Otras...

By locaporchristian

272K 21.3K 1.4K

Anastasia Steele una chica hermosa, con poder, bien educada que se quedó huerfana tras un accidente automovil... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3 ...
Capítulo 4 ...
Capítulo 5 ...
Capítulo 6...
Capítulo 7...
Capítulo 8...
Capítulo 9...
Capítulo 10...
Capítulo 11...
Capítulo 12 ...
Capítulo 13...
Capítulo 14...
Capítulo 15...
Capítulo 16...
Capítulo 17...
Capítulo 18...
Capítulo 20...
Capítulo 21...
Capítulo 22...
Capítulo 23...
Capítulo 24...
Capítulo 25...
Capítulo 26...
Aviso....
Capítulo 27...
Capítulo 28...
Capítulo 29...
Capítulo 30...
Mini capítulo...
Capítulo 31...
Capítulo 32...
Capítulo 33...
Capítulo 34...
Capítulo 35...
Capítulo 36...
Capítulo 37...
Hola...

Capítulo 19...

6.6K 535 33
By locaporchristian






POV CHRISTIAN






Me pongo de pie incapaz de seguir aquí, presenciando el espectáculo de la parejita feliz que me estan brindando. Tratando de juntar los pedazos que quedan de mi corazón roto y la poca dignidad que me queda decido irme. Este dolor no se lo deseo a nadie es simplemente insoportable.
Estaba mejor pidiendo limosna para poder comer y viviendo en las calles, eso es mucho mejor que pedir limosnas de un amor que no te corresponde de igual manera. Hubiese dado mi vida por ella, hubiese echo lo que me pidiera si simplemente me hubiera amado.
Ahora entiendo a la perfección una frase que escuché en una canción que sonaba en el bar que frecuentaba cada vez que tenía algún dinero para comprar comida, esa frase que se quedó dando vueltas en mi cabeza tratando de entender su significado "Él hubiera no existe", y no existe... ahora lo entiendo. Nada volverá a ser lo mismo, nada... porque ella nunca me amó. Y la verdad duele como si me estuvieran arrancando un pedazo de mi cuerpo, el corazón para ser más exacto, porque ese se queda aquí para ser pisoteado cada vez que ellos se amen. Y la quiero demasiado para retenerla a mi lado, no soy nadie... no tengo nada que ofrecerle más que mi amor incondicional, el cual está visto que no quiere. Si tan solo supiera quien demonios soy, si tan sólo fuera alguien importante lucharía sin dudarlo, pero no lo soy, no soy nada al lado de ella y la revelación me destruye aún más el alma.

Derrotado, paso por su lado para salir de una vez de aquí, pero ellos al escuchar mis pasos se separan y Elliot me toma del brazo para detenerme. Lo fulmino con la mirada, sus ojos azules tienen un brillo especial que por un momento me hacen dudar, sus ojos muestran amor y no se si es dirigido a mi o a Ana a quien corresponde. Quito su mano de un movimiento brusco, no quiero que me toque.

-Siéntate, tenemos que hablar.-

Me dice despacio, como si estuviera hablando con un león, el cual se escapó de su jaula y lo mira para comérselo y esto es en realidad lo quisiera hacer, pero no podria herirla de esa forma. Haría cualquier cosa por su felicidad... aunque esa felicidad no me incluya.

-Tranquilo "hermano", ya entendí todo, me retiro para que puedan ser felices. Anastasia... gracias por todo...-

No puedo ser tan cabrón de no agradecerle, ella me ayudó cuando todo el mundo me dió la espalda. Jadea audiblemente llevandose su pequeña mano a la boca, sus lagrimas no dejan de caer y aunque esto me rompe aún más el corazón, debo irme... es lo mejor para los tres. A Elliot le tomé mucho cariño, un cariño que no podria explicar y tampoco me gustaría herirlo.

-No es lo que tú piensas, por favor vamos a hablar los tres.-

Asiento con la cebeza, una pequeña luz de esperanza se enciende en mi interior y por otro lado si me voy asi, nunca sabré que mierdas quiso decir el puto del doctor.
Caminamos en silencio hacia el sofá y soy el primero en sentarme, las piernas no me funcionan como quisiera, no tengo las fuerzas necesarias para afrontar que en relidad todo fue una mentira, un espejismo.

-Christian por favor escuchame, antes que nada quiero disculparme contigo por no haberte dicho nada... pero debes creerme, solo lo supe ayer. No sé como es que se enteró Flynn.-

Veo la sinceridad y el miedo en sus ojos, y como si fuera un maldito hechizo... le creo. O elijo creerle para poder seguir respirando.

-No entiendo donde entra él en todo este asunto. Aclarame eso en primer lugar.-

Le gruño, fulminado con la vista a un Elliot que me mira y sacude la cabeza sonriendo, si sonrie ahora que no voy a ser capaz de estar tranquilo mucho tiempo más. Pienso en mi interior.

-Bueno Christian está visto que no has cambiado nada, quizás un poco más relajado... solo un poco.-

-¿Qué carajos significa eso?. No estoy para chistes aquí, así que hablen claro de una jodida vez.-

-Sip... de eso hablo. Ana por favor, ¿Puedo hablar primero?. No quiero pasar por encima de ti.-

Le acaricia la mano y le sonríe, ignorandome nuevamente como si yo fuera un jodido florero. Ella le sonríe tímidamente y asiente en señal de que está deacuerdo.

-¡Basta!. Que no estoy pintado aquí maldita sea. Hablan sobre mi, así que dejen de tratarme como un enfermo, porque no lo soy.-

Me pongo de pie y les grito ya arto de todo este espectáculo. Ana baja la cabeza avergonzada mientras Elliot me mira a los ojos sin apartarlos y tratando de esconder su estúpida sonrisa. ¡Cabrón!

-Bien, si eso es lo que quieres... yo simplemente estaba respetando a la chica que le salvó la vida a mi hermano.-

Sus palabras cargadas de sentimiento y verdad me arrancan el aliento como si me hubieran golpeado en el estómago. Caigo en el sofá respirando con dificultad. No puede ser...

-¿Qué quieres decir?.-

-Exactamente lo que dije... tú eres mi hermano.-

Lo miro a los ojos sin creer en sus palabras y buscando algún parecido que me diga que no está jugando conmigo. Esto es demasiado para ser una broma.

-Pero no nos parecemos...-

Mi voz es un susurro, el valor y la cordura se me están llendo a la mierda. No entiendo nada.

-Lo sé, somos adoptados... por los Grey. Por eso no nos parecemos.-

-¿Y pretendes que te crea?. Ya fue suficiente, ¡Me largo de aquí!.-

¡Que se vallan a reír de su abuela!. Seré un méndigo muerto de hambre, pero no soy tan estúpido como creen. Me levanto y camino al ascensor, los sollozos de Ana se hacen más fuertes. Pero no volteo, no puedo con todo esto.

-Solo mira esto antes de irte Christian.-

Me dice Elliot caminado a mi lado. Me detengo y lo miro impasible, él me extiende una hoja. Suspiro dramáticamente y la tomo, cuando la doy vuelta veo una fotografía de nosotros dos abrazados. Caigo de rodillas por el peso de la verdad... porque es verdad, en ella estamos sonriendo y es visible la conexión que hay entre nosotros.
Las lagrimas salen de mis ojos sin permiso, por el tiempo de soledad que he vivido, por encontrar por fin a alguien de mi pasado, por descubrir que tengo una familia, por saber que sufrieron un infierno por mi estúpida decisión de escapar de ese hospital, y por el mal momento que le estoy haciendo pasar a mi dulce Ana.
Levanto la vista para encontrarme a Elliot sentado sobre sus talones llorando igual que yo.

-Me importa una mierda si no corre la misma sangre por nuestros cuerpos. Eres mi hermanito y te amo.-

Lo abrazo, sorprendiendolo. Sin permiso, llorando como un niño pequeño... llorando como un niño perdido que encontró a su familia.
Sus brazos a los costados sin tocarme hacen que me separe de él. Me mira confundido llorando con más fuerza. El dolor en su mirada es palpable.

-Lo siento, fue un impulso...-

Me disculpo porque quizás no le gustan los abrazos.

-He esperado 20 años por ese abrazo... Christian... ¡Dios! esto es... es... ¡Maldición!.-

Las palabras salen entrecortadas de sus labios. Pero no entiendo que sucede. Al parecer entiende mi mirada confundida porque continúa hablando.

-No soportas el contacto físico, nunca dejaste que te tocaran el pecho o la espalda. Nunca nos dejaste abrazarte... por favor hermano... por favor abrázame otra vez. Por favor...-

Solloza con los ojos cerrados. Sin pensarlo lo abrazo y él me corresponde esta vez, me tenso como siempre lo hago con Ana, pero me relajo sabiendo que él al igual que Ana son buenos, no me harán daño. Es un sentimiento arraigado en mi piel, el cual no entiendo aunque lo relaciono a las cicatrices que tengo en mi pecho.
Su cuerpo se convulsiona a causa del llanto y su dolor me hace llorar con más fuerza también. Escondo mi cara en su pecho, refujiandome en el pecho de mi hermano mayor, como si él pudiera protegerme. En sus brazos encuentro paz, una paz casi tan perfecta como la que me transmite Ana.
Me separo despacio después de lo que parecieron horas, aunque sólo fueran unos minutos, y levanto la vista para encontrar a Ana parada a la espalda de Elliot con los ojos rojos y sus mejillas inundadas de lágrimas. Le sonrio y me pongo de pie para tomarla en mis brazos, la abrazo fuerte sintiendo su amor por mi, demostrándole mi amor por ella. Se separa unas pulgadas para mirarme a los ojos.

-Te amo Christian Grey.-

Un jadeo se escapa de mis labios. Soy Christian Grey. ¡Maldición!... tengo un apellido. Y aunque los malditos recuerdos no quieren volver a mi, se que pronto los recuperaré. Y lo mejor de todo es que esta mujer me ama, a mi, solo a mi. Y me amó sin saber quien era, siendo nadie ella me amó y todavía lo hace.

-Y yo a ti Anastasia Steele, más que a mi propia vida.-

Sonrie tímidamente y esconde su cara en el hueco de mi pecho, la abrazo fuerte y despues la guio al sofá.
Aunque ya entiendo algo, todavía falta por saber. Ahora entiendo porque Elliot se desmayó al verme, el cariño en sus ojos hacia mí, su lucha para encontrarme, el dolor y la felicidad al encontrarme en los brazos de esta maravillosa mujer ayer cuando llegó con su novia.

-¿Recuerdas algo Christian?.-

Pregunta Elliot y puedo sentir la esperanza en su voz, niego con la cabeza, el nombre de Leyla se viene a mi cabeza, pero no quiero saber si era importante para mi, no quiero que Ana se desilusione de mi. Esto lo hablaré luego con él a solas.

-No importa... ya lo harás. Mamá y papá estarán felices cuando les cuente y ni hablar de Mia ella era tu consentida.-

Me tenso visiblemente, no sé si estoy preparado para eso, pero no puedo hacerlos sufrir más. Lo veo en sus ojos, sin ser hermanos de sangre me ama y estoy seguro que si sus padres me adoptaron... me amaron de igual forma aunque no sea su hijo biológico. Me pregunto, ¿Qué pasó con mis padres verdaderos?, vagamente soy consiente de que no existen ya que esta historia seria diferente si así fuera.

-Tranquilo que todavia no he podido hablar con ellos. Recién ayer supe que estas vivo y si para mi fue un shock, no quiero imaginar lo que será para ellos. Primero les contaré todo y solamente cuando tú estés listo los verás. No quiero presionarte a que hagas nada que no quieres. Pero tienes que saber que ellos estarán felices de tenerte otra vez.-

Asiento con la cabeza.

-Gracias... creo que esperaré a que hables con ellos y luego veremos.-

Sonrie calidamente, el brillo en sus ojos no desaparece. Pero tengo que saber todo ahora.

-Bien... ahora entiendo porque Ana te llamó. Amor, por favor perdóname por pensar mal de ti, sé que no tengo excusas... pero perdóname.-

Ruego en silencio porque no me separe de su lado. Odio la inseguridad que estoy descubriendo en mi interior, sé que dijo que me ama pero no puedo dejar de sentir el miedo que me produce solo imaginar el separarme de su lado.

-Te amo Christian, y entiendo tu confusión yo estaría igual que tú. Pero tienes que entender que te amé siendo solo Christian, y eso no va a cambiar por más apellido que tengas. Seas un Grey o cualquier otro apellido mi amor por ti no cambiará nunca.-

La beso olvidando la presencia de Elliot aquí, la pelea de hoy y la verdad de saber quien soy no hacen más que aumentar mi ansiedad por ella. Me corresponde enredando sus pequeños dedos en mi pelo hasta que un carraspeo nos obliga a separarnos. Ana se sonroja escandalosamente y yo sonrio como un tonto enamorado. Acaricio su mejilla sintiendo el calor que desprenden.

-Lo siento Elliot, me deje llevar... ahora por favor háblame de mi, de nuestra familia, de... de porque terminé así. -

El sonido de mi voz se va apagando junto con la ansiedad de escuchar algo malo y lo más seguro es que lo hay.

-En primer lugar quiero aclararte algo... a esta mujer le debo mucho, mucho más de lo que algún día seré capaz de pagarle... te devolvió a mi, te cuidó y te salvó la vida aquella vez que te encontró muy enfermo en la calle. Sin pedir nada a cambio y sin saber nada de ti, confió en ti metiéndote en su casa. No quiero que malinterpretes mis sentimientos hacia ella, se convirtió en una hermana, un ángel que debo cuidar... hasta de ti hermano mio, asi que nunca, nunca dudes de su amor por ti, porque hasta un ciego vería como te ama.-

Sus palabras no hacen más que agrandar mi vergüenza y agacho la cabeza incapaz de mirarlos a los ojos por mi estupidez. ¿Cómo mierda fui capaz de dudar de ella?.

-No seas tan duro con él Elliot, ya se disculpo... me basta con que haya entendido que te aprecio como un amigo y ahora mi cuñado, y que te necesitaba aquí porque sabía que sola no iba a poder. Amor entiende que por eso lo llamé, además que hay cosas que desconozco.-

-Lo siento, de verdad... me comporté como un estúpido con los dos y ahora se que solo quieren verme bien.-

¡Joder! El nudo en mi garganta se hace cada vez más grande, impidiendo la entrada del oxígeno que necesito para respirar. Esto esta cada vez más claro, estas personas me aman por lo que fui y lo que soy hoy, igual debo seguir ganandome su amor. Quiero llorar pero me contengo, ya fue suficiente sentimentalismo. Es hora de ser el hombre que Ana necesita.

-Bueno aclarado esto... te contaré todo lo que sé, pero hay partes que tu nunca compartiste conmigo, eras o eres una persona muy reservada...-

Me cuenta todo, desde que él fue adoptado hasta hoy. Cuando Grace, mi madre, me encontró en el hospital desnutrido y deshidratado, que estuve cuatro dias con el cadaver de mi madre biológica la cual era una drogadicta adicta al crack. Como gritaba por mis pesadillas por las quemaduras de cigarro que hay en mi pecho y espalda, pero lo que pasó, eso solo lo sé yo, ya que nunca quise contarles que me pasó en realidad. Cuando tenía peleas en la escuela y llegaba todo moreteado a casa. Cuando mi madre me mando a trabajar con Elena, una amiga suya y como cambié a partir de ahí. Cuando dejé la universidad y empecé mi negocio, lo que es hoy una de las empresas más importantes de todas y que soy un multimillonario. Cuando conocí a Leyla, con la chica que salí por más de un año y un día discutimos, el desconose el motivo, y yo salí de mi departamento el que compartía con ella y tuve el accidente.

¡Maldición sabia que no era bueno! Pero era alguien importante... y rico. La cabeza me da vueltas con tanta información. ¿Qué pasó para que cambiara?. ¿Por qué no estaba cerca de ellos?. ¿Qué le hice a esa tal Leyla?. ¿Por qué discutimos y sali asi?. ¿Mi madre biológica me torturaba porque no me quería?. ¿¡Porque mierda no recuerdo nada!?.....







___________________________________

Bueno... aquí el capitulo más largo hasta hoy...
Espero que les guste...

Voten y comenten....

Besitos 😙 😙 😙

Andy.......







Continue Reading

You'll Also Like

359K 30.5K 65
Segunda Temporada de La Sombra de mi Ángel.
334K 27.9K 60
Todo empieza una noche donde unos jóvenes se divertían en la casa de los Kavanagh. Ahí estaba Ethan Kavanagh quien era el novio de Anastasia Steele...
1.9M 83.4K 39
Amelia creó el grupo: Cumpleaños de Thomas :) Amelia añadió a Jorge Amelia añadió a Carla Amelia añadió a Laura Amelia añadió a Paula Amelia añadió a...