Enamorada del chico del bar

By writtenGirlSangster

5.1K 438 755

Inicio 26/09/17 Regreso 16/04/2021 Publicación 18/06/2021 •Ella no sabía lo que vendría después y lo amargo... More

PRESENTACIÓN
Que comience la magia
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
Holidays
24
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
42

25

38 3 6
By writtenGirlSangster

~Dave~

El amor lastima, el amor te rompe en pedazos, el amor nos convierte en esclavos del cariño y palabras vacías. Pero también el amor cura, el amor arregla y sostiene, el amor te orilla a hacer locuras y actuar para proteger a lo que amas. El amor es un sentimiento de dos caras y, a veces, no se sabe cuál de ambas es la que tomamos...

No entendía nada de lo que estaba pasando, no sabía qué pensar luego del mensaje de Violette. Pude entenderlo de inmediato, pues era la única que mencionaría a mi madre muerta y los ungüentos.
Dudé un poco en hacer la llamada, pero obedecí. No usé el Mercedes porque supuse que el tener que hacer la llamada en ese teléfono lo hacía algo más privado.

—¿Hola? —pregunté al escuchar el teléfono descolgarse.

—¿Dave? —cuando escuché esa voz, sentí algo peculiar, la recordaba por alguna razón, tal vez una voz familiar en una persona desconocida, no tenía ni idea de quién podría ser.

—Disculpa... ¿Te conozco? —ella solo rió.

—...debes ser Dave, definitivamente. Necesito que vayas a la siguiente dirección —tomé un bolígrafo y comencé a escribir en mi antebrazo la dirección, ser mesero me había creado la costumbre de siempre cargar un bolígrafo, nunca se sabía cuándo podría necesitarlo —...Por favor cuida que nadie te siga. Tienes que ser muy precavido, Violette te necesita, bueno, ella está bien... Más bien, tú la necesitas a ella, creo. —escuché con atención las palabras de la chica, no sabía ni entendía lo que estaba pasando, y al parecer, ella tampoco.

—¿Quién eres? ¿Nos conocemos? —cuestioné un poco frustrado por la sensación de sentir que algo grave sucedía y no podía hacer nada al respecto.

—No como hubiera querido, pero sí, mesero... Soy amiga de Violette. Ahora solo ve a ese lugar lo más rápido posible, quiero poder tener la oportunidad de conocerte. —ella colgó el teléfono y pude saber con precisión que se trataba de aquella chica en el bar, la acompañante de Violette, la chica que ella había mencionado en su historia... ¿Cuál era su nombre?, ¿Ana?, ¿Alice?, ¿Alicia?, ¡Alessia!, Alessia, la amiga de Violette. Esa referencia de "mesero" me hizo reconocerla.

Cuando llegué a la dirección, pude observar un granero con una pequeña carretera, estaba completamente desértico alrededor y eso me preocupaba, temía que algo le pasará a Violette.

—Tú debes ser Dave —dijo una voz masculina a mis espaldas. Cuando giré, pude encontrarme con un hombre adulto, no tan mayor, de entre treinta y cinco a cuarenta años, tenía el cabello corto en un estilo militar y era algo robusto por los músculos que poseía.

—¿Quién... Quién eres tú? —cuestioné entrecortado por la confusión que había dentro de mí.

—Soy Will, Violette está con mi padre en un vuelo a Niger, necesito que me acompañes para poder encontrarnos ahí... Sé que debe ser confuso para ti, mi padre me pidió que te diera un mensaje de Violette, te dejó una nota —asentí mientras tomaba la nota y desdoblaba el papel con rapidez, creo que me sentía vulnerable a cualquier cosa que sucediera, la confusión me había arrastrado hacia este punto. Solo quería ver a Violette en el menor tiempo posible— ...Si te lo preguntas, Violette, por alguna razón quiso dejar todo esto en secreto, nosotros no la raptamos o algo por el estilo. —sonreí un poco, esa broma no me hacía mucha gracia en este preciso momento.

"Dave, sé que todo parece una locura, por favor solo confía en mí, te explicaré todo cuando estés conmigo.
Sube al jet con Will, nos veremos pronto.
Te quiero."

Creo que esa nota no me daba mucha tranquilidad después de todo; no la culpo, probablemente estaba demasiado ocupada como para hacer algo más elaborado. 

—Gracias, no es lo que esperaba, pero sé aclarará... ¿En qué puedo ayudarte? —Will señaló unas cajas y supuse que debía cargarlas hacia el equipaje del jet. Will no era el tipo que da mala espina en el momento en que lo ves, a decir verdad, creo que siempre he sido bueno en analizar a las personas o en lo instintivo... Will no tenía aspectos negativos, eso me hacía sentir confianza, aún cuando no lo conocía.

Partimos en un vuelo alrededor de una hora después, algunos chicos llegaron al poco tiempo que yo con otras provisiones. El jet parecía algo viejo, pero Will parecía conocerlo perfectamente y me quitaba algo de preocupación.

Cuando nos comunicamos por la radio con su padre, me sentí aliviado de saber que pronto Violette y yo nos veríamos. Necesitaba saber el porqué de todo esto, por qué tan repentinamente nos marchamos y ella nunca me lo dijo...

Y recordé lo que sucedió anoche, tenía miedo de que Violette se alejara de mí por esa razón, pero no tenía lógica que estemos a miles de kilómetros solo para explicarme que sus intereses son distintos. Digo, puedo entender si es así, porque ¿Quién dice "te amo" en la primera relación?, Creo que me precipité demasiado, aunque no mentí... De verdad me había enamorado.

~Violette~

Nuestro vuelo finalmente había llegado a su destino, llegamos en la madrugada del siguiente día. El viaje había sido demasiado agotador, aunque tenía una buena compañía con Henry, una chica y otros chicos, contaban anécdotas y algunos chistes sobre vuelos que honestamente me costó entender.
Henry y yo decidimos aprovechar lo que restaba de la noche para dormir un poco y de una manera más cómoda. Henry tenía unas colchonetas que resultaban muy confortables, a pesar de lo sencillas que eran. Dormimos por varias horas hasta que la luz nuevamente comenzó a despertarnos, eran las siete de la mañana y nuestro trabajo estaba por comenzar. Dormir fue algo complicado, las horas hacían que mi sueño se viera afectado, ahora en Nueva York debería estar anocheciendo...
Todo era diferente, era como respirar un aire distinto, o el color del cielo que se veía mucho más azul y los rayos del sol traspasaban más allá de las nubes, sacando pequeños destellos que se veían muy hermosos. El color de todo era muy cálido, los árboles estaban algo secos, el clima era mucho más cálido de lo que imaginé, fue otro punto por el que dormir fue tan difícil, pero no importaba. Ver este mundo tan distinto era agradable, la naturaleza rodeaba por doquier y había animales que, con suerte, solo puedes ver en un zoológico, estando libres.

Henry había pensado en todo, en el jet había cargado su Jeep, un antiguo Jeep azul cielo. Por lo que me contó, a través de los años heredó parte de los transportes de la milicia, su bisabuelo fue el primero en tenerlos, su abuelo le dio el mantenimiento y ahora él hace lo mismo. Tiene alrededor de casi diez jets pertenecientes a soldados. No podía imaginar cuántas historias y anécdotas tenía, pero la que más me intrigaba era la suya con mi madre.

Salimos en el Jeep hacia un asentamiento, necesitábamos un intérprete que nos ayudará con la traducción, no solo debíamos llegar y dar todo sin algún propósito.
Al acercarnos apareció un señor algo adulto, su cabello pintaba algunas canas y su piel parecía algo deshidratada, debía tener máximo sesenta años.
Habló, pero Henry y yo nos miramos confundidos al no entender el idioma. Creo que esto nos dejaba claro lo complicado que sería nuestro trabajo.

—Hola... Nosotros no ser de por aquí, ¿Usted hablar inglés? —Henry trataba de expresarse de alguna manera y sus movimientos además de la estructura gramatical que utilizaba era algo graciosa, pero no podía reír en un momento así.

—Afortunadamente, se están comunicando con el intérprete de esta humilde comunidad. Mi nombre es Yaro... Preguntaba ¿A qué se debe su visita? ¿En qué puedo ayudarles? —el hombre hablaba tan gentil, sin dudarlo pensaría que podría ser alguien importante en la comunidad, como un gobernador o algo por el estilo. Yo titubeé un poco por lo emocionada que estaba. No podía creer que estaba cumpliendo mi sueño finalmente.

—Soy, yo... soy Violette Dewey y él es Henry Fitcher, venimos desde Nueva York por un proyecto en el que he estado trabajando, solo tengo el interés de ayudar, no busco nada a cambio. Henry, yo y algunas personas más hemos estado recolectando muchas cosas para su comunidad. Tenemos agua, comida, juguetes para los niños pequeños y unas cuantas cosas que podrían ser útiles en medicina... —él nos miró y suspiró, hizo una reverencia en forma de agradecimiento y yo traté de hacer lo mismo mientras Henry me seguía la corriente.

—Mi comunidad no puede estar más que agradecida, hemos sido olvidados por todos, diría que por Dios también... Te agradezco Violette Dewey y Henry Fitcher, por tan noble gesto... —volvió a hacer su reverencia y algunas lágrimas comenzaban a brotar de mis ojos, estaba viviendo un sueño que anhelaba con toda mi alma. Estar ahí, frente a frente con una persona que nos había dado la mejor de las bienvenidas, era algo totalmente increíble y emocionante para mí.

—¿Usted podría indicarnos las cosas que son de mayor prioridad en el momento? ¿Nos ayuda con las personas para repartir comida? —Yaro asintió tranquilamente y caminó adentrándose a una pequeña choza de la que había salido. Cuando Henry y yo estábamos dentro, pudimos observar muchas personas sobre camas rodeando cada rincón de la choza, el olor era penetrante, algo putrefacto. No eran las mejores condiciones para personas heridas. Todo se veía muy mal, la choza parecía haber sido destrozada en una parte por un árbol, tal vez; y algunos palos estaban rotos, fácilmente alguien podría lastimarse. Mi corazón comenzó a latir con fuerza, las sensaciones amargas estaban en mi boca y tragar saliva era lo único que pude hacer.

—...Todas estas personas están muriendo, las tribus nos atacan y matan sin piedad. Solo queremos poder hacer que termine su dolor, si esa medicina puede hacerlo, por favor Violette Dewey, te suplico que lo hagas —su petición me rompía el corazón, estaba pidiendo acabar su dolor con muerte. Ver a todas esas personas agonizando y a los niños llorando por sus madres me resultaba algo difícil de imaginar, mis ideas de ayudar eran completamente distintas a esto. Imaginaba que probablemente todo sería algo más armonioso por ayudar con agua o comida, pero nunca pensé en esta parte. Tragué un poco de saliva para poder hablar, mi garganta estaba seca ahora. Tenía algo en mente y era Dave, él seguro podría hacer algo con los ungüentos que conocía y sus conocimientos en la botánica, rogaba porque fuera así. Los analgésicos solo quitarían el dolor por unas horas, pero he escuchado que algunas plantas tienen un efecto mucho mejor y más duradero.

No estaría dispuesta a rendirme tan fácilmente sin haber intentado algo más.

—Yo... Tengo un amigo... Él viene en camino, sabe un poco sobre ungüentos y conoce las plantas, seguro puede hacer algo, los medicamentos que traje son más por algunas enfermedades como gripes y algunos analgésicos, pero podemos esperar un poco más, los analgésicos sólo ocultarían los síntomas y dolores. No pensé en esta parte. Lo lamento. —Yaro suspiró y tomó mis manos con gentileza. Mis ojos estaban cristalizados por todas las emociones que me atrapaban, desde la gratitud y la felicidad por ayudar, hasta la impotencia y la desesperación por querer hacer algo más y no tener el poder para lograrlo.

—Siento gran humildad en ti, tu espíritu es fuerte y bondadoso, Violette Dewey, no tienes porqué disculparte al no haber pensado en esa parte, nosotros no pedimos ayuda y tú la ofreciste... No puedo estar más agradecido por tu gesto, si ese amigo tuyo puede ayudar, estaré muy contento. Violette Dewey, Henry Fitcher y amigos, serán muy bien recibidos, siempre en esta comunidad serán parte de nosotros y yo me encargaré de que no se olviden con el tiempo. —sin dudarlo lo abracé, fue extraño porque nunca había tenido un sentimiento tal como en ese instante, creo que nunca había dado un abrazo a una persona que conocí hace pocos minutos. A él pareció no importarle o tener algún inconveniente, aceptó mi abrazo y me regaló una sonrisa de agradecimiento.

Henry y yo comenzamos a sacar algunas cosas del Jeep, habíamos dado prioridad a la comida. Henry había conseguido leña, nos permitiría cocinar algo para esas personas. No podíamos aliviar su dolor, pero sin duda la comida los haría sentir mejor.

En medio del silencio, comenzó a propagarse el sonido de unas turbinas, de inmediato Henry y yo observamos el cielo y pudimos ver pasar el jet de Will. Mi corazón comenzó a saltar de la emoción, pensar en todo sobre estas personas me había hecho olvidar a Dave en el otro sentido, además de mis intereses de tenerlo como "curandero". Estaba emocionada por verlo, por querer corroborar que estaba bien.

—Violette, creo que falta un poco de sal. No se si les guste nuestro guisado, no conocemos su comida típica. —Henry me hizo concentrarme de nuevo en nuestra tarea, tenía razón, esa era una muy buena aportación que tampoco consideré. Solo esperaba que ayudara de alguna manera.

—Creo que les gustará, confía... —le regalé una sonrisa que respondió de igual manera mientras asentía y continuaba sazonando nuestra sopa de verduras.

El jet había desaparecido, probablemente habían ido a colocarlo por dónde estaba nuestro jet. Lo que importaba es que Dave está bien y que solo bastaban minutos para tenerlo de vuelta conmigo. Nunca creí que me haría tanta falta.

Cuando terminamos de cocinar, yo me encargué de servir cada plato, todos los niños que cuidaban de sus madres y sus padres se acercaron a ayudarme. Repartimos todos los platillos y estaba muy feliz por eso, ahora todos comenzaron a comer. Hubo un par de niños que me parecieron peculiares, son albinos, el albinismo en África era mucho más visto que en cualquier parte del mundo, pero nunca había visto gemelos con esa condición.

—Yaro, ¿Cuáles son sus nombres? —pregunté mientras señalaba con mi mirada hacia esos niños.

—Ellos son Jassir y Abu, tienen dos años, su condición ha causado una gran emoción en la comunidad y también fuera de ella, pero son de mucha preocupación para nosotros... Las tribus suelen cazar a los albinos para mutilarlos. Se cree que poseer una parte de ellos trae abundancia y prosperidad —imposible creer que eso fuera verdad, me resultaba increíble conocer ese dato y también me hacía sentir algo angustiada—. Nuestra comunidad los protege muy bien, su madre es muy joven y aún sigue aprendiendo de las matriarcas, su padre...

El sonido de un auto acercándose me hizo girar de inmediato, cuando observé a Dave bajar de ese Jeep color marrón, no podía ser más feliz.

—Yaro, Henry, discúlpenme, necesito... —Yaro asintió al igual que Henry, su sonrisa llena de compasión me hizo sentir nostalgia incluso antes de llegar a mi destino. No terminé la frase, corrí hacia Dave con rapidez, mi corazón se sentía en mi garganta, mis ojos se cristalizaron, mis manos sudaban y mi mente solo pensaba en todas aquellas cosas que quería decir, en todo lo que sentía. Esos diez metros parecían ser pasos cortos para poder sentir que respiraba y sentirme completa finalmente. Estaba bien, vivo y conmigo.

—...Violette, estaba muy preocupado por ti... ¿Qué pasó? —su confusión me encantaba, era hora de darme cuenta que sí estaba jodidamente enamorada, y que ya no tenía porqué ocultarlo, dudarlo, ni mucho menos callarlo; quería amarlo, quería abrazarlo, besarlo. Quería decirle que ya no sería indiferente nunca más a partir de ahora.
Odiaba que solo en un momento tan drástico como este, yo haya podido aceptarlo; pero ese es el destino, ese es el amor, eso es todo lo que se necesita para amarte, Dave.

Acaricié su rostro, observé meticulosamente cada parte de su cara. Suspiré y besé con profundidad sus labios, ya no me importaba nada más que sentir y colapsar de amor. Sentir sus labios, tocar sus mejillas, la humedad de mis lágrimas a través de ambos, pegarme a él mientras tomaba su cabello entre mis dedos. Ahora todo tenía sentido, ahora cada detalle era importante.  Me separé cuando el oxígeno me fue insuficiente y lo abracé con fuerza mientras las lágrimas seguían brotando de mis ojos. Después de unos segundos, Dave me apartó y limpió las lágrimas que recorrían mis mejillas con sus pulgares.

—Te amo, Dave, yo me enamoré de ti... Me enamoré de cómo sonríes, me enamoré de cómo eres con todos y siempre eres feliz, me enamoré de cómo cocinas y cómo caminas... No intento hacer rimas, solamente están saliendo de mi boca y parezco una loca... Estas semanas —pensaba como poder articular todas esas emociones, pero eran tantas que no podían siquiera pronunciarse— ...¡Mierda, lo diré! No he podido... No puedo dormir, no puedo pensar, no puedo respirar porque ¡Yo te amo! Quería irme y dejar todo atrás, quería dejarte para olvidarte porque estar tan cerca y no poder tenerte me enloquece, es hiriente—Dave volvió a abrazarme mientras acariciaba mi cabello, mis sollozos no dejaban producir una oración concreta sin titubear, pero finalmente estaba siendo clara, lo más clara y sincera que fui jamás —Y mi padre... Mi padre quería lastimarte, yo no quería perderte... Yo...

Sentía su corazón, cada latido un poco más vibrante que el anterior, el poder de mis palabras despertaba en él. Solo me apretaba contra su pecho mientras su aroma embriagaba mi ser. Me hacía sentir viva, feliz, completa. La sonrisa dibujada en mis labios y el suspiro que salió de mi nariz, fue la cúspide de todo. Callé, callé pero sentí, y sentí más de lo que creí —Tranquila, ya pasó... Estoy aquí. No me iré... Porque yo también te amo —besó mi frente y eso me produjo más emociones, tristeza, nostalgia, esperanza... Mi respiración se entrecortaba, parecía una niña recién regañada y suspirando entre su llanto por haber hecho una travesura. Esta situación era totalmente diferente, pero con Dave sentía esa protección que te produce el abrazo de tu madre o de tu padre como un consuelo. No había notado lo mucho que lo quería hasta que estuve a punto de perderlo.

—Te contaré más tarde —solté un poco más tranquila mientras sorbía los mocos de mi nariz con un pañuelo que Dave tenía en su pantalón— ...Bueno, necesito de tu ayuda con los ungüentos... Por favor ayúdame—señalé hacia Yaro, ambos caminamos luego de tranquilizarme.

—Sabes que lo haría sin que me lo pidieras... —sonreí, su palma rozó mis nudillos y sin observar, nuestras manos se encontraron y se entrelazaron.

Yaro se encargó de explicar lo que sucedía. No me importó como me veía, incluso si mis mejillas estaban rojas, si mis ojos estaban hinchados, ¿Qué importaba? Ya estaba completa después de todo.

—Dave... Los diarios. Olvidé decirte antes... —solté con preocupación, había olvidado tantas cosas importantes y primordiales por adelantar el viaje e intentar salvar su vida. Dave sonrió con gran satisfacción.

—No los necesito, Violette, los memoricé. —sonreí algo aliviada, no podía dejar de pensar en lo afortunada que era con este chico increíblemente tierno, sexy e inteligente.

Dave de inmediato comenzó por decirle a otros chicos de la comunidad qué plantas necesitaría, dijo que de ninguna manera esas personas morirían, se necesitaba amputar algunas partes de sus cuerpos, pero los ungüentos podrían ser de utilidad para evitar las infecciones con los torniquetes que habían colocado. Podríamos ir a la ciudad más cercana y acudir a un médico especialista en estos casos.
Dave parecía un profesional, fue tan paciente para designar tareas a cada chico, les explicó cómo acomodar los torniquetes y cada cuánto tiempo debían ser movidos para evitar la muerte de los nervios y que probablemente pudieran adquirir alguna prótesis. Eso me emocionaba demasiado, ahora Dave me había dado esperanza y a la comunidad también.
Yo no quería quedarme atrás y comencé a ayudar, conocí a la madre de Jassir y Abu, no podía ser una niña mayor a los dieciséis años, eso me desgarraba el corazón. Estaba herida en su brazo, Yaro dijo que la habían atacado por querer llevarse a Jassir, ella no lo permitió y tuvo que pagar las consecuencias. Afortunadamente las heridas no eran profundas, en unos meses sus heridas curarían y estaría mejor.

La noche llegó casi en un abrir y cerrar de ojos, estuvimos realmente tan ocupados que perdimos la noción del tiempo. La noche también era jodidamente hermosa, no recordaba la última vez que pude observar una estrella fugaz, era tan pequeña. Ahora podía ver casi una seguida de otra. No sabía qué deseos pedir, solo quería que Dave permaneciera conmigo, a salvo; y que de algún modo, mis padres en un punto, lo aceptaran.

—Deseo pasar muchas noches como esta a tu lado, observando las estrellas sobre el capó de un Jeep... —manifestó Dave y sonreí como una tonta por su comentario. Era nuestro descanso y nuestro primer momento a solas después de todo lo que trabajamos hoy.

—Si lo dices en voz alta es poco probable que se cumpla... —chasqueó la lengua en desacuerdo y siendo algo desafiante.

—Creo que depende de nosotros más que de una estrella... ¿Y si te lo pido? ¿Lo harías? ¿Pasarías cada noche conmigo viendo las estrellas y el anochecer? —el sonido de la tos fingida de Will nos hizo salir de nuestro gran momento cursi.

—Lo siento, no quería interrumpir. Yaro acaba de designar unas chozas para pasar la noche... —Dave y yo no estábamos acostumbrados a ser encontrados en un momento así. Como si fuéramos adolescentes nos levantamos de inmediato del capó y seguimos a Will, fingiendo que nada había pasado. Ambos caminamos con nuestras mejillas ardiendo igualando el color de un tómate.

Yaro nos ofreció una choza para Dave, Henry, Will y yo. Cuando llegamos, por fortuna pudimos ver que estaba separada y que Dave y yo podríamos tener un poco de privacidad, necesitaba hablar con Dave sobre lo que había pasado y aproveché la oportunidad en cuanto Henry y Will salieron a merodear por la comunidad en el Jeep, querían corroborar que no hubiera tribus a la espera del ataque. Dave se había ofrecido a ayudar, pero Henry amablemente le dijo que él y yo necesitábamos hablar. Estaba nerviosa por ese momento, tenía miedo de su reacción, de si se molestaría por ocultarle lo de mi proyecto o que no lo haya considerado después de lo sucedido.

—Dave, yo... Después de lo que pasó ayer, bueno, anteayer... Yo no quería tener una especie de compromiso, me aterré por lo que sucedería entre nosotros, no me atreví a decir que te amaba también, por miedo. Pero ahora quiero que sepas que ese sentimiento es muy real. Te oculté mi viaje porque quería que fuera una manera de aclarar lo que sentía, de distraerme, de salir de todos esos problemas que hemos arrastrado y olvidarte—Dave estaba sentado en una hamaca frente a mí, su expresión era algo seria y eso me causaba más inquietud—. Por la mañana me levanté y acudí a la empresa por los últimos asuntos pendientes de esto, fui por algunos ahorros y cuando pasé por la oficina de mi padre escuché que quería hacerte daño y hacerlo parecer un accidente —suspiré a punto de soltar el llanto, mi voz comenzó a quebrarse, concluí finalmente— ...No sé qué habría pasado de no haber estado ahí, probablemente estarías muerto ahora y yo sería una imbécil por no haber dicho que también te amaba.

—...Tranquila... —Dave se arrodilló frente a mí y me acurrucó entre sus brazos con un abrazo, me separé mientras limpiaba mis mejillas nuevamente.

—¿No estás molesto conmigo? —Dave negó con la cabeza para luego hablar.

—No me molestaría contigo por algo así... Entiendo cómo te sentiste, probablemente me precipité al confesar lo que sentía, pero necesitaba decirlo, Violette. Tenía tanto tiempo guardando ese pensamiento y esa noche fue mi oportunidad. No quería asustarte, mucho menos presionarte a alguna relación, incluso ahora puedo decirte que no es así. Me alegra que de algún modo las cosas hayan resultado de esta manera, ahora estamos haciendo algo positivo y sé que necesitabas mi ayuda para eso —Dave sonrió cuando mencionó su última oración, lo mencionó con algo de sarcasmo, pero para mí eso era completamente cierto, aunque no quería aceptarlo frente a él— ...por cierto, en la mañana tenía demasiado miedo ¿Sabes? Me sentí utilizado, como un objeto sexual... all i wanna do is make love to you —solté una risa inmediatamente, creo que esa canción de Heart definitivamente se acoplaba a nuestra historia. Su voz afeminada tratando de igualar la canción, le agregaba más simpatía.

—Eres un tonto —sonreí y lo besé— ...Si tu oferta de ver las estrellas cada noche a tu lado sigue abierta, me gustaría aceptarla... —pronuncié con mis ojos cerrados sin separarme de él, nuestras frentes juntas y su respiración me encantaba. Los pequeños detalles del amor correspondido, del loco amor correspondido. Soltó una risa apenas perceptible y asintió mientras tomaba mi rostro entre sus manos para presionar sus labios contra los míos.

—No podría ser más que feliz con eso... —mis lágrimas se habían borrado al igual que esa sensación de mi pecho, tenía miedo de las cosas que vendrían, de las miles de batallas que tendría que pelear contra mis padres, pero lo valía. Dave lo valía. Esta vez, elegiría mi felicidad antes que la de alguien más, y él lo era para mí, me hacía feliz.

Dave se recostó a mi costado, esperaba y deseaba que la hamaca fuera lo suficientemente resistente para poder con nuestros pesos. —Es increíble ¿No?, Todo esto... Algo totalmente diferente... Todos estos años he sido tan egoísta, pienso todas las veces que desperdicié algo tan importante, ver esto me destruye... —Dave suspiró y asintió algo triste.

—Esta vida ningún ser humano la merece, esos niños deberían crecer sin miedo... —nos quedamos en silencio por unos segundos, yo aproveché para hablar sobre las cosas que sucederían después, no podíamos quedarnos tanto tiempo. La intriga de lo que pasaría después con mis padres me mataba.

—Dave, necesitamos regresar... Hay cosas que arreglar en Nueva York, necesito enfrentar a mi padre y renunciar a la empresa, conseguiré un buen empleo y veremos cómo poder seguir ayudando... Henry y Will parecen muy comprometidos con esto, probablemente quieran seguir como nosotros —Dave escuchaba con atención mientras su mirada se centraba en mis ojos y mis manos, las tomaba entre las suyas y podía sentir lo cálidas que eran y lo bien que eso me hacía sentir.

—Tienes razón, debemos volver. Prometo que ayudaré de algún modo, aprovecharé mis estudios de mercadotecnia en alguna empresa, seguiré trabajando en el bar. Espero abrir ese restaurante que deseo pronto, para poder obtener ganancias... Saldremos de esto, Violette, juntos —sonreí. Dave era todo lo que necesitaba y quería, me sentía totalmente segura con él, me sentía fuerte y mis miedos desaparecían mientras él estuviera conmigo.

—Mañana hablaré con Henry. Ahora vuelve a tu hamaca antes que regresen, no queremos malentendidos, ni una mala reputación en un lugar que acabamos de conocer —Dave soltó una pequeña risa y besó mi frente.

Dormimos un poco, sin duda alguna estos días serían pesados y de mucho trabajo...

Finalmente, puedo decir que el amor no es tan malo, el amor puede destruirte, sí, pero también te construye. El amor es poderoso y hermoso. No importa cómo ni cuál sea, siempre habrá alguna forma de avanzar, y el amor, propio y compartido, puede hacer gran diferencia en el transcurso.

Holaaaaaaa! Primero que nada, me esforcé por actualizar precisamente este día porque siento que puede funcionar como un regalo, aún cuando sea leído la mañana siguiente, el mes siguiente o el año siguiente, creo que pensar en esto me hace sentir muy feliz. Deseo que pasen un año maravilloso, hace días subí un pequeño mensaje de navidad y bueno, la verdad aquí seré breve, solo tengo buenos deseos y agradecimientos para ustedes, que esté 2022 pueda ser el año más hermoso en cualquier aspecto, deseo salud, bienestar y mucho, pero mucho amor propio 💗.

Creo que este capítulo es, sin duda, el más largo de la historia. También, si notaron, cambié el pequeño banner de nota de autora,  creo que ya era urgente un cambio y este fue el momento perfecto «ya comenzaba a odiarlo».

En multimedia dejé una canción que en lo personal amo rotundamente y mi propósito principal al colocarla, es volver a recordar y recapitular lo que sucedió la noche en la que nuestros queridos protagonistas se conocieron, así pasó todo y es hermoso... Bueno, antes de la tragedia. Y si les interesa, también les dejo la canción que mencioné en un pequeño fragmento donde Dave canta, me gusta mucho este tipo de canciones en donde cuentan una historia sin que sea vulgar como lo de hoy en día...

En fin! Ya es horaaaaaa, así que sí, disfruten está noche, este año y muchas buenas vibras para ustedes, gracias por hacer mi vida más feliz, y por permitirme compartir este amor por la escritura y por Dylan también. Se les ama demasiado 🥺💗

Me puse muy sensible jajaja

✨Besitos✨

Continue Reading

You'll Also Like

57.8K 3.5K 37
Emma Brown es una joven pintora y estudiante de Bellas Artes. Su vida está llena de colores, pinceles y lienzos, y su mundo gira en torno a la creaci...
28.2K 2.9K 26
"Nessy siempre recordó aquellos hipnóticos ojos grises que la cautivaron en una noche pasada. Ocho años después, el destino conspira para reunirla nu...
94.6K 7.4K 55
🍎⚠Advertencia⚠🎸 🎸En este libro hay LuciAdam [Lucifer x Adam] Sino te gusta este ship por favor no comentar Hate o Cringe, de lo contrario el comen...
54.8K 2.8K 44
Holaa, esta historia sera sobre un amor de un felino y un perro pero será una historia con muchos pasados oscuros y cosas pertubantes, espero que te...