cabeza. "Vale." Todavía conservando mi semblante serio.
"No me gusta verte en una camilla, y recordar lo que ha pasado..." Suspiró profundamente. Parecía que lo estaba pasando mal. Agachó su cabeza mirando al suelo. "No quiero que te vuelva a pasar lo mismo."
Mordí mi labio. "Es normal." Tragué saliva susurrando con voz ronca. "Pero eso no te da derecho a decir lo mismo de nuevo." Lamí mis labios. "Odio los escándalos y tu lo sabes perfectamente."
El sonrió levemente como si recordara algún momento del pasado cuando estábamos juntos. "Lo se." La sonrisa se desvaneció poco después de sus labios.
"Y pensar que casi llegáis a las manos ahí afuera... me hace sentir mal." Tragué saliva.
"Lo siento por lo que pasó... sabes que pierdo los papeles en seguida." Suspiró intentando justificarse.
Asentí con mi cabeza. Adrián tenía muy poca paciencia y le costaba controlarse algunas veces. Sabía como era perfectamente. "Si."
Sus ojos azules me miraron de nuevo.
"No quiero que vuelvas a echar la culpa a Justin, porque si alguien es el culpable aquí, es el tipo que me estaba acosando." El asintió con su cabeza.
"No pasará de nuevo, te lo prometo." Esbozó una pequeña sonrisa y sentí alivio al saber que había conseguido llegar a él mediante mis palabras, aunque sabía que todavía no le gustaba Justin.
Asentí con mi cabeza. Pero no sonreí, no después de lo que había pasado.
"¿Como te sientes?" Preguntó de nuevo.
Suspiré. "Algo mejor."
"¿Te gusta la comida de aquí?" Me preguntó curioso.
Negué con mi cabeza mirándole sorprendida. "¿Desde cuando la comida de los hospitales esta hecha para gustarle a la gente?" Fruncí mi ceño y el soltó una pequeña carcajada.
"Matarías por una de las tartas de tu tía, ¿verdad?" Me miró atentamente y esbocé una sonrisa sin poder evitarlo.
"Sin pensarlo dos veces." El rió de nuevo mientras se acercaba a mi y me daba un beso en la mejilla.
"En realidad yo también." Sonrió contento mientras susurraba sus palabras mirándome a los ojos.
Esbocé una pequeña sonrisa y suspiré con cansancio. Estaba agotada.
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"Todavía no puedo creerlo. Nunca pensé que Adrián fuera capaz de decir semejantes tonterías." Lily se llevó las manos a la cabeza por décima vez desde que le había contado la conversación de esa mañana con Adrián.
"Ni yo. Pensaba que se disculparía o algo así..." Negué con mi cabeza suspirando. "Pero las personas te sorprenden." Lamí mis labios.
"Cuando salga de aquí, te juro que le voy a ..." Le interrumpí.
"Lily, no vas a hacer nada, ¿vale?" Le miré intentando tranquilizarla con mi mirada.
Suspiró. "Lo siento." Tragó saliva. "Es que... ¿Como se atreve a empezar a decir esas cosas sabiendo que tu estas aquí, mal, tumbada en la cama de un hospital?" Negó con su cabeza.
"Hey!" Le llamé la atención frunciendo mi ceño. "No me estoy muriendo."
Ella suspiró. "Lo que sea. Los doctores dijeron que nada de emociones fuertes después del disparo, al menos durante unas semanas." Tragué saliva. "Por cierto, Miley llamó cuando estabas durmiendo."
"Oh, Miley." Dije con tristeza. "No he podido llamarla, he estado durmiendo todo el tiempo." Suspiré.
"_____, estamos hablando de Miley." Sonrió tranquilizándome. Yo asentí con mi cabeza escapándose una sonrisa de mis labios. "Ha dicho que no pasaba nada." Suspiré.
Poco después vino a mi memoria de nuevo la discusión con Adrián. Negué con mi cabeza. "¿Mi madre o mi padre dijeron algo cuando casi se pelean?" Miré a Lily atentamente.
Ella negó con su cabeza. "Tu padre no estaba, pero tu madre--" La puerta se abrió de repente mientras me encontraba con los ojos chocolate de mi madre.
"¿Que pasa con tu madre?" Frunció el ceño entrando con un café sobre su mano. Le miré sorprendida. No solía beber café. Su voz era divertida cuando cerró la puerta acercándose a nosotras.
"Oh nada." Lily sonrió quitándole importancia mientras negaba con su cabeza.
"¿De que hablabais?" Nos miró con curiosidad.
"Mamá, ¿que haces con café? ¿no lo odiabas?" Arqueé mi ceja mirándola. Ella rió con diversión.
Se encogió de hombros. "Has dormido demasiado estos días querida." La voz de mi madre me hizo sonreír. "No he parado de beber esta cosa desde que vinimos al hospital el otro día." Dio un sorbo a su café. "Los cafés de America son muy buenos." Dijo saboreándolo.
Lily y yo reímos con diversión.
"Y no pienses que me has distraído con esa pregunta, jovencita." Me miró apuntándome con su mano mientras se acomodaba en el sillón. "¿Que pasaba conmigo?" Frunció su ceño.
"Solo hablábamos de la noche en la que Adrián y Justin casi se pelean en le pasillo." Fulminé a Lily con mi mirada en silencio y ella se encogió de hombros.
Mi madre suspiró. "Me sorprendió ver a Adrián así de alterado, realmente no me lo esperaba." Tragó saliva lamiendo sus labios. "El otro chico, Justin, se sorprendió por lo que él le dijo." Yo suspiré.
"No había necesidad de decirle eso a Justin." Negué con mi cabeza.
"Adrián no tenía que haberle dicho nada." Lily estuvo de acuerdo conmigo.
Mi madre nos miró y asintió con su cabeza dirigiendo su mirada hacia el bote de su café de Starbucks. "No todos días te dicen que es tu culpa que alguien salga disparado, cuando en realidad no la es." Ella se encogió de hombros. "Vi normal que Justin le contestara y se alterara tanto." Lamí mis labios al escuchar su respuesta.
"Y lo peor es que estoy segura de que todavía sigue pensando que fue su culpa." Negué con mi cabeza sin comprender la actitud de Adrián.
"Ya sabemos como es Adrián querida." Mi madre contestó. "Siempre ha sido muy cabezota." Bebió poco después un sorbo de su café.
"Lo se, pero eso no le da derecho a decir semejante cosa." Negué con mi cabeza con fervor. Y ella sonrió estando de acuerdo conmigo.
"Jason me dijo que Justin estaba todavía mal por lo que pasó con Adrián." Lily comentó. Miró a sus dedos mientras jugaba con ellos con nerviosismo. Eso no lo sabía.
"¿Por que?" Le miré intentando que me dijera algo.
"Es normal que este así _____, después de todo le echaron la culpa sin tenerla." Se encogió de hombros. Comprendí sus palabras y mi mirada se dirigió hacia mi madre.
"El chico es muy educado. Se disculpó por lo que había pasado en el pasillo antes de marcharse." Esbocé una pequeña sonrisa recordando a Justin. Él realmente lo haría. "Y también es muy guapo." Hizo un gesto con sus cejas. Parecía que mi madre estaba sorprendida por la actitud de Justin y por su encanto.
Lamí mis labios y suspiré. Le echaba de menos.
Rodé mis ojos mientras Lily reía con mi madre. "Oh por favor." Agité mi mano con desdén.
"Hey! El chico esta muy bien." Mi madre me hizo sonrojarme con su comentario.
Puse mis manos sobre mi rostro mientras notaba como mis mejillas y mi cuello ardía de la vergüenza. "Sois tal para cual." Negué con mi cabeza mirándolas poco después. No paraban de reír por mi reacción.
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Miraba atentamente el techo del hospital, era el único pasatiempo que tenía. Ese y mandar mensajes a Miley con mi iPhone que estaba al lado de la mesilla. Bueno, y también jugar a angry birds. Me daba la sensación de que me había pasado todos los niveles porque no me dejaba continuar. Y el aburrimiento llegó de nuevo.
Había recibido mensajes hasta de Demi Lovato, tweets de Katy Perry o Big Sean... estaba impresionada en realidad. No me esperaba que gente así de famosa a la que admiraba se preocupara por mi estado de salud.
"¿Te aburres?" Jason entró en la habitación de repente con su iPhone sobre su mano.
Asentí con mi cabeza. "Mucho." Suspiré con cansancio. "¿Ves los puntitos del techo? Creo que los he contado todos al menos veinte veces." Jason soltó una carcajada.
"Eres una mala paciente." Frunció su ceño.
"Si, ya... me gustaría verte a ti aquí y ya verías quien es mal paciente." Fruncí mi ceño y sentí una risa que venía de su teléfono. Me quedé sorprendida, sin palabras. "¿Q-quien es?" Esperaba que fuera Justin.
Lamí mis labios con nerviosismo mientras mi corazón se aceleraba.
"Es Justin." Se encogió de hombros mientras se dirigía a la cama sonriente al ver mi expresión de alegría y sorpresa y me entregó su teléfono. "Llámame cuando hayas acabado." Asentí con mi cabeza mordiendo mi labio.
La puerta se cerró y coloqué el iPhone de Jason sobre mi oído con cuidado. "¿Hola?" Pregunté con cuidado.
Sentí como la voz suave de Justin al otro lado del teléfono me calmaba completamente. "Hey, ¿como te sientes?" Lamí mis labios sonriendo al escuchar su voz y tragué saliva.
Suspiré. "Mejor." Me encogí de hombros como si el estuviera delante y fuera capaz de verme. Aunque eso era lo que más quería en esos momentos. "¿Como estas?"
Escuché un suspiro en la otra parte del teléfono. "Bien, en un rato es el concierto." Asentí con mi cabeza sonriente. No parecía muy convencido.
"Te notas cansado." Comenté con preocupación. "¿Seguro que estas bien?"
"Si, estoy bien. Acabo de salir del meet and great."
"Oh, esta bien." Lamí mis labios. Sabía que no lo estaba del todo. "Jason me dijo que Cody y Ariana están allí."
"Si." Noté su sonrisa. "Se quedarán hasta el concierto de Atlanta." Asentí con mi cabeza.
"Me gustaría verlos actuar." Comenté mientras el suspiraba.
"Y a mi me gustaría que estuvieras aquí, pero tienes que recuperarte _____." Tragué saliva con dificultad.
"Lo se." Solté en un susurro leve.
"Ayer llamé, pero Jason me dijo que estabas durmiendo." Deshizo el silencio que había.
Mordí mi labio con timidez. "Si, últimamente es lo único que hago." Suspiré con resignación.
El soltó una pequeña risa. "Es normal _____, ahora lo que tienes que hacer es descansar." Pude imaginarle lamiendo sus labios.
"Lo se." Tosí levemente. "Con suerte, en unos días me darán el alta."
El se sorprendió. "¿En serio?"
Asentí con mi cabeza sonriente. "Si."
"¿Cuando?"
"Realmente no lo se, simplemente dijeron en unos días." Me encogí de hombros.
"Espero que sea pronto."
"Yo también lo espero." Se produjo un silencio. "Justin."
"¿Si?" Quería decirle que no pasaba nada con Adrián y que olvidara lo que le había dicho, pero prefería decírselo en persona.
"Gracias por preocuparte por mi." Suspiré mordiendo mi labio con timidez.
"_____, esta bien." Noté como tragaba saliva.
Lamí mis labios. "Te... te echo de menos." Mi voz salió en un hilo, como si el más mínimo ruido me fuera a romper por dentro.
El suspiró. "Yo también te echo de menos." Su voz era tan suave que podría dormirme. "_____." Dijo después de un silencio escuchando nuestras respiraciones. No era un silencio incómodo, en realidad se agradecía.
"Si."
"Tengo que dejarte, me tengo que preparar para el concierto." Cerré mis ojos maldiciendo en mi interior.
"Vale." Tragué saliva.
"Lo siento." Se disculpó.
"No hay problema Justin." Intenté calmarle. "Suerte en el concierto."
"Gracias." Dijo agradecido. "Hablamos pronto."
Suspiré. "Buenas noches."
"Buenas noches." La llamada se cortó y dejé el móvil sobre mi mano mientras miraba a la nada en frente de mi. Tenía una sensación agridulce en mi interior. Seguía comportándose extraño y eso me preocupaba.
La puerta se abrió para dejarme ver a Jason. "¿Ya hablasteis?" El preguntó con curiosidad dirigiéndose hacia mi. Yo asentí con mi cabeza.
"Si." Le di su iPhone mientas el lo cogía. "Gracias." Agradecí con seriedad.
"¿Todo bien?" Frunció su ceño al verme.
"Si." Esbocé una sonrisa falsa.
"¿Que esta mal _____?" Se agachó a mi altura mientras se sentaba en la silla al lado de la cama y me miró atentamente a los ojos.
Negué con mi cabeza mordiendo mi labio. "Esta tan distante... y tan... malditamente raro." Suspiré. "Y lo peor es que no se que le pasa." El me miró acariciando mi brazo para calmarme y reconfortarme.
"______." Le miré a los ojos. "Scooter me acaba de llamar hace un rato y me dijo que Justin lo esta pasando algo mal..." Le miré con atención y preocupación.
"¿Que le pasa? ¿Esta bien?" Hice las preguntas rápidamente.
El suspiró haciendo que mi corazón latiera más deprisa. "Se culpa por lo que pasó."
Esas palabras me destrozaron por dentro. "Pero, no fue su culpa..."
"Lo se, pero sigue distraído y pensativo porque piensa que fue su culpa y se arrepiente de no haberte creído."
Tragué saliva. "¿Puedo llamarlo?" El negó con su cabeza.
"Tiene concierto _____, déjalo."
Suspiré y asentí con mi cabeza. "No quiero que se culpe a sí mismo, Jason." Le miré tristemente.
"Lo se _____." Tragó saliva. "También envió más guardaespaldas."
Eso me sorprendió. En unos días no había sabido nada de la seguridad que había en el exterior para que la persona que me disparó no entrara en el hospital. Por no decir que todas las noches Bruce se quedaba fuera, en el pasillo vigilando la habitación con más guardaespaldas y mis padres.
"¿Más todavía?" Me sorprendí mirándole a sus ojos. El asintió con su cabeza.
"Si. En realidad la mayoría los envió él, Kenny y Bruce los conocen. Son de confianza, no tienes por que preocuparte." Dijo tranquilizándome con su mirada. Suspiré aliviada.
Miré a un punto fijo de la habitación. "Esta tan preocupado." Negué con mi cabeza son seriedad.
"Es normal que este así _____. Yo no lo culpo. Allison y Alfredo también lo están." Tragué saliva con dificultad y levanté mi mirada para mirarle.
"Apenas he podido mandarles un mensaje en todos estos días." Me quejé.
"Es mejor que descanses. No te preocupes por los mensajes o las llamadas, cuando estés mejor y te den el alta, ya tendrás tiempo para llamar a todos que quieras." Asentí con mi cabeza mientras el esbozaba una pequeña sonrisa.
Se hizo el silencio en toda la habitación mientras me acostaba en el respaldo elevado de la cama. Suspiré pasando mi mano por mi pelo.
"El alta te la darán en los próximos días, así que Scooter me dijo que podrías ir a Atlanta. Allí estará parte de la familia de Justin, todos sus amigos y será una noche especial para él. Sería una sorpresa."
Mi rostro se iluminó esbozando una sonrisa. "¿En serio?" El asintió.
"Aunque no estoy muy de acuerdo con toda esta idea, porque necesitas descansar. Scooter tiene razón y Justin se alegrará de verte de nuevo."
Asentí con mi cabeza sonriendo sin poder evitarlo. "Quiero ir a ese concierto. Necesito estar allí." Le miré a los ojos.
"De momento tenemos que saber como estás y si el alta te la dan antes de ese día. Mañana hablaré con Scooter."
Asentí de nuevo con mi cabeza. "Espero que me la den."
"Darte te la darán, pero no se sabe cuando. Mañana te hacen un chequeo y según esos resultados sabremos cuando te puedes ir a casa." Suspiré mirándole a los ojos.
"Rezaré para que todo salga bien."
"Todos rezan para que estés bien _____." El sonrió levantándose de la silla a mi lado. "Te dejo, es la hora de la cena y en breve te darán la comida." Asentí.
"No puedo esperar para salir de aquí e ir a McDonalds." Negué con mi cabeza.
Jason rió. "Extrañaba a Smith." Se marchó de la habitación cerrando la puerta detrás de él dejándome completamente sola.
"Miré al techo mientras me recostaba y soltaba un suspiro. "Y yo extraño a Justin." Susurré de nuevo cerrando los ojos.
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Awwww son tan asndalskjdnkas me encantó la parte en la que Smith le dijo que le extrañaba fue tan linda.
Y con esto me refería a que iban a odiar a Adrián. Sigue culpando a Justin por lo que pasó.
En el próximo capitulo verán la sorpresa, les va a encantar. Es muy largo, así que espero que les guste.
Estoy subiendo seguido porque dentro de unos días estaré ocupada.
Gracias por todos los comentarios, son geniales. En realidad no tengo palabras. Me dejan totalmente sin palabras con cada uno de los comentarios.
Va a ocurrir una cosa que las va a hacer llorar... Pasará dentro de unos cuantos capitulos y van a amarlos. En realidad son akjsdnakjsdnkas solo aviso.
Y recordar. Smith hace las cosas por una razón. Quizás la odien por lo que haga en el siguiente capitulo, pero todo tiene una razón y pronto la descubrirán.
No puedo esperar para subir lo que viene! Estoy muy emocionada.
Nos leemos... LOVEU!