5:10 de la tarde.
Dipper regreso, le daba un poco de miedo seguir explorando solo, aunque tampoco se encontró algo lo suficientemente importante para alardear lo con su hermana.
Se tardó como 10 minutos en regresar a la cabaña y suerte para él, no se había metido en lo más profundo del bosque, ya que él no conocía bien el lugar y era muy probable que se hubiera perdido sin los conocimientos sufientes para sobrevivír en un bosque.
Al estar en la cabaña, noto a su hermana y a Will un tanto preocupados.
--Hermano. -- le dijo Mabel para llamar su atención y funcionó.
--¿Que pasa? ¿Por que esas caras?-- dijo un tanto serio.
--N-No sé donde esta Bill y... temo que le haya pasado algo. -- contestó el peliazul casi cerca del llanto. Es muy sensible.
--Hace más de una hora que no lo vemos y no aviso a donde iría. ¿Lo has visto?--
--Sinceramente No, no lo he visto. --
--¿Y si algo le paso? N-No se que haría si algo malo le pasa a mi hermano. Él es el único que no me dejo solo en un principio y me animaba después de que mis padres... se fueran al trabajo. S-Siempre me protege... Tengo miedo... -- empezó a llorar causando angustia y preocupación en Mabel, también algo de cariño ya que se le hacía tierno y admirable ver a un chico tan sentimental como Will llorando por estar muy preocupado por su hermano.
Dipper sentía algo de tristeza, quizás había juzgado muy mal a Bill... aunque eso no evitaba que lo siguiera odiando.
--Ah...-- suspiro el castaño. Pensó detenidamente y Prosiguió.--Voy a salir y si me lo encuentro le diré que venga.--
Mabel sonrió dulcemente, esas palabras también podrían traducirse como "Voy a salir a buscarlo". La castaña ánimo y tranquilizó a Will, diciéndole que todo saldría bien.
Aunque Dipper también pensaba que exageraban mucho, no dijo nada más y regreso al bosque, probablemente tardaría.
6:10 de la tarde.
Okey, cuando el pensaba que tardaría no pensaba que fuera tanto. No estaba seguro de por qué empezó a buscar en el bosque y no en otro lugar.
Quién sabe, quizás Bill fue a una tienda de videojuegos o maquinitas, se le hizo tarde y en este momento ya este con Will y Mabel, mientras que él está ahí perdido.
Un momento. ¿perdido? ¿¡Estaba perdido!?
Bueno, ya lleva un buen rato caminado, profundizando se en el bosque y pronto todo estará oscuro. Por suerte trajo su mochila y dos linternas.
Empezaba a perder sus esperanzas hasta que escuchó los quejidos de dolor de alguien, y no estaban tan lejos.
Siguió el sonido y después de 5 largos minutos corriendo encontró a Bill.
Solo que... sangrando.
Hace una hora, con Bill...
Odiaba admitirlo pero... estaba perdido... y con hambre.
Lo único bueno de haber explorado el bosque fue que encontró un extraño Diario, y con extraño me refiero a increíble y misterioso.
Le había dado unas cuantas hojeadas, y se veía interesante y a la vez nerd.
Siguió caminando, quizás si hacia algo de memoria podía regresar a la cabaña.
Todo parecía calmado hasta que no se fijo como, se tropezó y se clavó un cristal en su ojo derecho.
Para explicarme mejor; en una parte del bosque había un muy pequeñísima zona en la tierra donde habían cristales muy filosos. Bueno, todos median al rededor de 5 cm, pero el que estaba en el centro media 10 cm, y cuando Bill se tropezó, con sus manos rodeando aquella zona, evitó caerse por completo, pero la posición en la que estaba su ojo derecho era la misma donde estaba el cristal con más largo, por lo que se lo incrustó casi profundo.
De inmediato, se puso de pie y empezó a gritar de dolor mientras gotas de sangre caían, se resbalan por su mejilla hasta el cuello o caer, algunas al suelo.
En serio, dolía mucho.
Trato de mantegner la calma y se sentó en un tronco cerca de ahí, pensando en la mejor solución para evitar que el dolor siguiera.
Con valentía y en voluntad, lentamente fue sacando el cristal y después de tres largos minutos Lo consiguió, y lo guardo en un de los bolsillos de su pantalón.
Aunque, seguía doliendo y mucho. Demasiado. El párpado del ojo derecho lo mantenía cerrado.
¿Que podía hacer? Tenía miedo. No sabia que hacer con ese enorme dolor y no quería que se infectara o algo parecido. No sabia como regresar a la cabaña, su hermano debería estar muy preocupado y hasta muy posiblemente llorando. Dios, ya hasta extrañaba a ese viejo estafador bromista. Tenía que regresar y hacer algo pronto.
Por un rato sólo podía quejarse del dolor, sus esperanzas ya estaban por muy debajo. Ya tenía la muy clara idea de que nadie a esas horas vendría al bosque y podría encontrarlo.
Estaba perdido, y no sólo me refiero a que estaba perdido en el bosque.
El dolor parecía intensificarse más por cada minuto.
Hasta que de pronto...
Escucho a alguien acercarse.
Volviendo al tiempo actual.
El castaño se acercó muy tranquilamente hacia el rubio, este sólo se quedo callado aguantando que cualquiera quejido de dolor se escapase. No quería verse débil ante el castaño.
El silenció era incómodo.
Dipper logró escuchar unos leves quejidos, ver al rubio así le causaba náuseas y también compasión o lástima.
Era la primera vez que veía una herida tan grave en persona.
--¿Estas bien?-- preguntó él castaño y después de procesar un rato lo que había preguntado, se sintió todo un idiota.
Bill al escuchar eso lo miro con cara de "¿Es en serio? ¿Estas ciego o que?"
--Tú que crees.-- contestó de mala gana con el ceño fruncido.
--Lo sé, fue una pregunta estúpida pero no se me ocurrió que decir. --
--¿Que haces aquí?--
--Sólo quería explorar el lugar y por casualidad te encontré. Déjame ayudarte. --
--¿Por qué me ayudarías? Me odias ¿no?--
--Sólo cállate. No es el momento. Además es mejor que te ayude antes de que se infecte más. ¿Cuanto tiempo llevas así?--
--Aproximadamente diez minutos. ¿Sabes como curar esto?--
--No exactamente pero si se como desinfectar la. Por suerte traje un botequin de primeros auxilios y con los materiales necesarios. -- dijo Dipper sonriendo levemente, se sentía orgulloso de si mismo por haber traído un maletín de primeros auxilios.
--Vaya, que suerte. -- sonrió de medio lado, se le hacía mínimamente gracioso y a la vez, agradecido de que el castaño haya traído uno de esos.
--Supongo que sí. Siempre hay que estar preparado. -- agregó mientras sacaba el algodón, agua oxigenada, cinta adesiva blanca especial y algo de vendajes.
--¿Por qué me ayudas?--
--Por qué el tío Stan y mi hermana me matarían si no lo hiciera. Además no me gustaría ver a tu hermano quién no me cae mal, llorando o preocupado. Ah, quizás no seas tan malo como pensé. Y... lamento decirte rubio teñido. Supongo... --
--Y yo lamento que no tengas la bondad para pagarme mis Doritos.--
--Ja, no estas en posición para decir eso, teñido.-- dijo mientras empezaba a desinfectar la herida.
--¡AH! ¡Duele, Duele!-- chilló el rubio mientras hacia algunas muecas de dolor y se movía un poco.
--¡Deja de moverte! Se hombre y deja de quejarte. --
--¡Soy hombre!--
--Entonces aguanta. --
Minutos después....
Dipper había terminado y estaba contento con el resultado, Bill había parado de sangrar por el momento. Le puso un vendaje, recortando lo para que encajará, y lo pego con la cinta blanca para que este no cayera.
Si sentía muy orgulloso de si mismo, hasta que recordó que era Bill a quién había ayudado.
--Bien, cuando lleguemos a la cabaña voy a buscar algo para reemplazar la venda. -- dijo Dipper mientras se sentaba a lado de él y empezaba a guardar los materiales devuelta a la mochila.
Bill se tocó donde le había "curado" el castaño, tenía que admitir que lo había hecho realmente bien para ser un asesino de Doritos.
Observaba a Dipper, seguía ordenando sus cosas, por un momento el pareció alguien tranquilo e interesante, solo por un momento.
Bill junto todo el valor, un poco avergonzado dijo lo siguiente.
--Gracias... --
--¿Que?--
"Capítulo Tres:
Ayuda"
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Les recuerdo que ésta historia es simple y cliché. Agradezco el apoyo y los comentarios.
:) Si quieren ya o hard tendrán que esperar hasta la tercera parte.
Pasará un muy buen tiempo para que sepan a lo que me refiero.
Gracias:D!