Capitulo 19
El sábado por la mañana Harry se despertó en los brazos de Severus.
Aprovechando que Severus seguía durmiendo, Harry se montó a horcajadas sobre él y lo besó.
Tomado por sorpresa, Severus despertó sobresaltado.
-Harry a caso querías matarme? -exclamó Severus-. Ya decía yo que estabas loco.
-Loco por ti -dijo con una sonrisa.
-Supongo que eso me convierte a mi también en un loco.
-Estar loco es muy divertido; y hacer locuras lo es mucho más -le dijo al tiempo que lo volvía besar.
-Si, es más divertido, pero tienes que ir a tu primer partido y si le ganas a Potter...
-Que? Dímelo Severus, no puedes dejarme así.
-Si le ganas serás recompensado.
-Prepara mi recompensa -ordenó al tiempo que se ponía de pie y se vestía-. Ganaré ese partido y te probaré lo bueno que soy.
Después de desayunar todos fueron al campo de Quidditch.
Severus se fue a la tribuna de Slytherin para ver el partido y Harry se fue a los vestidores con el resto del equipo.
-Espero que valgas las condiciones que pusiste Evans -le dijo el capitán del equipo.
-Le daré guerra a Potter, no te preocupes.
Una vez que salieron al campo en sus escobas y estuvieron en el aire Harry quedó en frente de James.
-Bien Evans, veremos que tan bueno eres -le retó James.
-Que gane el mejor -dijo Harry con una simple sonrisa.
El partido dio inicio. Los equipos peleaban por el Quaffle.
Después de los primeros segundos del partido, Harry desconectó de todo y se puso a buscar la Snitch.
En un instante Harry vio algo dorado y a toda prisa se dirigió hacia allí. El único inconveniente es que James también lo vio.
Los dos se pusieron a perseguir la Snitch e iban muy igualados; los dos se movían casi al unísono y no la perdían de vista.
Iban tan concentrados que no se dieron cuenta de que una Bludger iba en su dirección. Los dos estiraron la mano para atrapar la Snitch cuando la Bludger les pasó rozando haciendo que se desviaran bruscamente del camino.
Harry pudo mantenerse bien sobre la escoba, pero por el contrario, James giró mal logrando así caerse de la escoba.
Al ver eso Harry se asustó y solo pudo pensar: Papá.
Reaccionando rápidamente, Harry se lanzó en picado con la escoba, en dirección a James. Aceleró todo lo que pudo y a 200 metros del suelo Harry logró coger a James de la mano evitando que siguiera cayendo.
Luego, poco a poco fue descendiendo hasta que James tocó tierra.
El partido que se había detenido por el incidente de James, no volvió a retomarse ya que Harry levantó un brazo mostrando a todos algo.
La casa de Slytherin empezó a rugir de emoción.
-Y el ganador de este partido es Sltytherin, por 230 a 70, que a parte de haber atrapado la Snitch, su nuevo buscador atrapó incluso al buscador de Gryffindor -anunció el comentarista.
Después de eso, todo fue un caos, el equipo de Slytherin estaba tan contento que abrazaron a Harry en agradecimiento.
Todos festejaban de camino al vestuario, donde se bañaron y cambiaron de rompa.
Al salir del vestuario, Harry vio a Severus. Se despidió de resto del equipo y se acercó a él.
-Bien, y mi recompensa? -exigió Harry muy orgulloso de si mismo.
-Eso te lo daré más tarde y me estoy planteando darte un plus.
-Porque? -preguntó curioso.
-Aunque le salvaste la vida, Potter se rompió el brazo.
-Que?
-Si, su equipo se lo han llevado a la enfermería.
Ante las palabras de Severus, Harry se preocupó.
-Harry pasa algo? -preguntó Severus al verlo tan serio.
-Antes de ir a comer, podríamos pasar por la enfermería?
-Porque? Te has hecho daño -preocupado se puso a mirarlo por todas partes.
-No, pero me gustaría pasar a ver a James.
-Porque?
-Severus, si vas a darme un plus, vamos a la enfermería, si? -le suplicó.
-Esta bien, pero yo me quedo fuera.
-No esperaba otra cosa -le sonrió.
Sin decir nada más, los dos se dirigieron a la enfermería.
Al llegar Severus se quedó en la puerta y Harry entró.
Allí estaba James sobre una cama recibiendo pociones de Madam Pomfrey. Una vez que Madam acabó con James, Harry se acercó a él.
-Evans, que haces aquí -preguntó James tenso.
-Una vez me pasó lo mismo -empezó a contarle-, con la diferencia de que uno de mis profesores era tan inútil que al lanzarme un hechizo me dejó sin huesos en el brazo. Pase una noche infernal, gracias a la poción crece-huesos. Solo venía a comprobar que estabas bien. Nos vemos por ahí.- Harry se dio la vuelta para irse cuando una voz lo paró.
-Gracias por salvarme la vida -admitió James.
-De nada -le dijo con una sonrisa antes de salir de la enfermería.
Al salir vio que Lily y los Merodeadores se acercaban a la puerta de la enfermería. Estos miraban confundidos a Severus, que estaba apoyado en una de las paredes.
-Severus, ya podemos irnos -dijo Harry. Los dos se fueron, pero no antes de que Lily y Harry cruzaran sus miradas.
Harry y Severus entraron en Gran Salón para comer y toda la mesa de Slytherin aplaudió a Harry.
Harry indiferente a todo eso, se quedó junto a Severus y comieron como siempre. Y como siempre antes de irse, Harry se robó varios trozos de pastel de calabaza.
Una vez que volvieron a su habitación Harry le cogió la mano con cariño.
-Y mi recompensa? -preguntó ansioso.
Sin una palabra, Severus cogió a Harry de los brazos y girando, los hizo caer sobre la cama.
Después le arrancó la ropa rápidamente y mientras se desvestía, miraba como Harry temblaba de la excitación.
Le acarició el pecho y bajó la mano hasta el miembro de Harry. Ante ese contacto, Harry gimió y movió las caderas, pidiendo mas contacto.
-Severus, por favor -suplicó estirando la mano para acariciarlo.
-Quédate quieto Evans -le ordenó cogiéndolo de las manos y reteniéndolas contra el colchón-. Aquí mando yo. Así que deja tus manos aquí y no las muevas, entendido?
Harry solo pudo asentir.
Severus empezó a besarle el cuello y a bajar por su pecho, lentamente, hasta llegar al miembro de Harry. Lo tomó en su boca y lo chupó con fuerza.
Harry gimió y movió las caderas, pero no movió las manos de donde Severus las había dejado. Cuando Harry estaba a punto de perder el sentido, liberó a Harry y le abrió las piernas.
Preparándolo lo esencial, Severus lo penetró con fuerza y lo embistió rápidamente. Harry empezó a gritar de placer y a perder la cordura.
-Severus, mi Severus -repetía sin darse cuenta-. Mi Severus.
Lágrimas y gritos de placer salían de Harry por igual; hasta que Harry se rompió y encontró su liberación.
Al ver una imagen tan erótica, Severus también encontró su liberación.
Los dos cansados y satisfechos perdieron el sentido uno en brazos del otro.
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Felices Pasquas!
Ya estoy de vuelta en mi casa, cansada pero feliz.
Y aquí os traigo un nuevo capítulo.
Siento por los errores a la hora de escribir y que sepais, que no os lo he dicho antes, que en mi historia hay cosas que difieren de la historia original.
Después de esto, que lo paseis muy bien.